Majo-san Vencedor de Voldemort
Cantidad de envíos : 3224 Fecha de nacimiento : 21/01/1986 Edad : 38 Localización : chilena Galeones Snarry : 102283 Fecha de inscripción : 22/06/2009
| Tema: She is only my princess. Capitulo 2 Lun Ago 02, 2010 8:51 pm | |
| She is only my princess
Resumen: Harry huyó del lugar que una vez llamó su hogar, por que ahora tenía algo más importante por lo que luchar. Algo que dejaba la guerra contra Voldemort en un plano completamente diferente. Tuvieron que pasar ocho años para que un incidente lo hiciera volver y con él, su mas preciada misión. Salvar a su hija de las manos de todo el mundo.
Respuesta al reto: Ocho años sin ti. De la mazmorra Snarry
Disclaimers: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen, son propiedad de J. K. Rowling.
Pareja: Severus Snape y Harry Potter
Advertencias: AU (el 6° y 7° libro simplemente no existieron) / M-preg (embarazo masculino) Chan / Lemon.
Categoría: Angustia / Romance /Drama
Clasificación: NC-17
Simbología: Letras en cursiva: recuerdos
2° capitulo
Volvía a caminar por todos lados, tratando de no llamar la atención de nadie en la habitación. Le bastaba con saber que tenía que estar en contacto con esas personas, como para que además tuviera que soportar sus miradas culpándole y sus palabras hirientes. No es que les hiciera mayor caso, pero eso le recordaba que era el principal culpable de que “él” no estuviera con ellos. — Amigos míos — llamó a los presentes — he recibido buenas noticias. Las miradas de todos los presentes en la habitación se centraron en él, pero una de ellas, parecía más bien taladrarlo con la mirada. >>El ministerio de Suiza nos ha reportado que nuestro Harry ha sido encontrado allá. Los murmullos no se hicieron esperar y los cuchicheos tampoco. >>Por favor, un poco de silencio — les pidió el anciano — si bien lo han encontrado allá. Se ha vuelto a escapar. — ¡¿Cómo que se escapó?! — Gritó indignado — ¡Lo encontraron y volvió a desaparecer así como así! ¡Fantástico! — Dijo pateando una silla, que fue a dar a la muralla. — Por favor Severus — le dijo el anciano — trata de controlarte. — No me pidas que me controle, cuando me dices que Harry apareció y que ha vuelto a desaparecer. — Por algo se habrá escapado de nuevo. Severus miró a la persona que había murmurado y no se contuvo. Se lanzó contra el hombre que estaba ya parado y a punto estuvo de golpearlo. — ¡Ya vasta! — Exigió el director — ¡Compórtense como adultos! — Miró a los dos hombres que no parecían estar muy convencidos de hacerlo — Severus, William, por favor. Severus apretó los puños y se volteo para no volver a ver a ese remedo de mago. >>Si les digo esto es por que por lo menos ya tenemos una pista en donde buscar. — Yo voy para allá — dijo Severus caminando a la salida. — No creo que sea conveniente que lo hagas, Severus — le dijo el mayor, con voz sería — por favor, toma asiento y déjame contarte que mas averiguaron. — No se para que. Tengo que ir por él. Entre mas tiempo me demore aquí, mas tiempo me demorare en rastrear todo el maldito país. — Severus. Es importante — le dijo con seriedad — lo que voy a decirte te ayudara a encontrarlo y te gustara saberlo — vio como el hombre le mandaba una mirada significativa, pero no dejó de mostrar una sonrisa en sus labios, por lo menos hasta que vio a Severus volver a su lado — según el reporte del ministerio Sueco. Harry esta siendo buscado bajo el nombre de Dante Pitts. — ¿Dante Pitts? — pregunto Hermione Granger. Sentada a unos tres puestos de Dumbledore. — Así es. Pero no es como lo conocemos y lo mas probable es que gracias a este detalle es por que no lo hemos podido encontrar en tanto tiempo — miró a la gente que estaba con él en la sala y que le prestaba toda la atención del mundo — su apariencia física es diferente, seguramente gracias a un glamour. Tiene el cabello largo y lizo hasta los hombros, de color castaño y ojos negros — Severus no pudo evitar imaginárselo con esa apariencia y le pareció francamente tentador de ver — además no esta solo — eso llamó la atención del hombre — estaba con una niña siete años. Alexandra Pitts… su hija. Severus se puso de pie enseguida. Escuchando lo que no quería confirmar desde que Harry se fue.
Estaba acostado en su habitación y de un momento al otro las alarmas empezaron a sonar por todos lados. Se levantó rápidamente y se dirigió a la oficina del director. — Oh, Severus. Que bueno que llegaste tan de prisa. — ¿Qué es lo que pasa? — Es Harry, mi amigo. Al parecer se escapó. No sabemos por que ni como lo hizo, solo que destruyó las barreras para poder salir. — ¿Cómo dice? — Miró impresionado al hombre que estaba tras el escritorio — ¿Me podría explicar cómo es que Harry destruyó las barreras de Hogwarts? — Como te lo dije antes, Severus. No tengo la más mínima idea. Severus no dijo nada más y se dirigió a la salida. ¿Por que demonios Harry se fugaría sin decirle nada? Tomando en cuenta su delicado estado. Hace unas horas habían vuelto de San Mungo, donde un medico amigo les había confirmado lo que temían. Harry estaba embarazado. Esperaba un hijo suyo. Había pensado proponerle que se casara con él. Nunca tuvieron una nombre para la relación que tenían, pero estaba seguro de que lo amaba y él pensaba que el chico sentía lo mismo por él, pero al parecer no era así.
Se pasó los años buscándolo sin encontrar nada. Continuando con su maldito trabajo de espía doble. Voldemort se había debilitado luego de que Harry lo enfrentara en el ministerio, pero aun seguía con vida. Buscando a Harry con tanto afán como lo buscaba el mismo. — Severus, toma asiento — le pidió el director. — No me siento — le dijo furioso — Harry esta en Suiza, escapando de personas que no quieren hacerle daño, pensando seguramente que son mortífagos y con él esta mi hija. — Severus por favor. — ¡Nada! — Le dijo caminando hacia la puerta — y será mejor que te busques a otro espía, por que me iré a buscarlos, como debí de haber hecho desde el primer día en que desapareció. — No sacaras nada si sales en ese estado — trató de tranquilizarlo. — ¿Sabes que día he estado sin pensar el ellos? — Le preguntó mirándolo a la cara — ni uno. Nunca he dejado de pensar en que quizás no resistió el parto. Que quizás nuestro hijo nunca nació o mil cosas peores y ahora que aparecen me pides que me calme. — Profesor Snape. No creo que Harry quiera verlo — le dijo Ron, con tal desprecio que parecía tirar ácido por la boca — de todos modos huyó lejos de usted, aun sabiendo que llevaba a su hijo en el vientre. — Ron… por favor — le pidió Hermione — creo que el profesor esta en su derecho de ir por su familia. — Qué familia ni que nada — dijo la matriarca de los Weasley, mirando mal a Severus — tuviste la oportunidad de hacerlo feliz y solo lo orillaste a huir. — Molly, no te metas en esto — le dijo su esposo — Severus es el padre de la criatura. — Si es que lo es — dijo otra persona en la habitación — quien les dice que la niña no tiene siete años, como dicen que tiene y es menor a eso. Quizás la tubo con alguien mas y… No pudo seguir hablando, pro que esta vez el director no alcanzó a detener a Severus antes de que le lanzará un potente hechizo al pelirrojo irritante. — ¡Severus! — Le retó el director — por favor, que alguien ayude a William. Severus no quiso escuchar ninguna estupidez más. Salió de la habitación en donde estaban haciendo la reunión y se dirigió a su habitación en las mazmorras. Entró azotando la puerta y se fue a su dormitorio de manera resuelta. No por que una bola de inútiles le dijera que no podía salir, él iba a hacer caso y se quedaría de brazos cruzados, cuando Harry podría estar corriendo peligros en ese preciso instante.
--SSxHP--SSxHP--SSxHP--SSxHP--SSxHP-- Harry llevaba apareciéndose por más de una hora y ya no tenía energías para nada. Había tenido que hechizar a su hija en dos ocasiones para que la muchachita no sufriera las consecuencias de la aparición. Un ruido a su derecha lo obligó a sacar nuevamente su varita. Ya ni siquiera sabía donde demonios estaba, pero estaba más que seguro de que no estaba en Suiza. El ambiente era calido, por lo menos más calido que en los Alpes, el sol estaba en su máximo sobre el cielo y francamente eso le empezaba a molestar. — ¿Quién anda ahí? — Preguntó apuntando a la mata de arbustos que se movían a su derecha. — Baja tu varita, mocoso — una voz tétrica le heló la sangre — te supiste esconder muy bien, Potter. — Salga de donde se encuentra — prefería saber a quien atacar y de ser necesario mataría por su hija. — Ya te lo dijeron, baja la varita o la mocosita que llevas en los brazos sufrirá las consecuencias. La voz de una nueva persona le indicó que sus posibilidades de escapar sin daño se minimizaban considerablemente. Se aferró a su hija y se apareció nuevamente, pero esta vez no fue a ningún lugar, su magia no servia. Lo habían atrapado.
--SSxHP--SSxHP--SSxHP--SSxHP--SSxHP--
— Severus — llamó desde la puerta del despacho al ver como el hombre guardaba sus ropas en una maleta — no fue muy cortes de tu parte haber noqueado a William. — No quiero saber nada de ese tipo — dijo con desprecio — él se atrevió a difamar a Harry… — Y comprendo tu enojo. No lo acepto, pero lo comprendo. El mago mayor se adentró en la habitación y cerró la puerta, sellándola para que nada de lo que fueran a decir en esas paredes fuera escuchado por nadie. >>— Comprendo que estas dolido. Harry se fue sin decir nada. Te separó de tu hija y ahora vuelve a desaparecer, pero todos estos años hemos estado esperando para poder derrotar a Voldemort, por lo que te pido que te quedes un poco más. Severus lo miró, sosteniendo una de las maletas, la que dejó en el suelo para poder dirigirse al bar que estaba en una de las esquinas de la habitación y se sirvió un vaso de Whisky, el cual tomó de un solo trago. Trató de aclarar sus ideas. Analizando como siempre los pro y contra de lo que decía el director. — No tengo nada que reprocharle a Harry, Albus — le dijo llegando a su lado — Harry se fue por que tenía motivos para hacerlo, aunque eso me rompiera completamente — se sentó en la cama, pesadamente — aunque estoy un poco más aliviado al saber que sigue con vida… — Y que tu hija también lo esta — dijo el viejo con una sonrisa — píenselo, por favor. Por ultimo anda una vez más. Para saber si se enteraron del paradero de Harry; para saber si esta en peligro. Severus asintió, esta vez sin pensarlo demasiado. Ya lo había puesto como una de sus misiones primordiales antes de viajar a Suiza. Tenía que saber si los mortífagos sabían algo de Harry y Alexandra. — Iré ahora. Necesito saber lo antes posible que saben, para poder ir por ellos. — Entonces no te detengo por mas tiempo, mi amigo — le dijo el mayor, mientras se dirigía a la entrada — espero que puedas encontrar a tu familia, Severus. Se quedó solo viendo hacia la nada. Recordando todo lo que había vivido con ese revedle niño que ahora debía de ser un hombre.
— ¿Necesita algo, señor Potter? — Preguntó sin levantar la mirada del pergamino que tenía en frente. — Quería hablar con usted, profesor — su voz se notó un poco ansiosa, lo que logró que Severus levantara la cabeza de su escritorio — quizás no le guste lo que le voy a decir. — Si es algo importante, solo dígalo — se levantó de su asiento, pero no se movió de su lugar. — Estoy enamorado de usted — luego de decirlo simplemente salio del despacho. Severus se dejó caer en su silla, procesando lo que ese hermoso niño le había dicho.
---…---…---…---
Sintió como lo envolvían en un abraso y por un par de segundos se preocupó mirando a ambos lados para cerciorarse de que nadie estuviera mirando. — No deberías de hacer eso — dijo a la nada. — Si me mantengo con la capa de mi padre, nadie podrá saber que te estoy abrazando. — Eres imposible — le dijo con una sonrisa de lado. — Pero así me amas. — Definitivamente.
---…---…---…---
— Bésame — le dijo al llegar al salón. No quería dejar pasar otra vez una oportunidad junto a él. Junto al hombre que amaba. — Harry, si te beso, no me podré contener — le dijo abrazándolo. — Entonces no te contengas — levantó la mano y acaricio su rostro — quiero ser tuyo. Severus descendió para besarlo con paciencia, esperando hasta el punto en que Harry lo detuviera, pero no pasó.
---…---…---…---
— No quiero que vayas — le dijo abrasándolo y llorando en su hombro — te lo ruego, no vallas. — Tengo que hacerlo — se alejó un poco de el y lo miró a los ojos quitándole los rastros de lagrimas — no puedo dejar que te encuentren. — ¡Pero te matará! — Es mi misión, Harry — le dijo besándolo de sorpresa — sabes que tengo que ir con el Lord — se alejó de el y sin mas se apareció.
---…---…---…---
Severus lo estaba esperando desde hace más de media hora. Lo había dejado en la puerta de la consulta de un medico y por fin lo vio aparecer a su lado. — ¿Tienes algo malo? — Le preguntó caminando a su lado, para poder ir a la zona de apariciones. — No — sintió como lo sostenía de la cintura y se aparecían cerca de Hogwarts — vamos a ser padres. Severus lo vio caminar hacia el colegio, mientras él quedaba plantado en el mismo lugar en que se habían aparecido.
Dejó de darle vueltas al asunto. Ya cuando estuviera con Harry le pediría que le explicara por que se fue, por que lo dejo, por que alejó a su hija de su lado. Se puso la maldita túnica negra que lo convertía en un puto mortífago. La mascara apareció en su rostro de manera inmediata. No hacía falta que saliera del colegio para que se apareciera en los terrenos de Voldemort. Llegó al cuartel sin mediar una sola palabra con ningún miembro de la orden de la muerte, a la que pertenecía desde hace más de veinticinco años. — ¿Qué haces aquí, Snape? — La voz arrastrada de Bellatrix, solo le causaba mas rechazo que el que le causaba el mismísimo Lord Voldemort. — No es asunto tuyo, Bella — le dijo escupiendo su nombre — vengo a ver que se ha sabido de Potter. — Ah, el pequeño Potter — dijo saltando de un lado al otro — pues déjame decirte que llegas tarde. — ¿Tarde? — Se le congelo la sangre de solo imaginar lo que eso significaba, pero no dejo caer su mascara de indiferencia. — Claro. Resulta que Potter se descubrió y unos mortífagos fueron por él ¿No te parece genial? — Le dijo con una sonrisa retorcida — mi Lord va a estar muy contento al destruir por fin al mocoso. — ¿Dónde se encuentra el Lord? — Preguntó serio, tratando de no exteriorizar su pánico. — Supongo que en el calabozo — dijo saltando como desquiciada — ahí llegaran los que fueron por Potter. Severus no dijo nada. Caminó en dirección a la mazmorra. Donde seguramente se encontraría ese maldito monstruo que había destruido la vida de tantas personas y la de su amor también. — Severus — lo llamó una vos escalofriante — esperaba que llegaras. — Mi Lord — dijo haciendo una reverencia — Dumbledore tiene información de que Potter fue visto en el extranjero — agregó, tratando de ahogar el desprecio que sentía por ese hombre. — Lo sé, Severus — caminó delante de él, encorvado en su posición deplorable — he mandado un grupo de mis hombres por él. — Eso es bueno, mi Lord. — Por supuesto — siguió su camino, delante de Severus — sígueme. Tendrás el honor de ser uno de los que vean su aniquilación. Severus no dijo nada. Se arriesgaba a cometer una locura si lo hacia, por lo que prefirió caminar en silencio, tratando de ver la manera de sacar a Harry y a su hija de ese decadente lugar. Llegaron a la mazmorra y se dio cuenta que aun no llegaban. Su alma estaba sufriendo, tenía que pensar rápidamente como sacarlos de ahí. Quizás podría distarlos por un par de segundo y hacerlos aparecer. Se alejó un poco y sostuvo una moneda que había en su pantalón mientras lo apuntaba con su varita. Concentró su magia, esperando que nadie lo viera y convocó un portus en la moneda, transformándolo en un traslador. Era la única salida que le quedaba. — Ya vienen — dijo la voz ¿Alegre? De Bellatrix. Severus se congeló en su lugar cuado vio como Harry caía de espalda al suelo sin soltar a su preciada carga, que aun así no pareció despertar. Harry se sentó rápidamente, comprobando que nada le haya pasado a su hija, pero cuando la revisaba se acercó un mortífago y se la quitó de los brazos. — ¡Entrégamela! — La desesperación se apoderó de su cuerpo. — Potter, Potter, Potter — dijo el lord mirándolo con gracias — tanto tiempo sin vernos. — ¡Devuélvanmela! — Ni siquiera le puso atención al tipo que tenía en frente. — Te estoy hablando, Potter — se acercó y lo agarró por la barbilla — cuando hablo, me gusta que me pongan atención. — ¡Me importa una mierda! — Le dijo soltándose — entréguenme a mi hija. — Así que quieres a tu hija — le dijo con voz malévola — pues la veras morir frente a tus ojos — vio el horror y la desesperación en los ojos del chico que vivió — Severus, haznos el honor. Harry se quedó mudo de un momento al otro y vio como un hombre se acercaba al mortífago y ya sin su mascara lo pudo reconocer. Severus No sabía si el hombre entendería que le acaban de pedir que matara a su propia hija. Severus tomó a la pequeña pelirroja en sus brazos, tratando de que no se notara tanto su emoción. Tenía que acercarse a Harry, pero tenía que hacerlo rápidamente. — Así que tu hija, Potter — le dijo mirando a la chiquilla — es linda — dijo elevando las cejas y acercándose cuidadosamente — no quieres verla morir verdad. — No la mate, profesor — le pedía Harry, sin ver bien las intenciones del hombre — se arrepentirá si lo hace. — Me amenazas, Potter. Algo completamente estúpido en tu posición — pudo escuchar las risas a su alrededor. Esos malditos enfermos estaban disfrutando el ver sufrir a su niño bello — no me gusta tu tono, Potter. — Entréguemela, se lo ruego — le pidió al ver como tenía su varita en una mano y a la niña en la otra. — No ruegues, Potter — le dijo con una puñalada en el pecho, llegando finalmente al lado del chico — te escondiste por ocho años y nadie supo de ti — lo miró con intensidad, tratando de calmarlo un poco — y ahora apareces a unos dias de tu cumpleaños — negó con la cabeza, tratando de ganar mas tiempo aun — debes muchas explicaciones — guardo su varita en su túnica y sacó la moneda. Rápidamente tomó la mano de Harry y lo miró a los ojos, sujetando firmemente a la niña — llévanos. Los tres desaparecieron del lugar, mientras el Lord rugía de furia y unos hechizos golpeaban el lugar en el que antes estuvieron Severus Snape y Harry Potter. Cuando Harry sintió los pies en el suelo se vio envuelto en unos brazos que conocía muy bien. Sintió que el pánico se apoderaba de su ser y las imágenes de lo que había pasado llegaron a su cabeza una y otra vez, logrando que finalmente colapsara. Severus sintió como Harry se desmayaba en sus brazos y lo apretó más fuerte a su cuerpo. Tenía que aparecerlos cerca del colegio, por lo que se concentró rápidamente en los terrenos de Hogwarts. Cuando apareció a unos metro del bosque prohibido se dio cuenta que no quería que nadie lo viera por el momento, primero tenía que arreglar las cosas con Harry, así que levito el cuerpo de Harry a su lado y se encaminó a la casa de los gritos, sin dejar de sostener a la niña en los brazos. Al llegar al lugar utilizó un Colloportus para poder sellar la entrada e hizo lo mismo en las demás puertas y ventanas. Se encaminó al segundo piso, con cuidado de que el cuerpo inerte de Harry no golpeara en ningún lugar. Utilizó un Fregotego para poder limpiar rápidamente una de las habitaciones y conjuró una cama a base de unas cajas acomodadas en una esquina. Dejó a la niña en la cama y a Harry a su lado. Por fin podía respirar un poco y mirar un poco a sus dos amores. Se concentró un par de minutos en gravar cada parte de la cara de la pequeña. Era realmente hermosa. Su cabello rojo, seguramente heredado de su abuela y las facciones finas, iguales al rostro de Harry. Era un pequeño angelito que dormía demasiado placida. Seguramente Harry tuvo que hechizarla cuando los descubrieron.
Continuará… Siguiente capituloCapitulo anterior | |
|
Yuki Fer As de oclumancia
Cantidad de envíos : 1504 Fecha de nacimiento : 07/04/1992 Edad : 32 Galeones Snarry : 108299 Fecha de inscripción : 30/07/2011
| Tema: Re: She is only my princess. Capitulo 2 Lun Oct 08, 2012 4:50 pm | |
| ohhh casi me da un paroo........o por dioss pero no entiendo pork harry huyoo....tendre k seguir leyendo..U_u | |
|