Potter, ¿de quién es esta tarea?

Sip

Garabato enamorado de Araleh Snape

Aquí voy.

Snape se frotó el puente de la nariz con desgana y se preparó mentalmente para otro de esos berrinches de Harry. El ex Gryffindor tenía ya 25 años y seguía comportándose como un niño. Y ni con esos años de vivir juntos dejaba de ser un poquitín fastidioso.

-¿En serio? -Severus enarcó una ceja cínicamente.

-¡No te burles de mí, Snape! -Estalló furioso.

-¿Se puede saber desde cuando decidiste dejar de llamarme por mi nombre?

-Justo ahora y ¡eso no es lo importante! -Gritó exasperado.

-Oh, yo creo que sí, porque me hubiese gustado que me lo informaras para hacer lo mismo, Potter.

A Harry se le subió el color al rostro, estaba a punto de sacar su varita y hechizar a ese idiota de Snape que no se tomaba en serio lo que le estaba diciendo con toda el alma.

correcto

-Vamos Potter! Si es de conocimiento general que eres la pequeña puta de Snape –escuchó una voz pedante y conocida.

-Si vas a molestarme Draco te juro que no te vuelvo a permitir acercarte a mí sin lanzarte un par de maldiciones.

-Ey calma! Sólo era una broma, vengo en son de paz.

-Jo jo, que chistoso –bufó Harry.

-Que enojón señor cabronazo-salvador-del-mundo –el rubio pasó por los hombros de Harry un brazo y con el otro le desordenó aún más si era posible el cabello –era para no perder la costumbre de hacerte enojar.

-Y vaya que lo lograste –contestó el moreno de forma cortante, mientras se zafaba del agarre –los espero en el comedor… -y sin más palabras desapareció por el pasillo.

-Ok, qué bicho le picó esta vez a Harry?

-Camina hurón y te contaremos –el pelirrojo se encogió de hombros al sentir como el rubio se le abrazaba y le besaba de forma cariñosa el cuello.

bien

Puntos para YukimuraSayu, por Día de difuntos




Puntos para Pescadora de Estigia, por Garabato enamorado




Puntos para Majo-san, por No me digas que te vas

Perdón por el retraso, aquí estoy:

Adam entró a Hogwarts, ¿y adivina qué?... fue a Slytherin. Para qué te voy a contar lo feliz que estaba Sev, ya te lo podrás imaginar; no ha parado de hablar de eso desde ese día. Y a mí, el verlo tan contento me consuela totalmente de que no haya ido a Gryffindor.

Esperanza ya entró en su último año, y también le dio una felicidad a Sev, supongo que en compensación por lo del color rojo de su primer año. Decidió entrar a estudiar Pociones Avanzadas en la Universidad, dice que en cuanto se gradúe quiere ayudar a su padre con sus investigaciones. Por su parte, Richard quiere estudiar medimagia, como yo.

En cuanto a Nathan, a principios de año va a ir a estudiar en la mejor escuela-conservatorio del mundo mágico, en Viena. Al principio tuvimos nuestras reservas, es todavía tan pequeño para ir a vivir en un internado lejos de casa. Pero es una oportunidad única, conseguir un puesto en esa escuela es casi imposible; lo logramos porque Pansy tiene un amigo que pertenece a la directiva del instituto y quedó impresionado del conocimiento musical de Nathan. Y mi niño está tan emocionado con la noticia que no tuvimos corazón para negarnos. Además, durante los tres primeros años permiten que los padres visiten a los chicos un fin de semana al mes; digamos que eso nos convenció.

En cuanto a Severus, el mes pasado se enfermó seriamente el Profesor Kistler, su socio en Ucrania. Fuimos un día a visitarlo y conocí a Víktor, quien a partir de ahora se va a encargar de sus investigaciones.

Es un hombre de unos cuarenta años, de pelo castaño y ojos azules, y podría decirse que bastante guapo, aunque a leguas se nota que es muy petulante y engreído. Te debo confesar que no me gustó ni un poquito; además, hay algo en su actitud hacia Severus que me da muy mala espina. Sin embargo, no pienso preocuparme; mi esposo me ama y eso es algo que ni el más engreído de los hombres podrá cambiar.

Retazos de vida?

Puntos para Pescadora de Estigia, por Me estoy volviendo viejo?

Aqui esta mi parte: ^^

Harry: Severus, te amo, por favor, no te detengas, no esta vez, por favor.

Severus: ¿Estás seguro?

Harry: Lo he estado desde la primera vez que te bese.

Severus: Si te hago daño…

Harry:… No lo harás.

Severus: Si te duele…

Harry: …Pasara.

Severus: Prométeme que si te lastimo me pedirás que pare.

Harry: ¿No debería yo estar pidiendo que me prometas eso?

Severus: Harry…

Harry: Esta bien, te lo prometo, te lo juro, si quieres hacemos un Juramento Inquebrantable, llamamos a un tercero y listo.

Severus: No juegues quieres, no quiero hacerte daño.

Harry: Severus, soy virgen y no sé bien como actuar, pero lo que si se, es que te amo y quiero que me hagas tuyo.

Severus: Esta bien, solo recuerda que lo prometiste.



Harry volvió a basar a Severus, este finalmente derrumbo la muralla y se dejo llevar, esta vez no se detendría, esta vez amaría hasta el final al niño que vivió y pero más importante aún, a la persona que siempre amo.

T_T yuki... una pistista

Puntos para YukimuraSayu por Retazos de vida



Vamos, que los siguientes ya son dobles

-Esta todavía en proceso.
-El nombre de la autora es corto.

Aqui va otro Fragmento:

En la sala, Harry estaba siendo atacado por los labios de Severus, el mayor había extrañado toda la semana al chico y luego de terminar de explicarle lo sucedido con Sirius lo beso apasionadamente.

Severus: Ahora solo tenemos que esperar a que salgas del colegio y tendremos un noviazgo decente.

Luego de unos minutos Severus y Harry fueron hacia la cocina, al entrar ambos chicos iban tomados de la mano, Harry por costumbre lo iba a soltar, pero el mayor no se lo permitió.

Severus: No hay de que preocuparse.

Harry y Severus se reunieron con los demás, aunque se había reunido anteriormente con ellos, Severus se sentía un poco nervioso, estaba con los amigos de su novio, que también era sus alumnos, no sabia que decir.

Sirius: Bueno Severus, relájate, nadie te va a comer, bienvenido a la familia.

Vale.. tarde...

Correcto majo!

bien

Aquí vamos:

Ron esperaba pacientemente detrás del mostrador de la tienda de ingredientes, el empleado había ido a revisar si tenía el material que el pelirrojo necesitaba estaba en la bodega, de otra manera tendría que volver otro día. Mientras el Gryffindor esperaba, miró a través de la ventana y se dio cuenta que ahí afuera estaba su ex profesor de pociones, hablando otra vez con aquel hombre con del que tantas veces había visto acompañado. Parecía que discutían.

El otro hombre –alto, cabello castaño, ojos azules– asió la manija de la puerta de la tienda para entrar, entonces Ron corrió a esconderse por si entraban. Cualquier cosa que pudiera saber e informar a Harry sería buena. Entró a un armario y dejó entreabierta la puerta para ver. Los dos hombres entraron. El pelirrojo se sorprendió de ver que no discutían, más bien el Slytherin le estaba suplicando al otro.

-Hugh, por favor, te necesito- dijo Snape, visiblemente desesperado.

-Lo siento, Severus, pero esto es demasiado importante. No creo estar preparado para algo así- respondió apenado.

-Por Merlín, ¿cuántas veces voy a tener que suplicarte? Estás interesado, ¿no?

-Sí…

-¿Entonces por qué no me dices que sí de una vez?

El hombre lo pensó un momento, se notaba indeciso.

-¿Por qué es tan importante para ti?

-Es algo que quiero hacer- se dio la vuelta-. Muy pocas veces hago lo que deseo.

-¿Por qué yo?

-Porque- se giró y sonrió-, eres el hombre perfecto: eres muy inteligente, capaz, buen mago… Te necesito. ¡No he encontrado una mejor opción que tú!

-Ah, eso significa que si yo no fuera el mejor…

-No, no, no quise decir eso- peinó su cabello con ambas manos, intentando tranquilizarse-. Eres el mejor y además te quiero. ¿Qué más puedes pedir? ¿Quieres que diga que eres lo mejor que me ha pasado? Lo puedo hacer, maldita sea, pero ya di que sí- rogó.

-No lo sé…

Snape tomó al hombre por los hombros, lo estrelló contra la puerta, lo mantuvo fijo ahí, como si fuera a besarlo.

-Por favor, acepta. De verdad te necesito.

-Pero…

-Me dijiste que ibas a estar ahí cuando yo te necesitara, ahora es una buena oportunidad para los dos de empezar a…

-Bien, está bien- sonrió-. Acepto.

-Gracias a Merlín, pensé que nunca me dirías que sí- ambos rieron.

-Parece que sabes convencer a un hombre, Snape.

-Puedes apostarlo.

Se miraban fijamente, parecía que estaban a punto de besarse, pero un ruido los hizo girar. Era el empleado de la tienda que volvía con el pedido de Ron. Pero el pelirrojo no era estúpido, no iba a salir de ahí y delatarse. Simplemente se desapareció, esperando que la puerta del armario amortiguara un poco el ruido.

correcto

Puntos para Majo-san, por Se suponía que nos odiábamos




Puntos para Pescadora de Estigia, por Mi único amor

bien

Los ojos que le inmovilizaban casi le dejaron sin voluntad, pero había oído hablar sobre la mirada fija de un vampiro, e hizo caso omiso. Los ojos de Snape aún eran negros, pero allí donde habían sido sin vida y duros, ahora parecían fosos sin fondo con pequeñas joyas adornándolos. Harry sabía que podía perderse en ellos si quería. No había encontrado a Snape, el profesor de pociones, atractivo de ninguna manera con su piel cetrina, nariz ganchuda y dientes amarillos, pero aquella criatura que se encontraba a su lado era una cuestión diferente. Aún estaba ahí la nariz ganchuda, pero la anteriormente enfermiza piel era pálida y perfecta como si ninguna impureza la hubiera tocado siquiera, y los dientes del vampiro brillaban blancos con dos mortíferos colmillos extendiéndose desde la parte de arriba.

Snape era un vampiro de alto rango, uno de la realeza, y parecía el Príncipe en cada centímetro y cada gesto. Harry se había sorprendido al descubrir que los vampiros sobre los que había aprendido en defensa contra las artes oscuras no eran los únicos; estaban el vampiro común, y había varios otros. Eran lo que una persona fue antes de que fueran convertidos lo que decretaba el tipo de vampiro en que se convertirían y los vampiros debían de haber sabido lo que sería Snape antes de que hicieran su oferta. Era imposible notarlo para un mortal, pero los vampiros lo habían sabido. Al pensar en ello, Harry sospechaba que había sido por ello que le habían exigido este precio en concreto; la realeza vampírica era excepcional.

—¿Una copa de vino? —le ofreció Snape, para gran sorpresa de Harry.

correcto

bien

correcto

bien

Puntos para Majo-san, por Mi vuoi bene




Puntos para Pescadora de Estigia, por La verdad




Puntos para Majo-san, por La voluntad de los vampiros




Puntos para Pescadora de Estigia, por Extrañando tu presencia




Puntos para Majo-san, por The swing

correcto

bien

correcto