Majo-san
Vencedor de Voldemort
       
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 | Tema: Develaciones. capítulo 15: Lo que su madre no pudo hacer  Miér Abr 03, 2019 10:57 am | |
| Capítulo 15: Lo que su madre no pudo hacer.
Los meses que siguieron a este fueron los mas largos para James Potter, su estancia en esas cuatro paredes los estaba volviendo loco.
-De verdad, Snape, necesito salir de aquí -dijo desesperado a su “médico” personal.
-Todos los días lo mismo Potter -dijo negando-, entiende que si hago esto es para que ese bebé pueda tener la oportunidad de conocer el mundo.
-No creo que salir a los jardines sea peligroso…
-Lo es -dijo tajante y de mal humor.
James no tenía la culpa por completo, de hecho, era Harry el que estaba insoportable desde hace unas semanas. Todo le parecía mal, todos estaban en su contra y todos lo odiaban.
Severus se plantearía dos veces la próxima vez si dejaba o no a su pareja en cinta.
Pero debía admitir que después de sus ataques y rabietas, Harry solía disculparse, notando sus malos cambios de humor.
-No puedes caminar.
-¿Es sólo eso, Severus? -dijo Voldemort desde la entrada de la habitación.
-Básicamente si, mi señor, evitar cualquier fatiga por mínima que sea.
-Bien -dijo yendo hasta donde su amante y descubriéndolo de las sabanas, lo sostuvo en brazos.
-¿Qué haces? -preguntó alarmado y algo avergonzado.
-¿Quieres ir a los jardines o no?
-Pues sí -dijo tragándose las ganas de pedirle que lo bajara, cualquier cosa era mejor que estar en esa habitación.
Severus suspiró negando, si las cosas eran así no tenía que preocuparse. Por lo menos no de eso. Hace días tenía una espina clavada en el corazón y no quería dejar a Harry solo más del tiempo necesario, así que si el Lord se haría cargo de su “suegro” él iría con Harry.
…
…
En el castillo las cosas estaban como siempre, muchos chicos aun no se acostumbraban a la idea de que el control del mundo mágico lo tenía el ser que por toda su vida le dijeron que debían temer.
Draco era de los que les importaba un comino si alguien hablaba de eso, él estaba en paz en ese momento, sus padres le dijeron que harían un viaje por el mundo, que le dejaban la mansión para él mientras tanto, pero que pidiera autorización a su tío Regulus si quería llevar a Dziban a la mansión. Algo completamente ridículo si es que tomaba en cuenta de que el profesor Lupin aun ahora, luego de meses de relación con su primo, estaba en desacuerdo con esto. Regulus solía ponerse de su lado, así que no creía muy necesario el que le dijeran en realidad si se llevaría o no a su amante a la mansión por el tiempo que él estimara conveniente, claro, cuando estuvieran de vacaciones, pero sólo faltaban dos semanas para eso.
Caminó por los pasillos de Hogwarts, pero sabía que alguien lo seguía, no podía darse una idea de quien era, pero antes de seguir caminando doblo en la siguiente esquina y espero a ver quien le acechaba. Hasta que la persona apareció.
-Demonios, Blaze, me asustaste.
-¿Draco? -dijo inocente -¿Qué haces aquí escondido?
-Tú me seguías -dijo mirándolo con los ojos entrecerrados.
-Yo iba a la biblioteca… en realidad iba pensando en otra cosa así que no me fije que ibas adelante.
-Bien -dijo no muy convencido, pero sin motivos para dudas de su compañero de casa.
-¿Draco?
-Hola amor -dijo el rubio al ver aparecer a su pareja- ¿Vas a la biblioteca?
-Sí, tengo que preparar un trabajo -le respondió y notó a la otra persona -hola, Zabini.
-Lupin -saludó al muchacho-, bien, si van a la biblioteca, vamos entonces.
La pareja no notó, claramente, el desprecio en la cara del italiano.
…
…
-Esto me tiene nerviosa -dijo Chang al encontrarse todos reunidos en su “sala de reuniones”
-Será esta noche, nada puede fallar -dijo Roxanne, preparado su varita.
-Entonces -dijo Zabini -¿Cómo van las cosas?
-Bien, todo preparado -dijo Finnegan- ya le dije a Potter que el chico Lupin estaba en la enfermería, que había pedido hablar con él. Potter va en camino. Y Lupin cayó en la misma mentira.
-Entonces vamos -dijo la líder del grupo.
Entre las penumbras de la noche se movían, para no ser descubiertos. Los incautos se encontraban en la enfermería, se preguntaron entre ellos que es lo que pasaba, pero tarde se dieron cuenta de la trampa.
-Hola, hermanito -dijo la muchacha luego de que hubieran cerrado la puerta de la enfermería, quedando los seis adentro.
-¿Qué es lo que pretenden? -dijo Harry poniéndose frente a Dziban “Severus, ayuda”
-Lo que debió haber hecho mi madre, estúpido -dijo mandando el primer hechizo que imparto en ambos jóvenes.
Desde el suelo, adolorido, Harry sostuvo su vientre.
-Por favor, Roxanne, mi bebé…
-No ruegues, sucio mortífago -dijo Seamus, pero al ver que Lupin soltaba una moneda fue que lo descubrió y con rabia lo mando a volar lejos, haciendo que este chocara con una de las paredes-. El maldito envió un llamado de auxilio.
-Es hora de que ustedes dos mueran.
Harry sintió con horror el primer dolor de lo que parecía una contracción. Estaba a punto de perder a su bebé.
-Roxanne, es tu hermano, ayúdanos -le pidió-, aun estás a tiempo.
-A tiempo de que, Harry -dijo la oriental destilando odio- ya estamos perdidos, pero sabíamos que no nos iríamos con las manos vacías.
-Mi hijo no tiene la culpa -dijo presa del dolor.
-Tampoco mi madre y ahora está muerta -dijo Roxanne apuntándolo nuevamente.
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