La Mazmorra del Snarry
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

La Mazmorra del Snarry


 
ÍndicePortalÚltimas imágenesRegistrarseConectarseFacebook
La Mazmorra del Snarry... El escondite favorito de la pareja más excitante de Hogwarts

 

 Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches

Ir abajo 
2 participantes
AutorMensaje
Neki Snape
Explota calderos
Explota calderos
Neki Snape


Reto one shot DIS 2015 Calendario Snarry 2015 Yo entré 2 (D.I.S. 2014) Reto libre de fanarts D.I.S. 2014 Juego palabras hechizadas DIS 2015
Femenino Cantidad de envíos : 146
Fecha de nacimiento : 23/06/1993
Edad : 30
Localización : Villahermosa, Tabasco
Galeones Snarry : 61443
Fecha de inscripción : 28/12/2012

Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches Empty
MensajeTema: Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches   Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches I_icon_minitimeVie Jun 12, 2015 2:08 pm

Luna Llena de las Largas Noches


Recuerdo sentir a papá triste por primera vez, su desesperación, su angustia. Aquella noche no dormimos mucho, mi hermana y yo llorábamos porque sentíamos lo que él sentía y no teníamos consuelo.
Y con cada amanecer la desesperación daba paso a la aceptación. Papá se armó de valor y decidió que no podía quedarse allí, llorando para siempre. Nosotras estábamos creciendo, teníamos necesidades y había un solo lugar al que querría ir.

Pidió ayuda a la sucesora del profesor Dumbledore, la profesora McGonagall, su antigua institutriz de Transformaciones. Habló con ella por mucho tiempo, mientras nosotras éramos cuidadas por la tía Hermione y cuando volvió, le dijo con una sonrisa que ella le había aceptado como profesor de vuelo.

Papá vendió la casa y guardó todo el dinero en Gringotts como ahorros para cuando tuviéramos alguna emergencia. Nos mudamos al castillo en junio de ese año, cuando comenzaban las vacaciones. Llegamos a Hogwarts en tren, yo colgada a la espalda de papá gracias a un canguro y mi hermana aún pequeña al frente.

Cuando mi hermana cumplió un año aún no comía mucho, era un poco delicada y lloraba demasiado por las noches. Debido a los reclamos de Filch, papá tuvo que insonorizar la habitación. Había escogido profesor de vuelo porque era una clase que solo se impartía a los niños de primer año y, además, le encantaban los partidos de Quidditch. No tenía que pasar mucho tiempo estudiando sobre qué temas iba a dar en clase, así que nos prestaba la suficiente atención.

El año inició tranquilo y, aunque papá cabeceaba en el comedor porque Luna no lo había dejado dormir la noche anterior, fue bien recibido por el alumnado. Al principio papá pensó que era buena idea llevarnos a la clase porque así nos cuidaría y tomaríamos aire fresco. Había puesto una pequeña casita improvisada para protegernos del sol, mantas y muchas almohadas. Luna dormía todo el día y por ella no había problema pero, lo que mi papá no había contemplado era que yo ya empezaba a caminar.

Durante una de sus clases me escurrí entre los alumnos y me colgué a la primera escoba que vi, que fue la de un niño asustadizo de Gryffindor. Papá se aterró tanto que gritó: «¡Lily Eileen Snape Potter! ¡Baja de allí ahora mismo» y el chico entró en pánico, alzándonos más aún. Yo reía divertida y papá acabó con nosotros y el niño en la enfermería. A partir de ese momento nos dejó al cuidado de la vieja Madame Pomfrey y su aprendiz, Hannah Abbott.

Papá dice que yo tenía un apetito voraz, que a todas horas hacía rabietas pidiendo comida. Me convertía en lobo solo para dar vueltas por toda la habitación… ¡Y ladraba! Decirlo ahora me da vergüenza pero lo hacía… y no hay que llorar sobre la leche derramada.

Luna y yo siempre hemos sido como las dos caras de la moneda, parecidas y distintas. Yo el día y ella la noche. A mis seis años yo ya corría por todo el castillo, explorando cada rincón y “cazando” alimañas. Para mí era genial ser un lobo y relucía como uno la mayor parte del tiempo, marcando mi territorio por aquí y por allá. A sus seis años, Luna se sentaba en la biblioteca silenciosamente a leer.

—Pon atención, Lily, esto es importante —Me dijo papá un día, estaba frente a las dos con un cuaderno de dibujos, nos contaba un cuento—. Lily y Luna son lobas… pero no deben andar mostrándolo a todo el mundo.
—¿Por qué? —Pregunte yo en mi ingenuidad.
—Pues porque no es correcto, tonta —Respondió Luna con su aire de sabionda que a mi tanto me sacaba de quicio.
—No soy tonta, tonta.
—Si lo eres —Me sacó la lengua y yo gruñí en advertencia.
—Basta las dos, ninguna lo es. Pero Luna tiene razón, cariño, no es correcto. No todos los magos son lobos y muchos de ellos les temen.
—¿Por qué? Jamás le hemos hecho daño a nadie.
—¿Recuerdas que ese chico Slytherin que te lanzó un hechizo cuando te transformaste frente a él? —Yo asentí, cachándole el punto—. Bueno, muchas de las personas del mundo mágico piensan que los protectores lunares son criaturas peligrosas y terminan por matarles. No quisiera que les hicieran daño —Nos acarició la cabeza y ambas nos acurrucamos contra él—. Que sea nuestro secreto ¿vale? Si lo descubren, podrían querer que nos fuéramos del colegio.
—Vale —Dijimos al unísono.
—Y, Lily… no caces a los animales pequeños, mucho menos a las mascotas de los demás.
—¿Por qué?
—Porque eso pondría triste a tu padre…
—Vale, papi. No lo haré más.

Papá tuvo complicaciones para criar a dos pequeñas lobas, jamás había preguntado a mi padre como había sobrevivido él a su infancia. Cuando nos enfermábamos nos sabía qué hacer, si llamar al medimago o al especialista en criaturas mágicas, algunas veces termino por llevarnos con el tío Hagrid… pero crecimos en un ambiente divertido, rodeados de amor por los tíos Ron y Hermione, que tuvieron sus propios hijos. Con el tiempo nos hicimos más altas y más fuertes, nuestro pelaje lobuno se hizo más espeso y aullábamos a la luna llena.

Sin embargo, papá siempre se perdía en sus propios pensamientos. A veces lo atrapaba mirando al cielo y sus ojos brillaban como si fuera a ponerse a llorar. Pero no lo hacía, papá no había llorado nunca frente a nosotras.

—¿Extrañas a papá? —Le pregunté una noche de luna llena.

Papá asintió sin mirarme. Entonces lo vi en sus ojos, a alguien distinto a mi amado papi, era un extraño triste y desolado. Asustada, le tomé de las mejillas y le obligué a volver conmigo. Las lágrimas se agolparon en mis ojos y él me miró por fin.

—Perdona, cariño —Susurró—. Me he perdido un momento… ¿Por qué lloras?

No me atreví a decir nada, solo le abracé y, no por primera vez, odié a mi padre por habernos abandonado.


Capítulo Siguiente

Capítulo Anterior

Inicio
Volver arriba Ir abajo
Yuki Fer
As de oclumancia
As de oclumancia
Yuki Fer


Mejor posteador del mes  (Mayo 2015) Yo entré-Mes del amor [Mejor posteador del mes] Enero 2015 [Mejor posteador del mes] Junio 2014 Yo entré-Vacaciones 2015 Juego lechuza chismosa-D.I.S 2015 Juego Yo entré-D.I.S 2015 Juego palabras hechizadas DIS 2015
Femenino Cantidad de envíos : 1504
Fecha de nacimiento : 07/04/1992
Edad : 32
Galeones Snarry : 107729
Fecha de inscripción : 30/07/2011

Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches Empty
MensajeTema: Re: Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches   Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches I_icon_minitimeSáb Jun 13, 2015 12:06 pm

Que triste capítulo.. :'(porquee sev porque desapareciste pobre Harry tener que vivir con la esperanza de que sev algún día volverá


Última edición por Yuki Fer el Sáb Jun 13, 2015 12:11 pm, editado 1 vez
Volver arriba Ir abajo
http://yukif.livejournal.com/
 
Plenilunium: Luna Llena de las Largas Noches
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» Plenilunium: Luna Llena de la Cosecha
» Plenilunium: Luna Llena de las Flores
» Plenilunium: Luna Llena del Perro
» Plenilunium: Luna Llena de la Rosa
» Plenilunium: Luna Llena de Nieve

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
La Mazmorra del Snarry :: Biblioteca de la Mazmorra :: Fanfics Snarry :: Fanfics de Neki Snape-
Cambiar a: