Baile de Invierno Inusual. Capítulo 7

Tema: Baile de Invierno Inusual. Capítulo 7 Lun Mayo 26, 2014 7:17 am

Continuación
Baile de Invierno Inusual

¿Dónde se habría metido? No había llegado en toda la comida y... Probablemente... Sonrió de pronto de lado a lado torciéndola levemente. Quizás estaba con Draco, ya que éste tampoco se hallaba y claro, no podía ser solo una coincidencia. Él no era muy avispado, pero era algo más que evidente el simple hecho de ello.

Se encogió de hombros feliz por Harry y continuó su camino junto a Hermione. La chica no hacía más que estar en su pompa o meterse en las suyas, pero sabiendo como era, normal que no hablase sobre su chico, bueno, no, normal no era, ése chico no era normal... Pero sí la reservada de Hermione, que para colmos, trataba de esconder las preguntas que pudiera hacerle con preguntas propias acerca del paradero del amigo que faltaba.

- ¿Dónde se ha metido Harry?- Le preguntaba una y otra vez la muchacha, ya no sabía qué contestarle.

- Ya te he dicho que no lo sé, que creo que tenía trabajos pendientes.- Resignado repitió la misma respuesta con algo de sorna y doble sentido en aquellas últimas palabras, ¿qué diría Hermione si lo supiese? ¿Cuándo tenía planeado contárselo? No era cosa suya obviamente.

Bufó una vez más y apresuró el paso para perderlo de vista.

Encima de que no le contestaba gritando o de malos modos se enfadaba. ¡Por qué tenía que ser tan complicada! Le dieron ganas de arrojar cualquier cosa al suelo, pero se contuvo, más bien el aliento cuando notó una delicada mano en su hombro. Con un simple apretón en su hombro consiguió erizarle el vello de la nuca en un solo instante.

- Te espero en 15 minutos en el jardín trasero.- Susurró de pasada sin llegar si quiera a mirarle las mejillas más sonrosadas que su propio color de cabello.

Escuchar ésas palabras le habían sentado como melodía para sus oídos, no todos los días conseguía uno sus propias metas, y claro, más la que se había puesto él… Sonrió débilmente caminando hacia dónde se iban a ver. ¿Quién lo iba a decir? Los Slytherin últimamente estaban contradiciendo demasiado a su odio por los Gryffindor… Y sin poder evitarlo, rió entre dientes ante tal pensamiento, había doblegado a una serpiente, y nada podía hacerle más feliz en el mundo. Quién lo diría. Y además, quién diría que él se fijase en una.

- Ayer no pude hablar contigo en todo el día. ¿Dónde estuviste?.- Se quejó su compañero haciendo una mueca mientras se recostaba hacia atrás en aquel banco de piedra. Estaban bastante alejados y nadie podía verlos.

- Sí, estuve ayudando a Harry.- Suspiró levemente ladeando la mirada hacia él.- Pero ya estoy aquí, para ti.- Añadió recibiendo su mirada recíproca junto un ligero beso que dejó a ambos una pequeña sonrisa pintada en sus comisuras.

- No está nada mal.- Comentó vagamente con una cara fingida de sorpresa e incredulidad por parte de Ron que lo obligó a ponerlo a prueba.

Dejó que enredase sus dedos en sus cabellos pelirrojos mientras se deleitaba con el sabor que tanto tiempo había estado esperando y batallando por él. Su lengua era hábil y magistral, la suya no se quedaba atrás. No por nada era apodado "El Don Juan de Slytherin" y no por nada había formado comidilla con Draco para serlo. Pero ahora. En éste preciso momento, era suyo, solo suyo, y sería de su uso exclusivo de aquel día en adelante.

"Recordaba sus nervios antes de enfrentarlo cara a cara. La esperanza era algo que no tenía de su parte, pero quizás la desesperanza jugó en su baza al ocurrir algo que le era tan imposible como que Draco estuviese enamorado de Harry.

Él rechazó en sus propias narices a Blake Shyun, un compañero de clase del acompañante al baile de Hermione, jodida Hermione, que suerte tenía. Pero lo realmente importante, era la razón. Blake Shyun era uno de los muchachos más cotizados de Gryffindor, y sin embargo, se acercó a él sin más preámbulos para pedirle simplemente ayuda respecto a su buen amigo Draco.

Que iluso fue en aquel momento, había pensado que le podía haber interesado su presencia, pero claro, al principio se trataron de enemigos al conocerse. Él insultó a Hermione porque tuviese uno de sus padres muggles, hecho que disgustó en sobremanera al pelirrojo y estalló su furia rojiza. Un cúmulo de insultos y peleas se cernieron sobre ellos. Eran críos. Se arrepentía de todo aquello.

Pero conforme crecieron. El platino de Slytherin no había dejado de meterse con su color de pelo, el rubio estaba demasiado visto, y claro, como tenía envidia de pelo diferente se metía con u color naranja-rojizo que tanto caracterizaba a los Weasley, sin embargo, ahí fue donde se fijó en él. No se había reído, se limitó a rodar los ojos y apartar la mirada mientras el pelirrojo se perdía en la sensación que acababa de encontrar en ése chico. Y pensar que anteriormente había estado lisonjeando con Seamus durante varios meses, por no decir un año, se arrepintió de no haber valorado antes lo que también había fuera de sus fronteras.

Y así como así, Ron consiguió que le negase una cita a Blake Shyun por los motivos que fueren, no eran de mayor trascendencia, solo el hecho de que, ésa misma noche, no dejó la oportunidad de antes del toque de queda, tomarlo del mentón para voltearlo y cruzar un suave beso por sus labios, limpio, sin ataduras, solo una respuesta.

- ¿Quieres venir conmigo al baile?- Su respuesta lo pasó a ser de su entera exclusividad, con él no era un Don Juan, era simplemente un Zabini locamente enamorado de un Gryffindor inepto, pero terriblemente adorable, tal y como él le había llamado."

Las manos del moreno habían pasado del cabello entrelazado a una palpación intensiva de la zona de su espalda, recorriéndola de nuevo como adulaba hacer cada ocasión que tenía. Tenía la espalda ruda y musculosa aunque nunca había visto a Ron hacer tanto ejercicio para ello, sin embargo, perfilar con los dedos sus músculos al igual que hacía él con los suyos era excitante. Pasó una de éstas por el límite entre su jersey y el pantalón que llevaba debajo y no pudo evitar escuchar un leve gemido en su oído.

- Sé que me has echado de menos, pero aquí nos van a ver…-Murmuró comenzando a coger tono mientras dejaba que siguiese acariciando aquella zona que le estaba sacando susurros ahogados.- Mañana… Es el baile… Allí… Nadie reparará en que estemos o no.- Trataba de conseguir decir entre suspiritos leves por una mano ágil que se había colado dentro de sus pantalones, Zabini, ay Zabini.

- Está bien.- Concedió retirando ambas manos de su presa.- Pero como no… Te daré un castigo.- Le advirtió medio sonriendo de forma maliciosa.

Era un trozo de pan con él, aunque exteriormente se mostrase algo más rudo y altamente ofensivo acerca de mestizos y muggles, llegando a ser incluso más despreciable que Draco, le

- ¿Ah sí?- Se interesó en el tono de su sonrisa y en sus palabras.

- No quieras comprobarlo…- Acercó su rostro para morderle el labio con fiereza y depositarle después un fatídico y ansioso beso que lo dejó a medias, quería más, y su tiempo se agotó. Debía de volver con su casa y él con Harry, que por cierto… ¿Dónde se habría metido?

- Me gustaría comprobarlo... Pero será en otra ocasión.- Ruborizó sus mejillas jugueteando a hacerle formas en el cuello a base de caricias mientras recorría con sus labios fervientemente los suyos. Se separó lo justo para poder mirarlo.- Mañana nos vemos.

- Hasta mañana.- Copió la despedida volviendo a darle un suave beso que se convirtió en sonrisa.- Dale ésto a Harry, es de parte de Draco.- Dejó algo en sus manos que realmente dejó alucinado a Ron.

No podía dejar de mirar desde aquel banco cómo se marchaba. Joder. Que culo tenía. Pero, eh, un momento. ¿No estaba Draco con Harry ahora mismo? ¿Por qué entonces...? Un mal presentimiento lo obligó a levantarse y salir corriendo hacia el castillo.

El salón de Gryffindor estaba absolutamente vacío. No había ni un alma en su interior. Los estandartes colgaban impolutos sin que fuesen tomados por algún alumno de primer año y revoloteados por donde quiera que jugasen. Ahora mismo todo estaba en silencio y realmente ese mismo vacío lo hizo dejarse caer sobre uno de los sofás del salón.

Debería de estar en clase en lugar de zanganear allí, pero, ¿qué podía hacer si no? Allí se sentía seguro, fuerte, con todos sus credenciales rodeando y recordándole quién era y que ésta era su casa pasase lo que pasase. Fuera de aquí, todo se había convertido en un auténtico caos, su año, hasta hacía exactamente 5 días había sido aburrido, ahora... Y pensar que había querido un nuevo acontecimiento que le hiciese movido el año sin poner su vida en peligro para variar. ¿Acaso con lo que había pasado hoy no había firmado su sentencia en Hogwarts? Suspiró levemente restregándose con pereza la mano por la frente, rozando la cicatriz.

Por un momento cruzó un pensamiento de arrepentimiento y como si no fuese dueño de su cuerpo levantó camino hacia el panel que se alzaba en una de las paredes buscando ver qué clase era la que... ¿Ahora le tocaba clase con Severus? ¡¿DE VERDAD?! Rió sarcásticamente y volvió a tirarse sobre el sofá con tal sonrisa borrada y la mirada gacha. No podía esconderse durante todo lo que quedaba, por ésta tarde podría escabullirse aunque le diera un castigo, pero al menos no se encontraría con que lo dejase en ridículo. ¿Y si se lo contaba a otro profesor? O peor, ¿a Dumbledore? Sintió que se mareaba de nuevo, últimamente eran demasiados mareos continuos y progresivamente ascendentes.

- ¿Harry?- Preguntó una voz al principio del pasillo que conducía a la sala común. Su primera reacción fue asustarse, ¿habían venido a por él? La segunda al reconocer a su amigo estuvo a punto de echarse a llorar.

- Estoy aquí.- Lo llamó guarecido en una de las esquinas del mullido asiento.

- Eh, ¿qué haces aquí?- Su tono era de verdadera preocupación, no era de menos, su aspecto era horrible, ¿le había hecho algo Draco? Como le hubiese tocado un solo pelo lo iba a hacer trizas. Se sentó a su lado y lo miró con la misma cara que su tono mostraba.

- Yo... Dios Ron...- Agradeció su acercamiento y no pudo evitar rodearlo con los brazos. Aquella situación le había superado.

- Harry, por Merlín, no me asustes.- Acogió el abrazo presionándolo contra él.- ¿Qué pasó? ¿Te hizo algo Draco?- Insistió yendo al grano, notando cómo hundía la cabeza en su hombro.

- No, Draco no me... hizo nada.- Se limitó a decir tratando de contener las lágrimas, ¿qué iba a hacer ahora?

- ¿Entonces? Harry por favor.- Mantuvo firme ése fuerte abrazo dándole todo el apoyo que necesitase, ¿qué habría pasado?

- Fue Severus.- Susurró tan débilmente que esperaba no lo escuchase, pero, para su desgracia sí que lo hizo.

- ¿Cómo? ¿Severus Snape? ¿Que fue él? No entendía nada. ¿Qué le habría hecho para estar así? La confusión y la rabia por ése estúpido profesor aumentaba, y aún más al ver el cuerpo de su amigo totalmente hundido y apoyado en el suyo sin querer mediarle palabra. Ahora tenía clase de... Atisbó la respuesta y torció los labios, vaya, hoy ya no iban a ir a clase.

- Espera Harry. ¿Te gusta...?- Abrió los ojos alucinando por lo que acababa de narrarle su amigo.

- No.- Negó rápidamente sintiendo un calor inmenso en sus mejillas palpitar.

- Vamos, que sí.- Tomó por respondida su pregunta sin poder cerrar un poco más los ojos abiertos de par en par que tenía.

- No sé qué hacer Ron...- Murmuró suavemente tomando la almohada de su compañero entre sus brazos para rodearla y quedar abrazado a ella tirado en su cama.

- Harry, porque te empezase a gustar Draco no significa que te tengan que gustar todos, es normal que te fijes en cualquiera.- Hizo una mueca tratando de serenar a su amigo y quitarle ésas ideas de la cabeza, porque si eran fundadas... Aquello si que iba a ser un problema.- No creo aún así que les vaya a contar nada a los profesores...

- No sé Ron. No sé nada.- Se llevó las manos a la cara dándole la espalda al pelirrojo que estaba ya en su cama. ¿Y si lo hacía? ¿Y si...? Oh dios, a todo aquello... no había elegido aún pareja para el baile. No pensaba ir.

Otro problema más adyacente. El baile. ¿Cómo iba a hacer para poder faltar? ¿Y para ir sin pareja? ¿Y si fuera con... Draco?

- Harry, Draco me dio algo para ti.- Indicó buscándola la pequeña cajita que había guardado debidamente para entregársela. Harry volteó hacia su amigo sorprendido e interesado por el contenido de lo que podía ver ahí, ¿de verdad se lo había dado a Ron con lo que detestaba a los "Weasley" para él? Enrojeció de pronto olvidándose del asunto de Snape.

Tomó la pequeña caja azulada con sumo cuidado y la observó con detenimiento. El tacto era algo rugoso pero limpio, no presentaba ningún detalle, elegante como único símbolo de la familia Malfoy. Un escalofrío le recorrió desde la espina dorsal pensando en aquel objeto que guardaría en su interior, ¿qué sería? Tenía algo de miedo, podía sentir que tenía algo de miedo por saber lo que sería, pero... No estaba seguro si el miedo realmente era por ello o por lo que pudiese significar...

Ron, cual cotilla que era, se sentó a su lado ya que desde su cama no veía lo suficiente. Tomó aire sintiéndose algo nervioso porque su amigo estuviese a su lado, pero a la vez protegido por lo que pudiese haber y lo hizo. Abrió lentamente la tapa, como si fuese una bomba de relojería que podría explotar de exceso de velocidad y ahogó un grito de sorpresa en lo más profundo de su garganta al ver lo que contenía y la cajita estuvo apunto de descender hasta el suelo ya que su pulso comenzó a tambalear.

El pelirrojo abrió estrepitosamente los ojos, sin duda se esperaba cualquier cosa menos éso.

Una corbata de Slytherin.

Su corbata de Slytherin. Ni más ni menos.

Tragó saliva sonoramente y por un momento olvidó todo lo que había a su alrededor. Rozó con cuidado la suave corbata como si fuese un tesoro y la miró con profundidad. Todo a su alrededor era negro, de ningún color. Únicamente su ojos color esmeralda centelleaban en una absoluta oscuridad que brilla por la caja. Tomó con delicadeza la corbata notando cada hilo, cada punto, dejando a continuación el recipiente en su cama, acariciándola con cuidado. Jamás había tenido una tan cerca, tan en sus manos... Tan... Suya, aunque Draco fuese el verdadero dueño. Algo en su interior se revolvió de alegría al rozarla, como si quisiera haberlo hecho durante demasiado tiempo y allí estaba, sosteniendo una cual propietario de ella.

- Harry... Hay algo más dentro.- Un susurro mudo fue lo único que sus oídos aceptaron. Sacudió la cabeza volviendo a la realidad y dejó la tela verde y plateada debajo de su almohada. Él era fiel a Gryffindor hasta el final. Miró hacia ésto con interés.

Una nota: "No sé si entenderás el significado que implica darte ésto. Espero que así lo hagas y no dejes que nadie la vea... ¿Vendrás al baile conmigo?"

Exhaló lentamente, ¿qué tenía que decirle ahora? Después de lo de la corbata... ¿estaba condicionado a ir con él? Pero... ¿Qué podrían decir? No podía hacerlo joder... El colegio... Desvió unos segundos la mirada hacia el pelirrojo buscando una respuesta muda en sus ojos, pero no la llegó a encontrar realmente.

¿Y si perdía la oportunidad? ¿Volvería a presentársele? No podía dejar escapar a... Cerró los ojos con fuerza. Comenzaba a marearse de nuevo, sus pensamientos eran confusos y cambiantes, ahora se cernía el asunto sobre el baile, sobre... Sobre sus sentimientos. Decir que no le había conmocionado ése regalo tan inesperado y perfecto sería mentir, pero... ¿Eran ésos sus verdaderos sentimientos? ¿Estaba dispuesto a ser más aún la comidilla de los cotilleos? Inspiró con fuerza y abrió los ojos.

- Ron, dame una pluma.- Le exigió bastante apurado con el papel aún en la mano.

"Sí." Escribió en el papel que él bien conocía con letra firme.

- ¡Harry!- Lo llamó Ron con los ojos atónitos, llenos de alegría. Había hecho lo mejor, era un valiente. Y para más, entreabrió la boca al ver cómo el papel volaba de entre sus manos, surcando el aire y salía disparado de la habitación como si tuviese vida propia.- Vas... a ir con Draco.- Era incapaz de creérselo aún del todo, hacía unos días él mismo estaba acusándole y ahora... Incluso había servido de paloma del amor.

- Sí.- Dijo únicamente sonriendo anchamente, ¿había hecho lo mejor? No lo sabía. Pero solo atisbaba una forma de descubrirlo, yendo con él al baile.

- Ahora, deberíamos ir a la última clase, toca en el jardín.- Lo alentó levantándose de la cama, no le gustaba faltar, pero hoy había sido un día especial... Y temía las represalias de Snape, por lo que no quería más.

- Sí, adelántate, voy a guardar ésto.- Mantuvo la sonrisa mientras se volteaba a guardar la bufanda en un sitio más seguro.

No podía dejar de pensar en lo que acababa de hacer, acababa de declararse abiertamente ante todo el colegio gay, ¿diría algo Draco sobre el tema? Joder, no había pensado en ello, esperaba que no fuese así... Sería mejor que en todo caso se enterasen todos en el baile, por Merlín, la que acababa de liar...

Suspiró tratando de mantener los papeles. Ron ya se había marchado, pobre, no quería haberlo retenido durante 2 clases aquí, aunque... Lo necesitó a su lado para apoyarse, quizás si no hubiese hablado con él ahora mismo estaría loco de tanto pensar en ello. Aún así, no se había olvidado del problema con Snape... ¿Por qué tenía haber hecho aquello? Serían sus hormonas.

Los pasillos estaban desiertos, solo se escuchaba el leve murmullo de los cuadros conversar y sus propios pasos secos. Aceleró el ritmo algo agobiado, no era fan de andar solo y sin escuchar nada en aquel momento, tenía los nervios de punta.

Por un lado tenía una puerta colapsada en su cabeza. Todos sus pensamientos intentaban entrar por la puerta para ser atendidos a la vez pero al hacerlo a la vez no dejaban pasar ninguno. Por otro lado, las preocupaciones que se cernían sobre él ya eran más allá de sus sentimientos, el Libro de Pociones.

- Harry.- Una voz suave y dulce le llamó por detrás que reconoció al instante, tranquilizándose en una gran medida que la chica si quiera imaginaría.

- Ey, Luna.- Se volteó lentamente hacia ella mientras ésta se acercaba a él a un ritmo musical que tanto le caracterizaba.

- ¿Qué tal el día?- Sonrió llegando hasta él.

- Cansado.- Se limitó a decir animado sin querer entrar en el tema, no era opción hablar con ella de aquello.- ¿Y el tuyo?

- Bien.- Mantuvo la sonrisa unos segundos, aquella chica no era de muchas palabras realmente.- Por cierto, el profesor Snape me pidió que te buscase, dijo que fueras a su despacho de inmediato.- Musitó con voz aguda mirando hacia otro lado y luego de nuevo a él.

El tiempo volvió a detenerse. ¿Severus lo llamaba? Abrió los ojos un poco sorprendido. ¿Que fuese a su despacho? ¿Para qué quería verlo? Su respiración se volvió entrecortada y por un momento temió que Luna se diese cuenta de algo.

- Gracias Luna.- Sonrió falsamente sin mirarla directamente.- Nos vemos luego.- Quiso despedirse normalmente.

- Adiós Harry.- No sonrió, simplemente le miró y siguió su camino, ¿qué escondía Harry?

Se quedó clavado en el sitio escuchando cómo la chica se alejaba con pasos suaves y tranquilos, nada como él mismo. Creyó por un momento que no podría moverse, y lo hizo bien.

¿Lo castigaría? ¿Acusaría? ¿Echaría? ¿Chantajearía? ¿Lo haría su esclavo de recados en todos los años que le quedaban? ¿Se lo habría contado a Dumbledore? ¿A los profesores? ¿Lo suspendería éste curso? ¿Cómo iba a mirarlo a la cara? Se ruborizó de pronto y sacudió la cabeza levemente. No podía estar pasándole aquello a él. El miedo que le inundaba ir hasta allí era mayor que el de cualquier cosa en aquel momento, ¿podría haber algo peor?

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Tema: Re: Baile de Invierno Inusual. Capítulo 7 Mar Mayo 27, 2014 12:19 am

muy bueno el capitulo, esperemos a ver que dice Severus, y la verdad no me gusto la idea de que baya Harry con Draco, pero veamos en que termina todo al final Smile

Tema: Re: Baile de Invierno Inusual. Capítulo 7 Jue Jul 03, 2014 1:29 pm

ahhh acabo de leer todos los capitulos! me encanto el casi beso del anterior fue super! Smile

ya quiero leer el siguiente, esta hermoso...no quiero que Harry vaya con Draco

por favor que no vaya con el!

Tema: Re: Baile de Invierno Inusual. Capítulo 7 Miér Mar 25, 2015 12:09 am

tooodo iba bien hasta que harry decidio ir con draco..T_T espero que sev se entere e impida que vayan juntos..T_T....soloo necesitaa sev un empujecito mas y caira ante los pies de harry onegaii harry no seas baka y no vayas con draco al baile..T_T excelente cap senseii espero el siguien cap con ansias..>.<

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