Harry se acerco al profesor Dumbledore, y tras una reverencia, dirigió su mirada a Hagrid:
_ ¿Crees que puedas ocuparte de mi caballo? - su tono respetuoso y delicado, tomo desprevenido al guardabosque que, tras unos segundos, asintió. - Muy bien, entonces llévatelo, por favor. Esta agotado y quiero que descanse.- se giro al caballo, le dio unas palmaditas y le entrego las riendas a su amigo. - Gracias, mi buen amigo.
Severus lo miraba embobado. "Se ve tan hermoso.......es tan perfecto.......parece un princi...ESO ES!!!!" y empezó a maquinar una forma de acercarse a él.
Mientras, Harry y los otros conversaban sobre temas triviales. Severus se acerco solo lo suficiente para escuchar....
_ ...y eso es todo lo que me enseño Endimion. Es un muy buen mentor, pero sigo insistiendo en venir al colegio, creo que es lo mejor para mi. Bien, pasando a otro tema....¿qué hay de mis familiares? - a los presentes se les puso el rostro pálido, mientras que a Severus solo le preocupo el tono que empleo en la palabra familiares.
_ Bien.....- Remus no sabia si convenia decirle, pero no podia mentir...tarde o temprano lo sabría. - Fueron allados.....quemados.
_ Eso no me sorprende. - no se mostro interesado o mas fácil, su rostro no mostraba ningún sentimiento. - Bien, eso me lleva a decirles algo y escuchenme bien: SI TENGO QUE ENFRENTARME CON VOLDEMORT, LO ARÉ. - la convicción y determinación impresiono a todos e izo que Dumbledore se sintiera orgulloso. - Pero me temo que me faltan...elementos para completar los conocimientos necesarios para poder enfrentármelo correctamente...- los allí presente parecían solemnes soldados escuchando el discurso de su líder. - ....por lo que me e tomado el atrevimiento de escribir en este papel, - y les mostro un papelito color naranja, - las clases que debo tomar para reforsarme o aplicarme y enfrentar a Voldemort con más posibilidades de ganar. - tras eso le entrego el papel a su director que lo veia como jámas lo habia echo. - cuando las revise debería ponerse de acuerdo con la prof. McGonagall y ajustar esas clases con las que ya tengo, además de decidir quien me impartirá que....Una vez eso listo, me pondré a trabajar con todas mis energías. - Harry se paro enfrente del retrato, la prof. McGonagall dio la contraseña y el retrato se abrió. - Y si me lo permiten, ahora me dispongo a desempacar y descansar un poco. Que pasen buenas noches. - tras esto desapareció.
Después de ese acontecimiento, los adultos mantuvieron una conversación con los miembros de la Orden tenian una estrecha relacíon con el niño-que-vivío.
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Paseaba meditabundo, estaba impresionado, aturdido y embobado por el comportamiento de su pequeño ángel, cuando las notas de un magnifico piano se izieron escuchar.
Severus Snape no se lo pensó dos veces, puesto que sabia quien era el que tocaba y que se quedaría allí un buen rato puesto que todavía estaban de vacaciones; por lo cual se dirigió a su despacho, se cambio de ropa, tomo una mascara, una rosa y se fue a ver al pianista.
*/ PUNTO DE VISTA DE HARRY /*
Eran las 23:45hs y estaba muy aburrido, asi que se dirigió a la Sala de los Menesteres. Una vez que estubo enfrente de la entrada se imagíno una hermosa habitación estilo Frances del siglo XVIII con un hernorme ventanal y .....un piano de cola enfrente de esta, en la perfecta alineación que cuando se sentara la ventana abierta le quedaria en la espalda, la luz de la luna iluminaría la estancia por sobre su cabeza.
Tras unos minutos, escucho que la puerta se habría y se volteo a mirar....y no supo que pensar.
"¿Es ese un ángel, un hermoso fantasma o una perfecta aparición?", Harry se quedo embobado mirando al extraño.
Tenia unos pantalones negros, una camisa de poeta blanca con un chaleco negro y una capa del mismo color. Pero si algo hacía destacar su presencia era la mascara blanca que cubría su cara desde la frente asta la punta de la nariz, asiendo destacar los hermosos ojos negros del hombre.
_ Buenas noches, sr. Potter. ¿Que hace despierto a estas horas?
_ Tocando, no logro dormir. - sin embargo un bostezo lo delato. - O no lo lograba antes.
Se paro y se dirigió a la puerta, el extraño lo tomo de la muñeca y lo izo voltear.
_ Espere, me gustaría obsequiarle un presente, que espero, acepte. Tenga, - y le dio la hermosa rosa azul que tenia en el bolsillo. - Desde el fondo de mi ser. - y beso su mano con infinita dulzura.
Harry se enrojeció y, colocando la rosa en su bolsillo, se despidió de él embobado. El joven no volvió el rostro en todo el recorrido hacia su alcoba en la torre Gryffindor.
Esa noche, soñó con el misterioso hombre de la rosa azul.
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