Potter, ¿de quién es esta tarea?

Severus sintió cuando Harry colocó sus dedos en su mentón, el chico temblaba y no dejaba de mirarle a los labios y él no entendía qué era lo que pasaba. ¿Acaso usaba sus dedos para estar en guardia en caso de que se le acercara más?... ¿Acaso a ese mocoso insolente se le había pasado por la cabeza que quisiera hacerle algo?


Sus dedos en su cara sólo podían significar una cosa: un intento temeroso de alejarlo en caso necesario.

correcto

En ese momento el profesor saco su varita, hizo un movimiento con esta, haciendo que Harry levitara y lo dejo sentado en el escritorio, después se levanto para quedar frente al chico. Tomo su rostro entre sus manos y le dio un beso suave y dejando a Harry con ganas de más. Severus puso sus manos en las rodillas de este, para que las abriera y pudiera acomodarse entre estas y estar más cerca de el. Cuando lo hizo, Harry se sonrojo por la cercanía de su cuerpo



- ¿Estas seguro Harry?, porque sino lo estas no importa, yo puedo…

Puntos para Pescadora de Estigia, por Regreso a ti




Puntos para Majo-san, por Me he enamorado

pistas?

bien... me pillaste buscando otro pedasito.

Luciendo peor que nunca a la mañana siguiente, Snape caminó sosteniendo cuidadosamente el regalo que Harry le había dado para Navidad. Era un edición extremadamente inaudita del Tratado de Wladeslaw Renkewicz, Pociones en la Edad Moderna. Renkewicz había influenciado y enseñado a casi todos los Maestros de Pociones destacados de la actualidad, incluyendo al Maestro de Snape, el instructor Frederick Nutzen. El hombre apenas había podido respirar cuando había abierto el obsequio.

correto

Eso no es muy literal, mi señor, más bien es un “joderle” figurado, era mucho más literal lo que yo estaba haciendo antes de que me llamarais, de hecho, pensó Snape, pero esta vez, se guardó mucho de expresarlo en voz alta. Al Lord no se le podía corregir cuando se equivocaba, como habría hecho gustosamente de haberse tratado de Potter. Mmm, Potter, el chico estaba esperándole en la cama con las manos atadas. Menuda perita en dulce; exquisita y sabrosa para darle un buen bocado. Ñam.

Una oleada de calor recorrió el cuerpo del mortífago, y de pronto tuvo la urgencia de irse de allí lo antes posible. Pero entonces se dio cuenta de que su Amo todavía esperaba una respuesta por su parte.

bien

Puntos para Pescadora de Estigia, por Viciendo con... ¿el enemigo?




Puntos para Majo-san, por Light on the dark

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