Lo más divertido de su vida. 2º Capítulo: Una habitación matrimonial

2º Capítulo: Una habitación matrimonial

Harry no podía estar mas complacido de las caras de todos, claro, tomando en cuenta que también se había pasado un poco de la raya al dar a conocer su identidad y cosas por el estilo con tanta facilidad, pero estaba seguro de que lo solucionaría antes de irse.
-Tengo que dejarlos ahora, por que el director se debe haber adelantado para nuestra reunión, pero ya tendremos tiempo para hablar -les dijo mientras se alejaba.
En el pasillo quedaron los otros seis, viendo como Harry se alejaba con el bebé en brazos.
-No puedo creer que todo esto esté pasando -dijo James poniendo una mano sobre su frente-. Tendremos un hijo -le dijo a su novia.
-Y aparentemente uno muy poderoso -dijo la muchacha sonriendo.
-Pero será corrompido en el futuro -dijo Sirius, mirando de mala amanera a Severus, que se había quedado obnubilado por tanta información.
-Déjalo, Sirius -le dijo Remus sosteniéndolo del brazo, al igual que a Petter-, será mejor que nos vayamos a nuestra torre.
Los otros cuatro asintieron, sin decirle nada a Severus, que permaneció en ese pasillo por unos minutos más, antes de decidirse a ir a su habitación. Ya tendría oportunidad para saber cómo fue que en el futuro terminó casado con un niño y además teniendo un hijo con este. Claro, dejando de lado que ese niño era hijo de su némesis.

***

-Me sorprendió el que apareciera en medio del gran comedor, joven.
-Lo sé, director, y de verdad lo lamento mucho, pero no estaba en mis planes hacer este viaje y mucho menos el traer a mi hijo conmigo.
El director miraba a los dos seres sentados frente a él. Harry tenía al bebé sentado en su regazo, mientras este miraba con sus grandes ojos para todos lados.
-¿No crees que sea peligroso el que hayas dicho todo eso frente a lo que, en tus palabras, había enemigos tuyos en el salón?
-Lo sé, pero esa es la idea –se puso de pie- uno de esos “enemigos” tiene en su poder la única arma que me hace falta para derrotar al lord oscuro, aunque en mi época ese sujeto ya no contaba con dicho objeto. Mi esposo era su amigo y lo es aun en esta época, por lo que sabíamos que de haber alguna oportunidad teníamos que tomar para llegar al objeto.
-¿Puedo saber de qué se trata? –le pregunto el director, acercando al bebé una pluma que estaba llamando la atención del infante que estaba sentado frente a él.
-Un hechizo, de hecho, el único que puede debilitarlo lo suficiente como para que mi ataque llegue primero a él, que el suyo a mí.
Harry soltó el aire y acarició al fénix que se mostraba sumiso ante él. El director estaba un tanto facinado por todo lo que el joven le estaba informando, era increíble que el muchacho se manejara tan bien y quería saber más, siempre quería saber todo lo que pasara a su alrededor.
-Supongo que eres hijo de James Potter.
-Lo soy, y de Lily Evans, para ser mas precisos.
-Buena sangre corre por tus venas, unos buenos maestros tuviste entonces.
-No, señor –dijo cambiando su alegre semblante y sentándose nuevamente poniendo a su hijo sobre su regazo-. Mis padres murieron a manos de Voldemort cuando era apenas un infante. No supe de su existencia sino hasta que cumplí los once años. Antes de esos viví con unos familiares que no vienen al caso nombrar.
Harry sabía que el director era poderoso, por lo que su obliviate no sería tan efectivo en él como en los demás miembros del alumnado y los profesores con los que tendría contacto. Por lo que no podía darle demasiados detalles, pues su vida podría cambiar drásticamente con eso, y en el peor de los casos, nunca vivir el romance que tuvo con su esposo y la vida de su hijo se vería peligrar.
-Lo lamento mucho, muchacho, si está en mis manos…
-Lo estará. Señor, pero usted hará las cosas como corresponden, no podrá interferir más de lo necesario. Sólo estoy aquí de paso, y espero contar con su ayuda a la hora de dejar mi visita como un mero cosquilleo en las mentes de todos.
-Cuentas conmigo, Harry –dijo feliz de que le tuviera en cuenta en un proceso tan importante-. Ahora tenemos que ver donde dormirás.
-En eso quisiera contar con su ayuda también. En mi época dormía en las mazmorras y mi hijo está muy adaptado a su “baja temperatura”
-Oh… un Slytherin por lo que veo.
-Para nada, profesor. Tal como mis padres soy un orgulloso león, pero mi esposo sí es una serpiente y por lo tanto un miembro de la casa de Salazar. Cuando nos casamos aun me faltaba un año para terminar mis estudios y luego vino lo de la batalla contra el oscuro, por lo que nunca salí de esas habitaciones.
-Tu compañero debe ser también muy poderoso como para haber encontrado el hechizo para traerte a esta época.
-Mi esposo es Severus, director.
-¿Severus? ¿Severus Snape? –preguntó, ciertamente sorprendido por esta revelación. Estaba encariñado con el inteligente muchacho, pero nunca se imaginó que este llegara a permanecer en los terrenos del colegio varios años después de salir de este, sólo una idea le pasaba por la mente- él es profesor aquí, ¿verdad?
-Lo es, señor. Espero que entienda entonces por qué pasaré mucho tiempo con Severus en esta época, me gustaría saber por mi mismo todo lo que vivió el hombre que amo, aquí en su época. Además, que sólo a él le confiaría el cuidado de Toby mientras yo me encuentre en misión.
-Me dejas sin palabras –dijo honestamente-, pero creo que tú puedes ayudar en esta época tanto como deseas ayudar en la tuya -le informó-, digamos que aquí Severus tiene un par de “enemigos”.
-Lo sé, mi padre y padrinos no actuaron de la mejor forma, pero ellos formaron parte de la infancia de Severus y no puedo interferir en ello. Si bien no lo apruebo, fueron parte importante de su formación y quiero a mi Severus tal y como es.
-Eres un buen hombre, Harry –dijo el director con una sonrisa-. Muy bien, es hora de que vayas a tus aposentos permanentes.
-Supongo y espero que me deje en las habitaciones de Severus.
-No hay ningún lugar mejor para ti, muchacho.
Harry sonrió de lado, eso era justamente lo que estaba esperando escuchar, por lo que le tomó la palabra al director y con su hijo en brazos se dirigió a las mazmorras, estaba seguro de que Severus se impactaría al verlo ahí, pero realmente quería saber cómo era su esposo de niño, como fue realmente su estancia en Hogwarts.
Obviamente notó que todo el mundo tenía puesta su mirada sobre ellos, cuando de buenas a primeras entró en la sala común de Slytherin con su hijo en brazos, el cual a estas alturas ya se caía de sueño, demasiadas emociones para un niño tan pequeño, como lo era Tobías.
Severus vio al joven que decía ser su futuro esposo y además hijo de su némesis en medio de la sala común de su casa y sabía que se avecinaba un fuerte dolor de cabeza, más no se equivocó cuando este se acercó con paso firme y se plantó frente a él.
-Hola, Severus –le saludó con una sonrisa de lado- el director me dijo que podía quedarme en tus habitaciones por el tiempo en que este aquí.
Hay que decir que esto impacto al chico, las mismas facciones de Severus lo demostraban, ni siquiera podía articular palabra.

TBC...

N/A: Este fic lo voy a publicar aquí primero que en cualquier otra pagina. está completo, sólo me falta ir editarlo.

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WIIIIII!!!!!
Gracias, gracias, gracias por continuar esta historia.

De nada, amor, ya tengo escrito hasta el capitulo seis, así que tendremos más, muajajajajaja

» Lo más divertido de su vida. Capítulo 1
» Lo más divertido de su vida. Capítulo 4: Cita y conversaciones
» Lo más divertido de su vida. Capítulo 5: El plan de Harry
» Lo más divertido de su vida. Capítulo 3: Primera noche juntos
» ¿Deberiamos pasar al plato principal? Capitulo 11. ¿Quieres saber algo divertido?