Traducción Invisible Capítulo 4

Capítulo 4

Creciendo y su Carta de Hogwarts

Nick y Harry crecieron en mundos aparte, aun en la misma casa.
NO hace falta decir, que ambos tuvieron vidas distintas. Harry no tuvo el amor de su familia, pocos juguetes, y una habitación pequeña. Nick tuvo el amor de su familia, un cuarto grande, y todo lo que siempre quería. Las únicas reglas que Harry debía seguir era que debía estar fuera del camino y nunca pedir nada, Mientras que Nick aparentemente no tenía ninguna regla. Nick tenía un tutor privado y tenía citas para jugar con niños de su misma edad, mientras que Harry tuvo que aprender todo sin un profesor, y raramente, si alguna vez, se le permitía estar alrededor de un niño de su misma edad. Los libros se convirtieron en los mejores amigos de Harry mientras que eran los enemigos de Nick.

Si alguno se ha pasado aunque sea un minute pensando y viendo a Harry, se habría dado cuenta de lo extraordinario que es.
Un par de meses después de la muerde del Señor Oscuro, Harry estaba, como siempre, alimentándose a sí mismo. Escribió su nombre a través de la sucia silla, algo que pocos niños de su edad podían hacer. Aun así, nadie presto la mínima atención al pequeño niño; su padre únicamente movió su varita y el llamado desorden desapareció.
Mucha gente estaba siempre entrando y saliendo de la mansión Potter. Los Weasley estaban allí mucho tiempo, así como también mucha gente del Ministerio, incluyendo a Madam Bones y su sobrina, Susan. Todos sabían de Nick Potter, puesto que estaba siempre en los periódicos. Ellos ni una vez pensaron sobre el otro pequeño niño que formaba también parte de la familia. Claro que, sabían que tenía un hermano; aun que, les daba igual, como si no hubiera sido Harry quien había derrotado a Quien–Tu–Sabes o salvado el mundo.

Para el momento que Harry y Nick tenían 3 años, Harry había aprendido a hacer lo que pocos a la tierna edad de 3 años debían hacer: había aprendido a cuidar de sí mismo, a bañarse, y a cuidar los pocos juguetes que tenia. El podía, e hizo, leer los libros que sus padres habían traído a Nick, el cual si podía no los leía. Harry los escondía bajo su cama para que así nadie se los pudiese quitar.
Harry nunca dijo nada de que fue él quien había derrotado a Voldemort. Él sabía que si lo hacía no le creerían; ellos estaban demasiado seguros pensando que su hermano fue el que lo había derrotado. Habían celebrado cada día que el nombre de Nick aparecía en los libros, periódicos, y revistas. Hasta ahora, había pasado 12 veces. Todos los artículos de los periódicos y revistas habían sido guardados y colgados en la habitación de Nick. James y Lily también los duplicaron y los pusieron en su habitación.

Remus y Sirius iban ocasionalmente, pero pasaban la mayor parte del tiempo fuera en misiones para algo llamado la Orden. Puesto que no tenían familia, eran voluntarios para hacer la mayor parte del trabajo. Todos sabían que el Señor Oscuro no se había ido, así que Albus les pidió que siguieran siendo agradables con los hombre lobo. Como resultado, Sirius y Remus no tenían tiempo para él tampoco. Ocasionalmente Remus le hablaba, pero Sirius siempre quería ver a Nick solo. Parecía que Sirius se había olvidado de que tenía otro ahijado.

Lily había registrado dos fuertes mujeres como madrinas de Nick, Alice Longbottom y Amelia Bones, además de su padrino, aunque Lily había querido usar a Remus. Harry no tenía madrinas, solo un padrino.
Harry estaba siempre aburrido; normalmente se pasaba todo el tiempo en su cuarto, leyendo los libros que tenía una y otra vez puesto que podía leer perfectamente. Gracias a Dios, por el cuarto cumpleaños de los gemelos, sus padres decidieron conseguirle a Nick su propia biblioteca, pagada con el dinero y llena de los libros que la gente agradecida por que hubiese salvado el mundo le enviaba a Nick. La biblioteca Potter estaba cerrada, puesto que, los niños eran muy jóvenes para leer la mayoría de esos libros.

Parecía que Nick se parecía a su padre y no quería leer historias. Harry, por otro lado, estaba en el cielo con los libros de la biblioteca de Nick, puesto que la mayoría eran libros con dibujos. Tomaba uno al tiempo, así que estaba constantemente balanceándose mientras leía todos los libros que podía...Lo que no era difícil, puesto que sus padres nunca pensaban en él, ni siquiera le daban la hora. Eso, aun así, complacía a Harry; sabía que era diferente a su familia. Si hubieran estado alrededor, habrían visto a un feliz Harry sonriendo y riéndose mientras leía los libros. Eran la huida de Harry de un mundo que creía que no era importante.

Los días pasaban lentamente, la fama del héroe parecía haberse calmado, la gente veía a Nick como un chico normal además de como un héroe. Hacía pequeñas demostraciones de magia accidental, aunque nada magnífico, como se imaginaron que haría. James y Lily no veían eso; continuaron malcriando a su primer hijo. Alice tuvo su Segundo hijo con Frank; Lily y James fueron nombrados sus padrinos. Le llamaron Marcus Frank Longbottom. Era tres años más joven que Neville. La mayoría de la gente le llamaba Frankie.

Neville y Nick eran Buenos amigos, pero no mejores amigos. Nick amaba el Quidditch y hacer bromas. Neville era un niño callado como su padre, le gustaba pintar o jugar en el jardín sus plantas. Habría sido el compañero de juegos perfecto para Harry, si solamente hubiesen insistido para que prestase una mínima atención al pequeño niño. No ayudaba que Harry normalmente se escondía en la biblioteca cuando venía gente...No es que alguna vez estuviera fuera de la biblioteca; dormía y comía ahí. Algunos dirían que vivía ahí en vez de en su pequeña habitación.

Harry y Nick tenían cuatro años cuando vieron la tripa de su madre empezar a crecer, entonces escuchó como le decían a Nick que iba a ser el hermano mayor, que su madre estaba embarazada. Nick había estado tan feliz de saber que iba a tener otro hermano o hermana...Aunque, rompió el pequeño corazón de Harry cuando lo oyó y escuchó.

No importaba lo mucho que estaba acostumbrado a que le dejasen fuera, siempre parecía doler. Había tratado tan duro de llamar la atención de su madre, pero nada parecía funcionar.

Finalmente, se dio por vencido y trataba de mantenerse ocupado. Nunca antes había sido verdaderamente feliz en su vida, pero a nadie le importaba. Él nunca fue realmente un niño lleno de felicidad; estaba contento con sus libros, pero nunca feliz.

Cuando tenían casi 5, nació su hermana. Su nombre era Roxy Lillian Potter. Tenía el pelo rojo y desordenado como su madre y sus ojos verdes, y Lily estaba en la luna. Pronto se dieron cuenta de que tenía el carácter de su madre y su pasión por los libros.

Harry y Nick ya no eran tan idénticos. Mientras el pelo de Nick se había convertido en un nido de pájaros más desordenado de lo que debería haber sido (el cual parece ser el único tipo de pelo de los Potter), el pelo de Harry había crecido fuerte y pasaba de los hombros del niño. Nick todavía tenía la mayor atención mientras su hermano y Hermana crecían, pero a Roxy le habían contado historias nocturnas de su valiente y heroico hermano salvando el mundo. Por tanto, no fue una sorpresa cuando Roxy prefería pasar tiempo con Nick en vez de con Harry.

La única cosa que Harry como amigo y confidente era su diario. Un libro que nunca se acababa; aparecía papel mágicamente cuando llegaba a la última página. Su libro estaba lleno...de entradas tristes y rompe-corazones que habrían tenido a cualquiera llorando. Remus compró dos para el cumpleaños de los gemelos, aunque creíblemente, el de Nick nunca fue usado.
El del joven de los gemelos, por otro lado...

Querido diario,

Miré por la ventana hoy, y vi a mi hermano otra vez, con sus amigos. Ojalá tuviese amigos con los que jugar...Todos parecen tan felices...¿Por qué me odian tanto? ¿Porqué soy ignorado? Nadie me saluda, como si fuera invisible. Están jugando a un juego llamado tag, también tienen el gato que mi madre trajo para Nick. Siempre quise una mascota, pero no tengo permitido tener una mascota. Nick me pegó en la cara por tocarla. Me dejó un moratón, y a nadie le importó. Cuando Nick se hace daño le limpian y curan...¿Por qué me odian? ¡Haría cualquier cosa por que me vieran solo unos pocos minutos! Les odio por no notarme, y solo deseo que me quieran...Quererme como quieren a Nick. No es mi culpa no soy tan Ruidoso o bueno gastando bromas como lo es él. Yo solo no se como, nunca me dieron la oportunidad.

Harry


Había, por supuesto, muchas más desesperadas y solitarias entradas en el diario, a medida que Harry se hacía mayor.

No pareció que había pasado mucho tiempo cuando llegó el momento de que las cartas para Hogwarts llegaran. Minerva McGonagall había venido par a ver a los Potters personalmente para darles sus cartas para el colegio. Siempre le gustaron los Potter; estaba en deuda con ellos, aunque nunca lo admitiría.

"Ah, Profesora McGonagall, ¿Qué haces aquí? Entra y tender el café listo," dijo Lily sorprendida cuando vio a la formidable mujer en la puerta. No había visto a ninguno de los profesores desde que Dumbledore les visitó la noche que Nick derrotó a Voldemort.

"Me encantaría. Estoy aquí para entregar personalmente la 'carta de Hogwarts a tus hijos," dijo Minerva, una sonrisa en su cara.

"¡Eso es genial! Nick ha estado deseando que llegara—su Padre no está muy dentro, y no está jugando lo suficiente al Quidditch," dijo Lily, negando con incredulidad.

"¿Así que seguirá los pasos de su padre, no?" preguntó Minerva, sonriendo otra vez.

"Sí, eso es correcto. Espera un segundo," dijo Lily, esperando para tener permiso para interrumpir la conversación.

"Seguro," estuvo de acuerdo Minerva.

"Nick, ¡ven aquí ahora! ¡Tú carta para Hogwarts acaba de llegar!" gritó Lily.

"Tengo dos aquí," dijo Minerva con confusión.

"Ah, tienes la de Harry también. Él probablemente la cogerá después," desestimó Lily, dejándolo pasar pues Nick entraba al salón seguido por Roxy.

"Bien. Aquí tienes entonces," asintió Minerva, dándoselas a Lily. Ella pensó que Harry estaba a lo mejor fuera; no tenía ni idea de hasta qué punto estaba confundida.

"Okay, Nick, aquí tienes," sonrió Lily cuando encontró a carta con su nombre escrito y se la dio a Nick.

Felizmente, Nick abrió el sobre y comenzó a leer los contenidos mientras que Lily abría y rápidamente tomaba la carta Harry.

"Mr. Nick Sirius Potter,

Nos complace anunciarle su aceptación en Hogwarts Escuela de Magia y Hechicería. Una lista de los recursos necesarios para el curso que viene se ha proporcionado. Si acepta, por favor escriba su nombre en el reverse de este papel y envíenoslo mediante lechuza cuando más le convenga.

Profesor Albus Dumbledore, Director de Hogwarts Escuela de Magia y Hechicería, Orden de Merlín, Primera Clase; Fundador de la Orden del Fénix.

UNIFORME

Escuela Hogwarts de Magia y Hechicería
Estudiantes de primer año se requiere:

1. Tres túnicas de trabajo (negras)
2. Un sombrero liso y puntiagudo (negro) para llevar todos los días.
3. Un par de guantes de piel de dragón
4. Una capa de invierno (negra, gris)
¡Por favor tened en cuenta que toda la ropa de los alumnos debe llevar su nombre!

LIBROS DE TEXTO

Todos los estudiantes deben tener una copia de todos los libros siguientes:
El libro estándar de los hechizos (Grado 1) de Miranda Goshawk
Libro de Historia de la Magia de Bathilda Bagshot
Teoría de la Magia de Adalbert Waffling
Guía para principiantes de transformaciones de Emeric Switch
100 hierbas magicas y setas de Phyllida Spore
Mácicas pociones y brebajes de Arsenius Jigger
Criaturas fantásticas y dónde encontrarlas de Newt Scamander
Las fuerzas oscuras: Una guía de auto-protección de Quentin Trimble

OTRO EQUIPO

1 varita
1 caldero (pewter, estandar tamaño 2)
1 set de viales de plastico o cristal
1 telescopio
1 báscula de latón

Los estudiantes deberán traer también una lechuza, una Tortuga o un gato.

¡También se debe recordar a los padres que los alumno de primer año no tienen permitido traer su propia escoba!

"¡No me lo puedo creer! ¡Mi carta de Hogwarts está aquí! Mamá, ¿podemos ir al callejón Diagon? ¿Por favor mamá? ¿Podemos ir?" preguntaba Nick constantemente, saltando.

"Oh, Nick, ¿había alguna duda sobre si serías aceptado? Estabas apuntado desde que naciste," dijo James mientras entraba en la sala, una sonrisa orgullosa estaba en su cara. Tenía tantas cosas que quería dar a Nick antes de que se fuera a Hogwarts.

"Sí, ¡podemos ir esta noche al callejón Diagon! Es más, comeremos fuera para celebrarlo," sonrió Lily.

Minerva se terminó su café y se excuse después de decir, "Espero verte en mi casa, Señor Potter." Entonces ella se fue, apareciéndose una vez que había traspasado las barreras de la mansión Potter. Se mudaron después de todos los eventos de Halloween, no sintiéndose seguros en Godric Hollow.

James, Lily, Nick, y Roxy estaban listos para irse cuando Harry bajaba las escaleras, un plato vacío en su mano; ya se hacía la mayor parte de sus comidas. Sus padres o no veían o no les importaba la profunda tristeza que habitaba en los ojos del niño.

"Yo te conseguiré las cosas pues tienes la misma talla que Nick. Solo quédate aquí," dijo Lily mientras que hacía un traslador para todos. "Oh, y firma el reverse de tu carta para que pueda enviarla por lechuza junto con la de Nick por la mañana—está en la mesita de café en el salón. Déjala en la cocina."

"Okay," concordó Harry suavemente, mientras que continuaba su camino como si no le importase.

Nunca les llamaba nada si podía evitarlo. Eran su madre y padre, pero era incapaz de pensar de ellos de esa manera. Para él, eran personas que le ignoraban y le hacían daño.

Nadie vio como los hombros de Harry temblaban o la solitaria lágrima que hacía su camino a través de la cara de Harry, sus ojos llorosos, aterrizando con un plop en el suelo de la Mansión Potter. Ni siquiera su familia le quería. Dolía más y más con el paso de los años, aunque no sabía por qué. Había pensado que iría mejorando, en cambio, empeoraba...El agujero era cada vez mayor solo se hacía más grande, hasta que su corazón era solo una herida abierta.

¿No empezáis a odiar a toda la familia? y sobretodo a Lily... Bueno espero que os haya gustado no dudes en dejar un comentario