Majo-san
Vencedor de Voldemort
       
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 | Tema: Nada que temer (Drabble)  Sáb Mayo 24, 2014 12:54 am | |
| Nada que temer
Severus daba vueltas de un lado para el otro, sin dejar de mirar al joven que estaba dormido en su cama. ¿Cómo fue que las cosas terminaron así? El cargo de conciencia le estaba consumiendo, era como si de un momento al otro, eso que llamaba arrepentimiento, se estuviera anidando en su cabeza. Era un chico, no pasaba de los diecisiete y él lo había tomado para sí mismo.
El chico había llegado a su habitación, se notaba agitado y ansioso, le dio la confesión más austera que hubiera escuchado en su vida y luego se le lanzó encima y lo había besado. De ahí a la situación en la que se encontraba, no quedaba mucho que decir. Había perdido la cabeza y había besado a Harry con desesperación, mientras lo llevaba aupado hasta el sillón de su despacho y le había arrancado la ropa entre besos y caricias.
Un quejido desde la cama le hizo mirar hacia atrás y se dio cuenta de que Harry abría los ojos.
Harry sabía que lo que había hecho estaba mal, pero ver tal dolor en la mirada del hombre que amaba le rompió el alma.
—Te arrepientes —le dijo mientras se acomodaba contra el cabecero de la cama.
—Eren un niño, y además mi alumno.
—Te amo.
—No sigas, por favor —le dijo, mientras apoyaba ambas manos sobre el tocador que había en la habitación, dándole la espalda a Harry.
—No pararé hasta que lo entiendas —le dijo poniéndose de pie, y acercándose al hombre, sin tomarse el tiempo de ponerse algo que cubriera su desnudes —. Anoche me hiciste el amor, Severus —le dijo abrazándolo por la espalda —. Sé que tanto para ti, como lo fue para mí, eso fue hacer el amor, no fue sólo sexo.
—Me aproveché de ti —le dijo sin quitarse las manos del chico de encima —. Fui un oportunista que sólo se aprovechó de tu entrega.
—Por qué de verdad me entregué —le dijo al tiempo en que le hacía voltearse. El hombre no era capaz de mirarlo a la cara —. Mírame, por favor —le dijo pone ido sus manos en sus mejillas — ¿Crees que me forzaste, de verdad?
—A tu edad…
—A mi edad soy lo suficientemente consciente de que te amo, que quiero pasar contigo mi vida y que no permitiré que los estándares de honor te hagan desaprovechar la oportunidad que nos estoy dando.
Severus nunca lo había escuchado hablar con tanta madures. Le gustaba eso. Este Harry que quería ser adulto y que quería permanecer a su lado. Lo acercó a su cuerpo y lo abrazó, acariciando su espalda y sus caderas desnudas, sintiendo como el chico se estremecía ante su toque.
—Tendremos muchos problemas.
—Los afrontaremos juntos.
—Muchos se opondrán.
—Nadie tiene derecho sobre mí, Severus, mis únicos parientes son los Dursley y a ellos no los pienso ver nunca más.
—Parece que ya decidiste por los dos.
—Sí —le dijo acercando al hombre por la nuca para poder besarlo con profundidad.
—Ay, Harry Potter. No tienes idea en lo que te estás metiendo.
—Pero tú sí, así que pongo mi vida en tus manos, Severus. Soy parte de ti, así que no tengo nada que temer.
Fin
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