Aceptando sentimientos. Capítulo segundo: Verdades por un sueño.

Aceptando Sentimientos.

Resumen: “Los sueños, son solamente eso, sueños. Pero qué sucede cuando nuestro subconsciente nos abre ventanas que no podemos ignorar, qué sucede cuando nos muestra la llave que abrirá puertas necesarias para vencer al destino y al mismísimo mal”

Clasificación: NC-17

Género: Romance, Angustia

Advertencia: Lemon

Aclaraciones: Si bien algunos de los personajes y nombres son sacados de la mitología griega, no se rigen por esta. Hago esta aclaración por si algunos de ustedes saben de mitología o al leer quieren averiguar y se encuentran con incongruencias al comparar con la historia.

Harry Potter lamentablemente no es mío, pertenece a JK Rowling, hago esto sin finalidad de lucro a menos que algún día alguien loco quiera pagarme. XD


Capítulo segundo: “Verdades por un sueño”


Mentes en blanco, era lo único que se captaba en la habitación. Un incómodo silencio se cernía en el lugar, confusión, mucha confusión. Aquello de lo que hablaba Dumbledore, no podía ser verdad.

El shock dio paso a la rabia, Severus Snape no estaba en edad para aquellas estupideces, más le valía a Albus tener una buena explicación, ya que lo que implicaba un hechizo de vidas pasadas era más que una simple unión de recuerdos, era una unión de almas y él el más temido y respetado profesor de pociones, doble espía en la orden, mago talentoso, frío e indiferente, ¡no Estaba unido con Potter!, no con ese mocoso engreído y malcriado.

Sus pensamientos se arremolinaban, su paciencia se agotaba, sin más estalló.

- Albus- dijo con un tono de rabia contenida- De todas tus locuras, esta sin duda es la peor y más grande-hizo una pausa para respirar, se estaba alterando- Qué acaso estás tan desesperado en que Potter y yo nos llevemos bien que te atreves ha llegar a estos extremos, ¡es realmente absurdo!- la calma se esfumó por completo.

- Severus, me conoces hace años. Hemos vivido mucho juntos y te aprecio como a un hijo- dijo mirando fijamente los coléricos ojos del maestro- Jamás me atrevería a engañarte con algo como esto, ni menos implicar a Harry- miró ahora al ojiverde, quien estaba con la cabeza gacha sin decir una sola palabra.- Ustedes son los seres más importantes para mí, no me juzgues tan duramente por querer protegerlos y decirles la verdad.- dijo Dumbledore suavemente.

- Como puedes pedir que no te juzgue Albus, date cuenta de lo que estas insinuando.- dijo ya desesperado y preocupado. El discurso del director caló profundo- Potter y yo compartiendo una vida pasada, es más de lo que puedo aguantar.

Harry por primera vez estaba más que de acuerdo con su profesor. Eso que el director decía no podía ser cierto. Él siendo sincero no estaba relacionado con los hechizos de vidas pasadas, no sabía que alcance tenían, pero por la desesperación que mostraba Snape, no estaba seguro de querer enterarse.

Vio suspirar a Dumbledore, se notaba cansado y preocupado. Sus ojos siempre tan vivos, azules y pícaros, se encontraban oscurecidos por la preocupación.- Esos ojos- se dijo- No son de alguien que mentía.- su corazón latió angustiado, ¡¿qué pasaba?!

- ¡¿Qué pasa, maldición?!- no pudo soportar más la duda que lo carcomía, desesperado golpeó su cama con fuerza.- Diga lo que tenga que decir, pero dígalo ya, esto no es normal. Estoy en la enfermería, no sé qué hago aquí, no recuerdo nada, sólo sé que unos malditos sueños me están atormentado y al parecer tienen que ver con todo esto.- respiró intentando calmarse- Estoy de acuerdo con Snape, lo que usted dice es absurdo- dijo mirando a Dumbledore- Pero necesito respuestas.

A Severus se le encogió el corazón al escuchar la angustia de Potter. Al ver esos ojos verdes casi al borde de las lágrimas se sintió inusitadamente preocupado y protector, que rara sensación, era desconocida y a la vez extrañamente familiar. Pero no podía estar pasándole algo como eso y menos aún con Potter. Definitivamente los delirios de Albus le estaban afectando.

- Bueno Albus, sé que me odiaré por decir esto- suspiró- Pero estoy de acuerdo con Potter, así que habla y aclara esto por favor- pidió extremadamente despacio, como si él mismo tuviese miedo de lo que el director podía decir.

- Me alegra saber que al menos están dispuesto ha escuchar- les sonrió- Primero lo primero, ¿Qué es lo último que recuerdan?- preguntó.

- Pues- habló Harry haciendo memoria- Estábamos en pociones, cuando Snape…-

- Profesor Snape, para usted Potter- dijo con desprecio.

- Si, claro- dijo cansinamente- Bueno como decía, el “Profesor” Snape- remarcó irónicamente la palabra profesor, ganándose una mirada molesta del de oscuras túnicas - Se acercó a mí mientras trabajaba, para molestarme como siempre…-

- Por supuesto, San Potter en acción, ¿verdad?- agregó sarcásticamente Snape- Yo sólo verificaba su trabajo Potter, no se haga el importante creyendo que el mundo gira a su alrededor, no perdería mi valioso tiempo en usted.

Dumbledore, suspiro por enésima vez, él sabía que esto no sería fácil.

- ¡Basta!- alzó su voz con impaciencia- Escuchen los dos, esto no es un juego y más les vale dejar de discutir y aprender ha tolerarse- hizo una pausa mirando atentamente a los ahora callados hombres- Bien, entonces lo último que recuerdan es estar en pociones, Severus se acercó a ti Harry, ¿no es cierto?- el más joven asintió- Y luego ¿qué pasó?

- Bueno, no sabría explicarlo muy bien- Snape resopló, ganándose una dura mirada del director.

- Continúa Harry- dijo este amablemente.

- Si, bueno cuando se acercó su mano rozó la mía accidentalmente y después de eso sólo recuerdo un dolor intenso y muchas imágenes en mi cabeza- explicó.

- Entiendo- dijo Dumbledore pensativamente- A ti te sucedió lo mismo Severus- fue más una afirmación que una pregunta.

El maestro sólo se limitó a asentir con la cabeza afirmativamente.

- ¿Recuerdan las imágenes que vieron?- preguntó.

Cual fue su sorpresa al notar las incómodas miradas que lanzaron los dos hombres, ambos sonrojados y nerviosos.

- Bueno por sus reacciones, veo que si lo recuerdan- dijo con picardía.- Lo que vieron tiene que ver con sus sueños ¿no?- ambos asintieron.

- Siempre es lo mismo- dijo Harry hablando para sí mismo, quizás sin ser conciente de que ambos hombres lo escuchaban con atención- Me encuentro en una época antigua, creo que es Grecia, me llaman Hebe y soy un Dios, conozco al que se supone es un mortal el cual se llama Dionisio- se sonrojo- Todo es tan intenso, tan real, tan extraño, bello y doloroso.- sus ojos se llenaron de lágrimas- Cuando despierto, siento que hay algo que debo saber y no lo sé. Es verdaderamente frustrante.

Ahora si que Severus Snape no cabía del asombro que sentía al escuchar el sincero discurso de Potter. No podía creerlo él hablo de Hebe, de ese hermoso ser que recordaba amar con intensidad cada vez que lo soñaba, del que al despertar sólo recordaba sus ojos verdes y las caricias entregadas. Esto no podía ser.

- No, imposible- dijo cortante- Esos no son más que malditos sueños, tú no puedes ser Hebe porque Hebe no existe ni existió. Son sólo delirios tuyos Potter, tantas maldiciones te han afectado el cerebro.- dijo mordaz.

- Cállate Severus- dijo Dumbledore ya enojado- Deja de desquitar tus miedos en los otros y asume la realidad- hizo una pausa- Asume que tu has soñado lo mismo.

- No continúes Albus- advirtió el ojinegro.

- ¿Qué pasa?, díganmelo- dijo ya desesperado Harry- Usted ha soñado lo mismo, qué es lo que ha visto, cómo quién se ve- miró a su profesor con urgencia- ¡Hable!

- ¡Como Dionisio!- gritó- Yo, me veo como Dionisio.- dijo con pesar.

- ¿Qué?- preguntó Harry con incredulidad- No puede ser, usted no puede ser él, ¡no puede ser Dionisio!- las lágrimas comenzaban ha juntarse en los bellos ojos verdes, la desesperación era palpable.

- Harry, por favor cálmate- pidió Dumbledore- Es cierto Harry, él es Dionisio.

- ¡No!, es mentira, lo dice sólo para atormentarme- dijo ya fuera de sí- Lo dice porque me odia- las lágrimas ya corrían por su rostro sin control.

- En el lago- dijo con tono temeroso el profesor.

- ¿Qué?- preguntó Harry sin entender.

- La primera vez que yo…, que Dionisio vio a Hebe- hizo una pausa- Fue en el lago- no diría más, sabía que Potter captaría el mensaje.

Y vaya que Harry lo entendió, estaba literalmente en shock. Entonces era cierto, eso sólo podría saberlo Dionisio, nadie más.
Las lágrimas habían dejado de caer y sólo quedaba el rastro seco y salado en su rostro.
Se sentía más tranquilo al saber que al menos no estaba siendo engañado.

- Entonces, por eso reaccioné de esa manera cuando me toco en pociones- ahora muchas cosas tenían sentido.

- Harry, tú y Severus se desmayaron- explicó Dumbledore- Los alumnos presentes se alteraron mucho, ya que no sabían qué había pasado. La señorita Granger fue a buscarme de inmediato, mientras el señor Weasley se quedaba junto a ti, los que dieron testimonios cuando se les pregunto lo sucedido, dijeron que el profesor Snape se acerco a ti y luego ambos gimieron de dolor y cayeron al piso- hizo una pausa y lo miró con ternura- Al mismo tiempo.

- Cuánto tiempo hemos estado aquí Albus- dijo Snape, cuando sintió que su voz saldría firme.

- Han estado inconscientes por más de dos horas- le respondió Dumbledore.

- ¿Dos horas?- dijo Harry sin creérselo.

- Pero, cómo es eso posible- dijo Severus sorprendido, para él no había pasado más de veinte minutos.

Dumbledore supo que había llegado el momento de explicar, lo que en verdad implicaba todo lo que estaba pasando.

- Quiero que ambos me escuchen y pase lo que pase, intenten mantener la calma- dijo el director increíblemente serio- Sé que es muy complicado para ambos enterarse de todo esto, pero deben saber que lo difícil viene ahora- hizo una pausa y fijó su mirada en la del más pequeño- Harry, ¿sabes lo que implica un hechizo de vidas pasadas?- preguntó.

- No señor, no lo sé- dijo Harry, alegrándose de saber al fin de qué se trataba todo eso, pero temeroso también a lo que descubriría.

- Te lo explicaré, debes entender muy bien a lo que te estas enfrentando si quieres salir victorioso- hizo una pausa y se preparó para lo que vendría- Un hechizo de vidas pasadas, es un antiguo conjuro, del cual no se sabe su procedencia exacta, pero si que era muy utilizado en la época en que los Dioses aún habitaban el planeta.

- Que familiar- dijo Severus con ironía.

Harry no pudo más que darle la razón.

- En este, dos almas eran atadas una con la otra, pero este enlace no era simple, requería de un sinnúmero de requisitos, entre ellos la total compatibilidad de las almas en cuestión.

- O sea que esas almas eran, ¿gemelas?- preguntó Harry.

- Así es mi muchacho, sólo existe un alma que pueda ser en su totalidad compatible a la tuya por ello se les llamaba almas gemelas. Los Dioses curiosamente, podían saber exactamente cuando encontraban al ser que era por así decirlo su “otra mitad”.

- Si, recuerdo que Hebe sintió que había encontrado a su alma gemela cuando vio a Dionisio- dijo Harry, sonrojándose al darse cuenta de lo que estaba diciendo.

- Si, un Dios lo sabe de inmediato- dijo Dumbledore compresivo- Es por eso que Hera pudo colocar en ustedes el hechizo- dos ojos lo miraron sorprendidos, ¿cómo sabía Albus lo de Hera?

- Ya habrá tiempo para preguntas- les dijo el director dándose cuenta de sus miradas asombradas- Ahora escuchen- y prosiguió su narración- Sin ese requisito, los resultados son mortales. Muchos Dioses vengativos lo usaron para unir dos almas que no eran compatibles y así matar a sus enemigos, este hechizo no respeta ni a los mortales ni a los que posean la vida eterna, acaba por igual con la existencia de ambos y estos no sólo mueren, si no que desaparecen sin posibilidad de volver a nacer, son enviados a la nada, condenados ha vagar por siempre.

- ¡Que horror!- exclamó Harry.

- Así es, por ello fue prohibido. Pero a pesar de eso Hera no podía dejar morir a su hijo y cuando se supo lo que había hecho Hades, le fue permitido usarlo en ustedes- explicó- Este hechizo era el único que podía contrarrestar el conjuro de Almas Condenadas de Hades.

- ¡¿Almas condenadas?!- preguntó Severus con gravedad.

- Si Severus, Almas condenadas fue el hechizo que Hades le aplicó a Hebe y Dionisio- dijo con tristeza Dumbledore.

- Y ¿qué causa ese hechizo profesor?- le preguntó Harry al más viejo con temor.

- Ese hechizo Harry- procedió a explicar Dumbledore- Condena a las almas gemelas ha encontrarse una y otra vez en sus próximas vidas, pero obligando a sus mentes y cuerpos a odiarse. Ese es el peor castigo que se le puede dar a un ser viviente, ya que nunca podrá sentirse completo, porque dentro de sí su alma llorará el no poder estar con el ser amado a sabiendas de que lo tiene muy cerca.

- Y cómo se puede romper algo tan terrible con el hechizo de Vidas pasadas- preguntó Harry sin poder creer que eso le estuviese sucediendo a él.

- Es muy complicado, pero el hechizo de Vidas pasadas logra que las almas de algún modo se expresen. Esto a través de sueños y visiones, instando a la mente y cuerpo de las personas en cuestión a recordar lo que en verdad sienten- Fijó su mirada en Harry y Snape- Eso es exactamente lo que les esta ocurriendo a ustedes.

En esos momentos Harry y Severus cruzaron miradas, olvidándose por un momento del rencor mutuo e intentando comprender a su cabalidad el alcance de todo lo que sucedía.

Eran almas gemelas, los condenaron a odiarse sin descanso para separarlos, les aplicaron un hechizo prohibido para contrarrestar el primero y hacerlos recordar lo que se supone en verdad sienten.

Era demasiado, sus cabeza iban ha explotar. Pero antes había una pregunta por hacer.

- Albus, ¿cómo sabes todo esto?- preguntó Severus con seriedad.

- Digamos que yo también tuve sueños extraños- dos miradas asombradas recibieron la información- No me malentiendan, mis sueños no son como los de ustedes mis muchachos.

- Entonces qué soñó profesor- preguntó Harry curioso.

- Yo, soñé con la mismísima Hera- dijo Albus- Ella me dijo todo lo que sé.- hizo un pequeña pausa- Esto comenzó hace dos meses, yo me disponía a dormir, fue algo realmente insólito pero antes de cerrar los ojos sentí que una gran cantidad de energía se encontraba cerca de mí y sin poder contenerlo caí en un sueño profundo. Al abrir los ojos me encontré en un lugar agradable que no era mi recámara, nunca había estado ahí, pero lo reconocí sin problemas al haberlo visto en un sinnúmero de libros, ahí frente a mí me encontré con el imponente Monte Olimpo.

Flash back del sueño.


- Vaya, que interesante, siempre quise visitar este lugar- dijo el director mirando el bello paisaje- Pero estoy seguro que no me ha traído para una visita turística o me equivoco- agregó girándose y encontrándose con una bellísima mujer. Era alta, rubia de pelo muy largo rizado, bellos ojos claros impregnados en dulzura. Sin duda esa mujer brillaba con una luz propia.

- Es usted un hombre muy perspicaz- dijo con una suave y melodiosa voz- Mi nombre es Hera, madre de todos los dioses y lo he traído hasta acá porque usted será una parte fundamental para salvar las almas de dos jóvenes, ayudándolos ha encontrar su camino y lograr vencer en la batalla que les espera.

- La escucho- dijo Dumbledore, al darse cuenta de que cosas muy valiosas estaban en juego.

- Hace mucho tiempo un Dios bajó a la tierra y conoció a un mortal, sin habérselos planeado se enamoraron y aunque una relación como esa no era admitida entre los Dioses, lucharon por estar juntos- relató la Diosa- El joven Dios tomo una difícil decisión, renunció a la vida eterna y se transformó en un mortal, todo para vivir su gran amor. Pero no todo salió bien- dijo tristemente- Hades un Dios perverso y obsesivo con lo que considera suyo, hizo hasta lo imposible para separarlos ya que estaba enamorado perdidamente del joven mortal que algún día había sido un Dios- la bella Hera hizo una pausa para mirar con fijeza hacia el Monte Olimpo, luego sus bellos ojos se posaron en el atento director de Hogwarts y dirigiéndole una cálida pero triste sonrisa prosiguió con su relato- Hades no se detuvo hasta condenarlos con un hechizo, en el cual sus almas se reencontrarían una y otra vez queriendo estar juntas, pero en sus mentes y cuerpos el recuerdo de ese amor que les unía estaría sellado ante el sentimiento de odio.

- El hechizo de las almas condenadas- dijo Dumbledore entendiendo.

- Exacto, pero yo no podía permitir que un amor tan grande se esfumara por el rencor de un Dios loco, además mi propio hijo era a quien Hades deseaba, por ello les conjure el hechizo de vidas pasadas.

- Entiendo- dijo Dumbledore uniendo cabos- Yo debo conocer a las personas implicadas- afirmó.

- Si, esa es la razón por la que le he llamado y le estoy contando esto, ya que las personas a las que el hechizo les ha sido impuesto están viviendo otra vez y necesitan darse cuenta y entender que los sueños que comenzarán tener, si es que no los han tenido ya, no son sólo simples sueños, sino que son parte de un hechizo el cual necesita ser roto- dijo Hera con serenidad.

- Cuándo sabré que debo actuar y quiénes son esas personas - preguntó Dumbledore.

- El momento llegará cuando la representación tenga alcances físicos- hizo una pausa- Y las personas a las que necesito ayude ha entender lo que les acontece son...


Fin del Flash Back.

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- Creo que eso es obvio, ¿no?- dijo Dumbledore.

- No puedo creer que algo así te pasase y no me lo dijeras de inmediato, Albus- le inquirió Snape.

- Severus, yo no podía interferir, escuchaste lo que Hera me dijo, sólo en el instante en que el hechizo tuviese alcances físicos yo sabría que el momento había llegado- le respondió- Bien, los dejaré solos un momento, creo que deben hablar y descansar un poco- agregó acercándose a la puerta- Vendré ha verlos más tarde. Hay algo que debemos arreglar para mañana- y dejando intrigados a ambos hombres, se retiró.

- Bien Potter, creo que debemos hablar- dijo Snape sin expresar nada en su voz.

- Lo sé, pero no sé qué decirle, esto para mí es demasiado- dijo en un lamento dejándose caer en la almohada.

- Y cree que para mí no, estoy unido con un mocoso, hijo de un estúpido…-

- ¡No insulte a mi padre!- dijo Harry levantándose bruscamente, causándole un fuerte dolor en su cabeza.

- Su padre- dijo con desprecio- Su padre Potter era un engre… ¿qué le pasa?- preguntó al ver que el joven se tomaba con fuerza la cabeza y temblaba.

- Mi cabeza- dijo en un débil susurro.

Snape se levantó de la cama y se acercó ha revisar qué le pasaba al joven.

- Potter, déjeme ver lo que tiene- le dijo quitando las manos del muchacho de su cabeza para así acceder a la misma- Potter quédese quieto.

- Para usted es fácil decirlo, no tiene un endemoniado dolor en…- pero no pudo continuar, en un movimiento el profesor levanto su rostro enfrentando sus miradas, las cuales nunca se habían encontrado tan cerca.

Ninguno supo lo que pasó pero en algún momento sus conciencias se fueron lejos.

Los ojos que les devolvían la mirada no eran los de un profesor y su alumno, no eran de dos personas que se odiaban, si no que eran los ojos de un Dios desertor y un mortal. Ya no eran Severus y Harry, eran Hebe y Dionisio.

- Mi ángel, al fin te encuentro- dijo la voz de Severus en un susurro lleno de ternura.

- Dio- le respondió Harry antes de que sus labios fuesen atrapados en un beso profundo y apasionado- A sido tanto tiempo- le dijo cuando esos labios se dirigieron a su expuesto cuello, lamiendo gentilmente, dejando su marca. Reconociendo.

Severus se acerco a su pelo y como la primera vez que lo vio aspiro su aroma.

- No sabes lo mucho que te he añorado, sentía que estabas cerca, pero no podía llegar a ti- le dijo Severus lleno de pesar.

- Ahora estas conmigo y nada nos volverá ha separar- le dijo con determinación el más joven- Ahora amor, bésame, sólo bésame, hazme vivir de nuevo, ámame como sólo tu lo puedes hacer, hazme sentir… déjame sentirte fuerte, déjame sentir tu pasión- le dijo con desesperación.

Severus por completo fuera de control se monto encima de su alumno y como animal en celo se comenzó ha refregar con rapidez y lujuria en el cuerpo que yacía bajo él entregado y por completo excitado.

- ¡Ah!, por Dios, a sido tanto tiempo, ¡Ah!, más Dionisio quiero más- dijo Harry fuera de control, intentado acercarse aún más a su amante en un intento de calmar sus ansias.

Severus bajó sus manos y rápidamente tiró con fuerza del pantalón de Harry para abrirlo, rompiendo botones y cremalleras. No tenía tiempo para averiguar como funcionaba ese ropaje, estaba ya demasiado desesperado. Su mano vago por todo el contorno del miembro de su pareja, apretando fuerte, restregando y encontrando la manera de deshacerse de la última prenda que quedaba ahí abajo.

- ¡Ah, ah, ah!, si amor, te quiero así, tócame más- reclamaba con urgencia el ojiverde.

En un momento las caricias se detuvieron, Harry se lamento en un gemido y se incorporó medianamente para ver qué sucedía.

Y ahí lo vio, su amante desprendiéndose con rapidez de la molesta túnica y rompiendo con fuerza el ropaje inferior bajándolo por completo junto con la ropa interior, dejando libre su fuente de deseo más que dispuesta a ser satisfecha.

- ¡Ah!- no pudo contener un gemido ante la excitante visión- Ven aquí Dionisio, necesito sentirte por completo- le dijo abriendo sus piernas, entregándose por completo al hombre de negra mirada.

Severus, se recostó entre las piernas del joven y al fin sus miembros erectos y cálidos pudieron hacer contacto sin nada interponiéndose.

Gemidos, sólo gemidos era lo que se sentía en esa habitación. Los dos hombres estaban sumidos en una danza hipnótica, cuerpos calientes restregándose buscando una liberación.

Sus bocas se encontraban en besos cargados de fuerza, no había ternura, sólo lujuria pero en ella se entreveía todo ese amor. Si, ellos estaban haciendo el amor con sus bocas, con sus manos, con sus cuerpos.

El final estaba cerca, se restregaban cada vez con mayor rapidez y desesperación, los gemidos ya eran gritos. El cuerpo de Severus se movía de arriba a abajo, sin detenerse ha pensar, sólo sintiendo.

Harry sudaba, se arqueaba, buscaba contacto, sus manos bajaron hasta las nalgas de su compañero y las apretó acercándolo a él con mayor intensidad. Sus piernas se abrieron aún más, entregándose con descaro a la lujuria. Y ya lo sentía, su final estaba cerca.

- Ya llega, si, ¡si!, ¡Dio!... ¡Ah, ah, ah, ah!- su cuerpo se convulsiona, su mente queda en blanco, siente como el orgasmo llega atacando cada fibra de su ser, su cuerpo pegajoso de sudor se mancha aún más con su abundante esencia.

A pesar de su logrado orgasmo, colapsa aún más si eso es posible al sentir como el cuerpo arriba de él se tensa, un grito, un gemido, respiración jadeante.

- ¡Dionisio, si!, llega, ¡llega amor!, vente encima de mi, mánchame, hazme tuyo con tu esencia. ¡Dámelo!, ¡Dámelo maldita sea!- dijo en un gruñido salvaje Harry.

- Hebe- dijo jadeante Severus- ¡Ya!, aquí viene amor, mi ángel, siéntelo, te mancharé y te marcaré como mío, sólo mío- dijo en medio de gemidos- ¡Ah, ah, ah, ah! Si, ahí esta, ahí está, ¡Ah!- grito ahogado, desesperada liberación.

Sólo unas respiraciones jadeantes y rápidas se escucharon después de eso. Sin moverse de donde se encontraban, el silencio fue su compañero.

Cuando la negra mirada, se encontró con la esmeralda, algo ocurrió. Sus conciencias y el control regresaron, tan rápido como se habían ido.

Odiado sentido que los hacía estar más despiertos que nunca, paralizados, sintiendo sus cuerpos medio desnudos, sus partes tocándose, mucho sudor, corazones agitados y sustancias pegajosas y cálidas manchando sus cuerpos.

Severus al fin reaccionó y se bajo de inmediato del cuerpo de Harry. Apurado y temblando buscó sus pantalones, olvidándose por completo de su ropa interior, los tomó y se los colocó con rapidez, notando al intentar abrocharlos que estaban rotos.

Bufó rendido y se sentó en la cama, escondiendo su rostro entre sus manos. Estar alterado era decir poco.

Harry no se había movido, ni siquiera para intentar tapar su desnudez inferior, qué fue eso. De repente sin saber cómo, perdió dominio de su cuerpo.

Este se movió solo, beso solo, se restregó contra el de su profesor. El lo sintió todo, sintió el placer, el ardiente placer y llegó al cielo sin quererlo ni desearlo.

Escuchó como de su boca salió el nombre de Dionisio y supo que Hebe de alguna manera tomó posesión de su mente relegándolo a él a no ser más que un espectador, pero no uno cualquiera, un espectador que sentía, veía, palpaba y escuchaba.

Vio a su profesor apurarse e intentar vestirse, para luego caer rendido y derrotado ante lo sucedido, se veía demasiado perturbado y Harry supo sin preguntar, que Snape había sentido lo mismo que él.

- ¿Cómo me voy ha enfrentar a esto?- fue la pregunta que resonó en las mentes de ambos hombres.

Vaya, interesante. No sé que me esperaba, pero no se si era esto que he leído. ver perder el control a estos dos de esa manera ha sido extraño. Porque por mucho que sean almas gemelas deben aceptarse en esta realidad, y no en la que fue :s

¡Niña o sigues o me muero de la histeria!

Vaya historia más interesante y creo que tu aclaración a Naeh me ha aclarado bastantes dudas a mí misma, porque me chocó realmente el giro que dio la cosa y sí, yo también creo que a veces la gente testaruda necesita que la vida les dé más de una bofetada para que se den cuenta de que no pueden estar ciegos durante toda su vida.

Me encantan Dionisio y Hebe *-* Realmente son adorables y verlos tomando el control de Severus y Harry ha sido simplemente increíble.

Se me ha presentado tan extraño ver cómo Severus Controlatodo Snape perdía el control de aquella manera xD Ha sido algo divertido de ver.

¬¬ Sigue pronto o algunos cruciatus van a volar en tu dirección y créeme, no te van a gustar para nada.

¡Besos y nos leemos!

MADRE MÍA QUE FORMA DE PERDER EL CONTROL POR PARTE DE LOS DOS, SOBRE TODO SEVERUS.
POR FAVOR CONTINUA ESTA HISTORIA.

Neee... cuando lo continuas?? es que... está muy bueno!
Y la versión original... donde puedo encontrarla???
Espero con ansias la conti ^^

WOWWWWW pero que capítulo, apenas comencé a leerlo y me encantó!!! Y fue un gran golpe la escena, XD hasta pena me dio leer lo que siguió después de ese encuentro, es una situación difícil y radical... pero HEY, yo se que no soy a la única que le gusta ver a estos dos sufrir, pero que manera de "sufrir". Espero la contí... esta la historia en Slasheaven??
SALUDOS!!!

Hola me encanto tu historia y me gustaria que la continuaras es realmente buena, gracias

muy buen capitulo, y como han mencionado un giro sorprendente, espero que realices mas historias que la verdad te quedo bastante bien