Majo-san Vencedor de Voldemort
Cantidad de envíos : 3224 Fecha de nacimiento : 21/01/1986 Edad : 38 Localización : chilena Galeones Snarry : 102283 Fecha de inscripción : 22/06/2009
| Tema: Agonía. Prologo. Lun Sep 27, 2010 7:04 pm | |
| Agonía
Resumen: Harry creció con una madre a la que amó más que a nadie y un padre que lo complacía en todo lo que le pedía. Sabía que ellos no eran sus verdaderos padres, pero los amaba. El destino le quitó a su madre y sólo su padre lo podía consolar. ¿Qué pasa cuando las barreras del amor fraternal se rompen? ¿Qué pasa cuando te enamoras de quien te ha criado toda tu vida? ¿Qué pasa cuando de un día al otro, te importa una mierda el que ese chico sea tu “hijo”? Pues ahora Severus y Harry tendrán que responder a esas peguntas.
Personajes: Harry Potter y Severus Snape
Advertencia: AU – Slash – Mpreg= Embarazo masculino – Muerte de un personaje – Contenido Hetero – Incesto/Twincest
Genero: General – Romance – Humor – Angustia.
Clasificación: NC-17
Disclaimers: Los personajes de Harry Potter, no son míos, pertenecen a J. K. Rowling.
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Prologo
Severus daba vueltas en la sala, tratando de no pensar en lo que pasaba en ese momento. Maldito el momento en que le dijo al Lord sobre la profecía. Maldito él, que había dejado que el miedo le congelara y ahora se estuviera arrepintiendo por eso. —Por favor, Severus —le dijo una mujer al otro lado de la habitación —Tiene que haber alguna manera de salvarlos. —Le decía entre lagrimas. —No la hay, Orietta —se sostuvo del marco de la ventana, mientras veía como el agua caía en el exterior. —son ellos o nosotros. —¡Pues prefiero ser yo! —Le gritó golpeando la mesa frente a ella, con sus pequeñas manos abiertas y desnudas —son inocentes. ¡Harry es inocente! ¡Es tan inocente como lo era Baltasar! —¡Lo se! ¡Maldita sea! ¡Se que el niño no tiene la culpa! Severus dejó que sus rodillas flaquearan y se dejó caer al suelo, mientras los relámpagos alumbraban la habitación. El sonido asfixiante de los truenos, aterró su maltrecho corazón, diciéndole que el mayor error de su visa, podía estar teniendo frutos en este momento. No se dio cuenta cuando su mujer desapareció de la habitación. Se quedó ahí. Contra la muralla que estaba bajo la ventana que daba a la calle. Recordaba como su vida había cambiado de un momento al otro. Como todo lo bueno que le había pasado, de un momento al otro se venía abajo por el odio de un demente.
Severus salió del colegio, su vida ya estaba ligada a Voldemort y se había dado cuenta de las atrocidades de las que era capas ese demente. Trató de ir al único lugar que podía mantenerlo oculto, pero tarde se dio cuenta de su error. El mundo muggle le ofrecía un sinfín de nuevos caminos que podía elegir. Lugares nuevos que visitar, gente nueva que conocer. Todo eso quedó en nada cuando sus antiguos camaradas le encontraron y le dieron una paliza capas de matar a cualquiera, pero no lo hicieron. Sobrevivió. Recordaba perfectamente cuando conoció a su actual esposa. Orietta salía de una iglesia, cuando él se desplomó frente a ella. La mujer no dudo en ningún momento en resguardarlo del escrutinio público. Le había pedido a un muchachito que le ayudara a entrarlo a la iglesia y entre los dos le cuidaron y le brindaron refugio. Orietta era una mujer hermosa. Cuando la conoció debía tener cerca de diecisiete años. Piel acaramelada y ojos pardos. Cabellos tan negros como el ébano, que caían lisos por su espalda. Se enteró de su vida mientras estuvo refugiado en la iglesia. Ella era huérfana de madre y su padre no lo quiso tener con él. La había dejado en la puerta de esa misma iglesia hace poco más de diez años. Ella lo recordaba. No le odiaba. Sabía que su padre posiblemente ya no se encontraba vivo. Le contó que sus padres se amaban con locura y que su madre murió en un accidente automotriz cuando volvía de las compras. Su padre no lo pudo soportar. Severus se fue encariñando con la muchacha, hasta que un día se decidieron y se pusieron de novios. Severus tenía diecinueve años y Orietta dieciocho cuando el cura de la iglesia les casó. Severus no era religioso, pero su esposa si, por eso la complació y realizaron el enlace. Para ese entonces, Orietta ya sabia de la procedencia mágica de Severus y de los errores que había cometido al unirse a ser tan demente como lo era Voldemort, al cual ella llamaba Satanás. Pasaron unos meses en los que parecía que la vida le volvía a sonreír. Orietta estaba embarazada y en un par de meses sería padre. Hasta unos meses atrás. Orietta había dado a luz un hermoso bacón. Le nombraron Baltasar. Era tan hermoso como su madre. El cabello negro y liso. Los ojos pardos y la sonrisa juguetona. Severus amaba a su familia más que a nada y el dolor de su alma volvió el día que Voldemort llegó a su puerta. Mató a sangre fría a su hijo de meses de vida. Su esposa estaba en manos de Voldemort cuando le pidió por ella, la intercambio por la profecía. Salvó a Orietta, entregándole a otra familia. Y ahora estaba ahí. Esperando que la muerte se llevara al hijo de la que fue su primer amor, su primera amiga. Giró su rostro para buscar a su esposa. Orietta lloraba cada noche, esperando que ese demonio le devolviera a su bebé. —Orietta. Su nombre sólo era eco en la noche. No había nadie la sala. No había nadie en la casa. Se levanto a duras penas. Tratando de recordar las palabras de su mujer. Hasta que una parte de su cerebro, aquella escondida en sus recuerdos, le dijo la verdad. >>No. Se encaminó a la salida, pero antes de poder atravesar el marco de la puesta, esta se abrió de golpe. Su esposa venia entrando, empapada, fría, congestionada. La vio a través de las lagrimas que aun caían de su juvenil rostro. >>¿Dónde estabas, Orietta? —Le exigió como respuesta, mientras cerraba la puerta, luego de ver que nadie la hubiera seguido —te dije que esta noche no podríamos salir… —Fui por Baltasar. La sangre en el cuerpo de Severus se congelo al instante, al igual que se pararon los bellos de su nuca. —Mi amor… eso es imposible, nuestro hijo mu… —No —le cortó tajante —Satanás me quitó a Baltasar, le quitó a los Potter la vida… su vida a cambio de la de mi hijo. —Orietta —le llamó espantado, viendo como la capa que traía la mujer, se removía por el frente. —Baltasar esta de vuelta, Severus. El hombre vio como se quitaba la capa, dejándola caer al suelo, pesada por el exceso de agua en ella. Orietta tenía en brazos a un bebé. De cabello negro y carita tranquila. Una mancha de sangre en su frente y la herida abierta de su frente. >>Desde hoy… este bebé es Baltasar.
Continuará…N/A: Tenía este fic gustadito en el baúl de los recuerdos (la memoria de mi pc viejo) limpiándolo para que lo mandaran a restaurar (formatear) me encontré con este tesorito y lo extraje. Apenas y tengo escrito un par de capítulos que tengo que arreglar, corregir y armar, pero realmente es muy lindo. Se los dejo en la espera de que me recupere y les pueda escribir un largo~~ capitulo de Penumbra. Un beso Majo PD: Lo iré publicando a medida que lo vaya arreglando.
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Yuki Fer As de oclumancia
Cantidad de envíos : 1504 Fecha de nacimiento : 07/04/1992 Edad : 32 Galeones Snarry : 108299 Fecha de inscripción : 30/07/2011
| Tema: Re: Agonía. Prologo. Dom Oct 07, 2012 4:20 pm | |
| rayosss pense k era mas largoo ohhhhh esoty picada onegai senseii actualiza......si no esperaree ....total yal o hice una vez k no pueda espera mas tiempo...no me matara .........n_n excelnte sensei...n_n | |
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