Esta historia es de ultimo minuto, pero espero les guste, es una adaptación a la pelicula navideña "Mientras Dormias", como no se me ocurrio algun otro nombre le puse "Cuando estabas dormido" XD, espero les guste!!!!!!!!
Y... FELIZ NAVIDAD!!!!!!!!!!!!!!!!!
"Cuando estabas dormido"
Rayos de luz se vislumbran en el cielo, el Sol sale anunciando la mañana de un nuevo día, para muchas personas el amanecer es solo algo muy natural en la vida, pero para mi es diferente, son recuerdos de de platicas y promesas, la mayoría de las veces al ver la luz que anuncia la mañana recuerdo las hermosas platicas que tenia con Remus, nosotros siempre quisimos viajar por el mundo y conocer inmensidad de lugares exóticos y demás, cabe decir que nunca fuimos a ninguno pero eso no nos importaba, él siempre que podía me hablaba de mis padres, de cómo se conocieron y enamoraron, de lo maravillosa que fue su boda; tantas veces me contaba la historia de amor de ellos, que llegue tanto a pensar en como seria cuando yo llegara a amar a alguien, cuando le preguntaba como reconocería el estar enamorado, él solo me respondió:
- Lo sabrás cuando esa persona te de el regalo perfecto, solo alguien que te conoce en lo más profundo de tu ser podría regalarte lo que más añoras en el mundo.
Las palabras de Remus retumbaron en mi cabeza cuando lo vi por primera vez, aunque no precisamente me dio el regalo perfecto sino el dinero del peaje urbano(1), él siempre pasaba de las 7:01 a las 7:05am, verlo pasar en su Porsche Carrera GT plateado(2) era el momento más feliz que tenia en el día y siempre soñaba con volverlo a ver, él era mi hombre perfecto, casi como un ángel caído del cielo, con su largo cabello negro azulado sujeto en una coleta, con esa sonrisa encantadora y con esos ojos grises que brillaban con coquetería, todo él era simplemente maravilloso.
Solo había un “pequeño problema”, que él y yo nunca habíamos hablado, él solamente se limitaba a pagar el peaje sin siquiera dirigirme una mirada, pero se que algún día me armare de valor y le hablare.
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Otra vez Navidad - suspiro – montones de personas festejando con sus familias, mientras yo estoy aquí sentado en la caseta cobrando la tarifa del peaje en la solitaria calle del Tower Bridge Road(3), pero que le puedo hacer, mi jefe el señor Tom Ryddle me aviso ayer que Ron no va a poder sustituirme en la víspera de Navidad porque ya tiene compromiso con su familia: los Weasley y dado que yo soy el único sin familiar alguno...
Feliz Navidad – dice una voz seductora sacándome de mis pensamientos, tardo un momento en comprender que es el hombre de mis sueños el que me esta hablando, sus ojos grises por fin me miran directamente y yo me quedo sin habla, pero antes de siquiera decir algo me da el dinero y arranca el carro.
Idiota!!! - me reprendo mentalmente – esta era la oportunidad de hablarle y yo por andar en las nubes la perdí, soy un idiota!!!!
Yo también te deseo una Feliz Navidad – comienzo a decir a la nada – tienes un auto fabuloso, eres el hombre más increíblemente apuesto que he conocido en mi vida, te quieres casar conmigo? Te quiero!!!
Me golpeo la cabeza con las manos, en eso volteo a ver si el carro de mi amado sigue cerca de ahí, cual va siendo mi sorpresa al ver el carro cruzando por el Puente levadizo, más cuando apenas va a la mitad veo como un carro del otro lado avanza rápidamente y se le cruza impidiéndole el paso, en eso se bajan dos tipos del otro carro y con pistolas en las manos lo obligan a bajar del auto, uno entra en el Porsche mientras el otro forcejea con mi amado, en eso se oye un disparo que rompe el silencio y él cae al suelo herido, los ladrones huyen rápidamente del lugar llevándose el auto.
No puedo pensar simplemente corro como desquiciado hacia él, quiero llegar hasta él y saber que aun esta con vida, escucho a lo lejos la alarma de que el puente comenzara en unos segundos a levantarse, aun sabiendo que yo puedo caer junto con él al Río Támesis(4) no puedo dejarlo ahí, al intentar detenerme tropiezo y caigo violentamente al piso, siento dolor por todo mi cuerpo pero el saber que él podría morir me hace levantarme e ir en su ayuda, él esta pálido e inconciente, la sangra brota profundamente de su abdomen, me quito mi bufanda y con ella le hago un torniquete(5), siento como el puente bajo mis pies comienza a moverse y sabiendo que no tengo mucho tiempo antes de que se levante por completo, tomo su brazo derecho y lo paso por mis hombros, entonces sujetándolo suavemente de la cintura para intentar no abrir más la herida comienzo a alejarlo de ahí, justo a tiempo llego al inicio del puente, solo para ver como este ya se había alzado completamente y dejaba pasar a un barco.
Sin perder mucho tiempo llego a la caseta con mi amado y llamo presuroso a su jefe Kingsley, quien envió una ambulancia de inmediato al lugar, ahora solo me queda esperar, me siento en el piso junto a él y paso mis manos temblorosas por su divino cabello, mientras le ruego a Dios que lo salve, no tardo mucho la ambulancia en llegar y lo poniéndolo rápidamente en una camilla lo suben a la ambulancia, al verme los médicos también me piden que suba y yo inmediatamente obedezco, pero cuando uno de ellos intenta tocarme yo le replico enojado:
- A él es a quien tienen que atender, no a mi!!!
Ellos me ven como si me hubiera vuelto loco, pero deciden poner toda su atención en él, al llegar al hospital lo llevan velozmente a Urgencias, me quedo parado en la entrada del hospital observando como se lo llevan y solo puedo esperar que el daño sea menor y no haya perdido tanta sangre.
Me dirijo presuroso hacia la recepción e intento saber cual es su condición, más la recepcionista me negó a dar información sobre él o dejarme entrar a verlo, sentía unas tremendas ganas de ahorcar a la mujer, más sabiendo que eso no ayudaría a nada y que me podrían impedir entrar al lugar otra vez, fue entonces que las palabras que marcarían para siempre mi vida salieron sin pensarlo y dije con voz triste:
- Tendré que posponer la boda…
Al parecer una enfermera me escucho pues acercándose a mi me ofreció amablemente a la información que tanto la recepcionista me negaba.
Ella no se sorprendió de que yo no “recordara” su nombre, simplemente lo atribuyo a que estaba lo suficientemente preocupado por su salud que nada más me importaba.
- El señor Sirius Black se encuentra en la sala 03 de Operaciones – dijo simpáticamente la chica mientras lo guiaba a la sala de espera - Ahorita no puedes entrar pues lo están operando, pero no te preocupes, al parecer la bala no perforo órganos vitales, él vivirá – termino de decir con una sonrisa.
Yo solo pude soltar el aire que sin saber estaba reteniendo.
Muchas gracias por informarme – le dije con una sonrisa. Fue entonces que me di cuenta de que al fin había descubierto el nombre de mi príncipe – se llama Sirius Black – pensé enamorado.
Claro – respondió la castaña sacándome de mi ensueño – Por cierto me llamo Hermione Granger, cualquier cosa que necesites por favor avísame y yo veré que puedo hacer.
Mucho gusto Hermione, yo soy Harry Potter – le dije mientras estrechaba su mano – te avisare si algo se me ofrece. – al intentar pararme del asiento sentí como mi cuerpo dolorido me reclamaba la caída que había tenido en el puente – Disculpa… - le dije apenado a la chica que ya caminaba hacia la recepción – estoy algo lastimado, podrías traerme algo para el dolor?
Claro que si – dijo la castaña, mientras rápidamente buscaba un botiquín de primeros auxilios y me lo traía – Permíteme.
Hermione era realmente eficiente haciendo su trabajo, con un cuidado y dedicación sorprendente me desinfecto y curo las raspaduras de la cara, manos y rodillas que me había hecho al caer.
- No se como no te dolieron desde que te caíste – dijo algo sorprendida.
- Yo tampoco lo se – le respondí – lo único que pensaba en ese momento era en si él se encontraba vivo.
- A que te refieres? – me pregunto curiosa.
Cuando estaba a punto de responderle, llego un policía buscando al acompañante del Sr. Black para hacerle unas preguntas, inmediatamente le dije que era yo y comencé a relatarle todo lo ocurrido y como le había salvado la vida, obviamente omití el hecho de que no lo conocía, el policía y Hermione se quedaron muy sorprendidos al escuchar como había sucedido todo.
Lo que usted ha hecho a sido una acción muy noble Sr. Potter – dijo con alegría el hombre – ojala todos fueran como usted, así no habría tanta delincuencia.
El hombre apenas había salido del lugar cuando otra enfermera comenzó a hablarle al odio a Hermione, entonces ella rápidamente tomo mi mano y dijo:
- Ya salio de operación y van a trasladarlo al piso 3, vamos! – dijo emocionada.
Yo la seguí con el corazón latiéndome desesperado, el elevador se me hacia eterno y cuando se abrieron las puertas y llegue hasta su habitación con paredes de cristal, no pude evitar quedarme parado viéndolo respirar lentamente, su rostro aun divino estaba blanco como el papel pero según el Monitor sus signos vitales se encontraban bien.
- Háblale – me dijo la castaña, sobresaltándome de repente – aunque este dormido él puede escucharte – y me dejo a solas con él.
- Hola – dije tímidamente, aunque el hombre de mi vida se encontrara inconsciente sentía que la voz se me atoraba en la garganta al contemplarlo.
Afuera de la habitación Hermione observaba a la hermosa pareja, entonces se le acercaron un par de enfermeras preguntándole quien era, rápidamente Hermione les contó la maravillosa historia de Harry y Sirius, todas suspiraban al imaginar como seria si alguien te llegara a amar tan profundamente como para arriesgar su vida para salvarte.
- Lamento interrumpir – dijo un hombre de aspecto serio e uniforme impecable – soy el Dr. Bartemius Crouch y vengo a informarle del estado del Sr. Black...
Apenas el doctor pronuncio esas palabras cuando un enorme grupo de personas penetraron en la habitación.
- Como se encuentra? – grito una mujer de cabello castaño que luchaba con zafarse del policía del hospital.
- Déjela en paz a mi madre! – le grito una chica de cabello rosa chicle al policía.
- Él es de la familia y exigimos verlo! – declaro un hombre de cabello castaño claro.
Harry comenzó a alejarse de la cama, no tenia que ser un genio para saber que ese grupo de personas era la familia de su amado Sirius.
- Doctor que le ocurre? – pregunto angustiada una atractiva mujer rubia.
- El Sr. Black se encuentra en actual coma…
- Pero se recuperara cierto? – pregunto un hombre rubio de porte aristocrático.
- Y en plena víspera de Navidad – dijo un señor con una enorme barba blanca, que aparentaba tener unos 100 años de edad.
El tío Sirius tiene una suerte de perros – dijo desilusionado un joven rubio, que era casi el clon del hombre rubio.
- Draco no hables así de Sirius – le reprendió un hombre de cabello y barba castaño oscuro – No sabemos cuando despertara o si algún día lo hará.
- Lo hará – respondió inmediatamente el Dr. Crouch – el Sr. Black es un hombre joven y fuerte lo superara.
Todos parecían mucho más relajados después de escuchar las palabras del doctor.
- Pero como ocurrió? – pregunto una señora mayor de rasgos no muy finos y de asombrosos ojos negros.
- Unos tipos lo asaltaron – respondió instintivamente Harry, pero al ver como todas las miradas se posaron en él, sintió deseos de desaparecer, nunca le había gustado llamar la atención y tener trece pares de ojos observándolo atentamente lo inquietaba de sobremanera.
- Quien eres tú? – pregunto un apuesto hombre mayor, quien tenia un increíble parecido a su querido Sirius.
Pero antes de que si quiera pudiera responder una muy alegre Hermione dijo:
- Él es su prometido
- Qué?! – exclamaron al unísono los familiares de Sirius. – Él es su prometido?!
Harry no sabia donde meterse, mientras intentaba explicar el gran malentendido en el que la joven enfermera acababa de meterlo.
- Sirius iba a casarse? – pregunto una hermosa mujer de brillante cabello negro.
- Ya sabia yo que el tío Sirius era gay – dijo muy seguro Draco.
- Sirius no es gay, él es bisexual – declaro el hombre de cabello y barbas castaño oscuro.
- Por favor cálmense – decía el Dr. Crouch sin mucho éxito.
- Por que no me aviso que iba a casarse? – decía molesto el padre de Sirius.
- Estará enojado con nosotros? – pregunto el centenario hombre con gafas.
Las preguntas seguían y Harry no sabia que hacer para aclarar la confusión, en eso entra la enfermera de la recepción y enojada le replica al ojiverde:
- Qué hace usted aquí?! Le dije que no podía pasar a verlo sin ser su familiar!
- Disculpe que la contradiga Sra. Umbridge, pero él fue quien le salvo la vida – dijo una molesta Hermione.
- Tú le salvaste la vida? – pregunto asombrada la mujer mayor que sollozaba en los brazos del papá de Sirius, Harry suponía que era su madre pero dado que la señora no tenia rasgos muy agraciados y el parecido con su amado Sirius era nulo, no sabia que creer.
- Si, pero… - comenzó a decir el ojiverde, más el señor Black lo interrumpió:
- Pero no le habían disparado y dejado a la mitad del puente para que cayera?
- Si - respondió Hermione – pero él corrió hacia el puente en movimiento y arriesgándose a caer él también detuvo el sangrado del balazo y lo saco cargando de los brazos levadizos(6).
Todos se habían quedado boquiabiertos al saber como Harry a costa de su propia vida había salvado a Sirius.
- Aun así no pueden entrar las personas que no sean de la familia – respondió obstinadamente Umbridge.
- Él es de la familia – afirmo con voz grave el Sr. Black.
- Además es su prometido Umbridge, así que si me hace el favor de retirarse – dijo con tono irritado el Dr. Crouch.
Umbridge se fue de mala gana, mientras que las personas ahí presentes parecían mirar con ojos brillantes al ojiverde.
- Nosotros no sabíamos acerca de su compromiso, pero me alegro mucho de que por fin Sirius haya encontrado a una persona tan maravillosa como tú – dijo la señora para después arrojarse a sus brazos, Harry no supo como reaccionar y menos cuando los demás miembros de la familia lo rodearon en un abrazo colectivo.
- Que voy a hacer ahora?! – pensaba desesperado el ojiverde – Ellos creen que yo soy el prometido de Sirius!!! Tengo que decirles la verdad…- Más dentro de su pecho Harry no quería y no podía, se había sentido tan bien al pensar que era parte de una familia que simplemente se creía incapaz de decir la verdad.
En ese pensaba cuando sintió como alguien lo tomo del brazo, miro confundido así la persona que lo agarraba, solo para ver a la hermosa mujer de brillante cabello negro que lo miraba analíticamente.
- Como no nos conocemos – comenzó a decir – y dado la situación, creo que es correcto que nos presentemos correctamente, yo soy la prima de Sirius: Bellatrix Black Lestrange y él es mi esposo: Rodolphus – dijo la morena señalando al hombre de cabello y barba castaño oscuro – Ella es mi hermana: Narcisa Black Malfoy y su esposo Lucius e hijo Draco – dijo señalando a los únicos rubios que estaban en la habitación – Mi otra hermana: Andrómeda Black Tonks y su esposo Ted e hija Nymphadora – termino por señalar a la mujer y hombre de cabellos castaños claros y a la joven de cabello estrafalario.
- Que no me digan Nymphadora!!! – replico enojada la chica, más nadie pareció hacerle caso.
- Yo soy el padre de Sirius: Orión Black – dijo el apuesto hombre maduro – y ella es mi esposa: Eileen Snape-Black. – señalo a la mujer de ojos negros.
- Albus Dumbledore – dijo el hombre con gafas de media luna – soy el padrino de Sirius.
Cuando todos se hubieron presentado, Harry pudo ver que su querido Sirius tenía una familia tan grande como los Weasley.
- Bueno… y nos vas a decir como te llamas? – pregunto un curioso Rodolphus.
- Lo siento – se disculpo rápidamente el ojiverde – me llamo Harry Potter, es un placer conocerlos.
- Vamos no hay que ser tan formal, después de todo pronto serás parte de la familia – declaro una sonriente Andrómeda – Ahora dinos: como es que se conocieron?
- Pues… yo… - Harry no sabia que decir, pero antes de decir algo Eileen lo interrumpió:
- De a seguro fue amor a primera vista – declaro ensoñadoramente.
- Conociendo como es Sirius lo ha de haber seducido hasta tenerlo a sus pies – afirmo Bellatrix.
- De eso no cabe duda, Sirius es todo un Don Juan – corroboro Lucius.
- Y como te propuso matrimonio? – pregunto rápidamente Tonks.
- Yo…
- Se puso de rodillas? – quiso saber Draco.
- Y el anillo? – pregunto Narcisa.
- Por Dios! dejen hablar al muchacho – dijo algo molesto Orión, cuando todos se hubieron callado continuo – ahora si, por favor dinos como es que acabaste comprometido con mi hijo?
Harry suspiro, dado que el malentendido ya estaba hecho, no tenia de otra que seguir el juego.
- Pues nos conocimos en la caseta – comenzó a explicar algo nervioso – Él siempre pasa todas las mañanas por ahí, entonces cuando lo vi me enamore perdidamente de él, de su encantadora sonrisa y su mirada coqueta. – dijo soñadoramente Harry, produciendo suspiros románticos en el publico femenino que lo escuchaba.
- No cabe duda que se aman – dijo Tonks alegremente.
Harry no podía creer que con tan poca información ellos lo aceptaran como parte de la familia.
- Bueno, no nos hace ningún bien estar aquí, Sirius esta en coma y siendo víspera de Navidad deberíamos festejar que muy pronto habrá otro Black en la familia – declaro felizmente Eileen – Sirius no nos perdonaría que dejáramos abandonado a su prometido.
- Tienes razón cariño – afirmo Orión, y volteando a ver al ojiverde le pregunto – que te parece Harry, pasarías la víspera de Navidad con nosotros?
Harry sintió como sus ojos ardían de las lágrimas que luchaban por salir, como no confiaba en su voz solo atino en asentir efusivamente con la cabeza.
- Que bien! Así podrás conocer a Severus! – declaro sonriente Bella.
- Es verdad! Severus no pudo venir al hospital pero lo veremos hoy en la cena – dijo Narcisa.
- Quien es Severus? – pregunto tímidamente Harry.
- Severus es el hermano de Sirius – contesto a su pregunta Lucius.
- Descuida – dijo Ted - Severus puede llegar a ser una persona muy poco sociable y gruñona, pero cuando lo llegas a conocer bien es realmente una buena persona.
Harry no quedo muy tranquilo al escuchar la descripción del hermano de Sirius, solo esperaba que no fuera a darse cuenta de su gran mentira.
- Bueno tengo que irme – dijo el ojiverde.
- Te esperamos a las 8pm, aquí esta la dirección – dijo Orión dándole una tarjeta de la Empresa familiar.
Harry no pudo más que sorprenderse al ver que las personas que tenia frente a él eran los dueños de la empresa multimillonaria “Black&Malfoy”, así que todavía atónito se despidió de ellos y salio rumbo a su casa.
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- A sido un día agotador – dijo Harry al llegar a su pequeño departamento.
Apenas llego a la cama y se arrojo sobre ella cansado, mientras veía fijamente la tarjeta de la familia Black.
- Y ahora tengo que ir a cenar con mi “futura familia” – dijo con pesadumbre el ojiverde, más lo quisiera o no, por dentro estaba que bailaba de alegría por compartir la Navidad con tan encantadora familia.
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A las 8 en punto de la noche, Harry se encontraba ante la inmensa mansión de los Black, el ojiverde se sentía diminuto ante la inmensa diferencia de clases, pero cuando estaba a punto de darse la vuelta e irse, una voz lo detuvo:
- Harry! Que bien que hayas venido – dijo un alegre Albus – Entremos juntos – al ver la cara de aprehensión del chico agrego - no te preocupes, aunque la casa sea enorme ya he venido antes, no nos perderemos.
Y tal como había dicho Albus, no tardaron más de 5 minutos en llegar a la entrada principal.
- Harry! – chillo de emoción Eileen, mientras lo abrazaba – que bien que hayas venido! Y Albus me alegra que lo acompañaras, no sabíamos si Harry podría encontrar la entrada, estábamos apunto de enviar a Severus por él.
- Severus ya esta aquí? – pregunto sorprendido Albus – Él nunca llega temprano a las fiestas familiares.
- Si lo se, yo también me sorprendí al verlo llegar – afirmo la señora Black – pero Lucius le llamo en la tarde para avisarle del prometido de Sirius y al parecer se muere de ganas por conocerlo.
Harry comenzó a transpirar al escuchar eso, al parecer tendría que enfrentarse con el hermano de Sirius antes de tiempo.
- Pero pasen! – exclamo Eileen – Hace un frío tremendo, no queremos que se enfermen.
La casa por dentro era de un estilo fino y elegante, pero no por eso menos cómoda y hogareña.
- Buenas noches – saludo Harry, inmediatamente todos se abalanzaron sobre él para saludarlo, parecía como si no lo hubieran visto en años y no solo hacia 5 horas, más eso no lo molestaba, le gustaba sentirse amado.
De repente Harry comenzó a sentir que lo observaban, fue entonces que se percato del misterioso hombre que lo miraba desde la esquina de la habitación, sin saber porque Harry sintió unas extrañas mariposas en el estomago cuando el hombre se acerco lentamente hacia él, desde que sus miradas se cruzaron el ojiverde no fue capaz de desviar la mirada de aquellos increíbles ojos negros.
- Severus Snape-Black – dijo el imponente hombre con una voz grave que le erizo la piel al chico. Harry parecía hipnotizado por aquellos ojos que lo miraban fijamente, por lo que no respondió al saludo, después de algunos minutos mirándose en silencio, la familia Black comenzó a incomodarse, por lo que Bella decidió romper el hielo.
- Bueno Severus creo que ya asustaste al chico lo suficiente no? – dijo Bella bromeando, mientras los demás reían.
Harry regreso de repente a la tierra y al verse en semejante situación se ruborizo furiosamente, no podía creer que se había quedado como un tonto mirando al hermano de Sirius y enfrente de toda la familia!!!!
- Bueno es hora de cenar – dijo Orión e insistió a que todos tomaran asiento, para desgracia de Harry, Severus tomo el asiento que se encontraba justo frente a él.
Durante la cena Harry apenas si pudo probar bocado, la insistente mirada de Severus sobre él lo ponía enormemente nervioso, cuando la cena termino el chico se levanto rápidamente de la mesa y dijo:
- Gracias por la comida, pero ya casi son las 10pm y esta por salir el ultimo autobús de la estación…
- No te preocupes querido – dijo Eileen – puedes quedarte a dormir aquí y mañana temprano te vas.
- Yo no quiero incomodar – se excuso el ojiverde – Además tengo que trabajar temprano…
- No hay problema en eso tampoco – dijo Orión – Lucius ó Severus pueden llevarte, ellos mañana tienen el día libre.
Las posibilidades de irse lo más rápido posible de la mansión habían desparecido completamente, no había excusa alguna que impidiera no quedarse a pasar la noche en la casa, sin que la familia se diera cuenta de su incomodidad, no le quedo de otra que volver a sentarse en la silla.
- Nos alegra que aceptes quedarte – dijo cariñosamente Narcisa, Harry solo atino por sonreír
- Bueno ya que la comida se acabo, vamos a bailar!!!! – dijo una muy animada Andrómeda, que inmediatamente jalo del brazo a su marido.
- Ahora es donde empieza lo bueno! – declaro Tonks riéndose al ver a sus padres buscando que música poner para bailar.
- Es cierto, lo mejor es cuando ellos bailan y nosotros ponemos tomar las bebidas que queramos – dijo alegremente Draco, Harry rió al ver las caras ilusionadas de Tonks y el rubio. . - Vamos! – dijo tonks mientras jalaba a Harry a bailar.
Aunque el ojiverde no era un excelente bailarín, tampoco lo hacia tan mal y teniendo de compañera a la alocada chica hacia mucho más fácil el baile.
Las mujeres reñían por bailar con él, él era la sensación del momento y era obvio que todas quisieran conocerlo más, después de bailar tres veces con cada una, Harry les pidió a sus parejas de baile que lo dejaran tomar aire, ellas aceptaron solo con la condición de que bailaría por lo menos un baile más con ellas, no le quedo de otra que aceptar.
- Por fin! – pensó exhausto el ojiverde – me duelen los pies.
- Vaya que eres popular con las damas – dijo Albus mientras le guiñaba un ojo, Harry se sonrojo ante la insinuación, más eso solo hizo reír más al viejo hombre.
En ese momento volvió a sentir la sensación de ser observado y miro como Severus no le quitaba la vista de encima, Harry desvió su mirada instintivamente.
- Necesito ir al baño – le dijo a Albus y sin darle tiempo a decir algo salio del salón.
Harry camino por inercia mientras pensaba porque rayos se sentía tan nervioso cuando ese hombre lo miraba de esa forma, como queriendo ver dentro de su alma.
Al cabo de unos minutos fue que se dio cuenta que no sabia donde estaba el baño y al parecer se hallaba perdido – Lo que me faltaba – pensó el ojiverde – Estoy perdido en una casa ajena que es tan grande como un edificio.
Harry intento regresar sobre sus pasos, pero al parecer los pasillos eran como un laberinto, sin tantas esperanzas de volver al salón Harry se dispuso a echar un vistazo a la casa, realmente era hermosa.
En eso se escucho el sonido de las manecillas del reloj que marcaban la medianoche, fue entonces que el ojiverde vio un amplio palco y decidió salir a ver la luz de la luna. No supo cuanto tiempo paso observando el cielo nocturno, hasta que el silencio de la noche se rompió cuando una voz grave a sus espaldas habló:
- Con que aquí estabas.
Harry respingo del susto al escuchar la voz de la persona que menos quería ver y tan cerca de él, más no le quedo de otra que dar la cara al hombre.
No sabia si era por la luz de la luna que iluminaba los asombrosos ojos negros de Severus pero Harry no podía evitar sentirse atraído aun más por ellos, sin saber muy bien lo que hacia el ojiverde comenzó a acercarse a Severus y cuando estuvo justo frente a él, el ojinegro dijo:
- Tú no eres el prometido de Sirius.
Esa simple frase lo trajo de vuelta al mundo de golpe y retrocedió instintivamente.
- Qué.. qué dijiste? – contesto asustado Harry. - Me oíste bien, yo se que tu no eres el prometido de mi hermano – dijo seguro Severus mientras avanzaba hacia él – a Sirius no le gustan los tipos como tú.
Harry sintió su pecho oprimirse al escuchar esas palabras, la voz se había quedado atascada en la garganta y sentía sus ojos humedecerse por las lágrimas, al parecer Severus se dio cuenta pues dijo con aborrecimiento:
- Se muy bien que solo eres otro pobretón queriendo quedarse con la fortuna Black y créeme cuando te digo que yo no voy a permitirlo.
Harry no pudo más y las lágrimas rodaron por sus frías mejillas.
- Vaya… eres un increíble actor sabes? – dijo con desprecio el ojinegro – pero aunque todos hayan caído en la mentira yo no lo haré… tal vez hasta fuiste tú quien asalto y le disparo a mi hermano.
Esas fueron las palabras que desataron la ira de Harry, Severus se quedo congelado cuando el puño del chico se estampo en su cara y lo hizo tambalearse, no había esperado esa reacción en el ojiverde, él creía que el chico no soportaría la presión y se iría, más no que lo golpearía.
Severus se irguió cuan alto era dispuesto a poner en su lugar a ese maldito atrevido, más al ver la mirada color esmeralda llena de odio y una tristeza profundas se detuvo.
- Yo nunca me atrevería a hacer tal cosa!!! – grito furioso Harry – No te atrevas a decir algo así de nuevo!!!
La sinceridad en las palabras del chico calo muy fondo en Severus, - es que acaso era realmente el prometido de Sirius? – pensó desconcertado el ojinegro, que comenzó a sentirse extraño al ver como habían afectado sus palabras a Harry e inesperadamente quiso consolarlo, pero antes de que hiciera algo el ojiverde salio corriendo.
Harry no sabia como pero después de unos minutos corriendo por la casa había dado con la puerta principal, se dirigió presuroso a la salida más tropezó con alguien en la puerta.
- Ah! Harry donde has estado? – pregunto alegre Albus, más al ver el estado en que se encontraba pregunto preocupado – Que te ha pasado? Estas bien?
El chico no le respondió y salio corriendo de la mansión. No podía creer que la hermosa noche que había tenido acababa de convertirse en la peor de toda su vida, pero tal vez se lo tenía muy bien merecido por intentar ser parte de una familia.
Harry corrió hasta que le falto el aliento y se detuvo en un pequeño parque para descansar, miro su reloj de bolsillo, eran las 1:30am, no sabia que rayos iba a hacer ahora, su departamento aun quedaba muy lejos de ahí y a esa hora ya no pasaban autobuses.
- Te encontré! – dijo una contenta voz, Harry se pregunto como diablos ese hombre lo había encontrado y porque lo había seguido, que acaso no quería que desapareciera?
Última edición por VeroSev el Lun Nov 21, 2011 6:42 pm, editado 4 veces
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VeroSev Explota calderos
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Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Sáb Dic 26, 2009 12:32 am
- Déjame solo – dijo Harry mientras caminaba en dirección opuesta al hombre.
- Espera! – grito Severus mientras corría a alcanzarlo, cuando estuvo a su alcance lo jalo del brazo para que el ojiverde lo mirara, más este comenzó a forcejear.
- Suéltame! – grito furioso Harry – que acaso necesitas humillarme más para estar satisfecho?
- No, yo solo… - dijo apenado el ojinegro, más el chico no lo dejo continuar.
- Ya no voy a soportar más tus insultos, así que déjame en paz! – dijo con Harry mientras nuevas lagrimas brotaban de sus ojos – y no te preocupes respecto a Sirius, apenas despierte romperé con él!
- No! – grito Severus y comenzó a decir desesperado – Si rompes con él por mi culpa mi familia nunca me lo perdonaría… yo no me lo perdonaría, por favor solo escúchame.
Harry a pesar de estar colérico al escuchar el tono de voz de Severus se calmo y dejo de forcejear, observo como el otro se relajo al ver que ya no opondría resistencia.
- Esta bien, habla – dijo serio el ojiverde.
- Bueno… primero que nada quisiera pedirte disculpas por como te he tratado desde que nos conocimos – dijo Severus mientras se pasaba una mano por su cabello largo – Me es difícil expresarme con la gente y créeme cuando digo que NUNCA en mi vida me he disculpado antes.
El ojiverde vio como le costaba trabajo al otro decir esas palabras y cuando dijo que él era la primera persona con que se disculpaba, Harry se sintió extrañamente feliz.
- Acepto tus disculpas – dijo ya más tranquilo el ojiverde – pero sigo sin entender porque es que me trataste tan mal, yo nunca te falte al respeto o fui grosero contigo.
- Sobre eso… yo soy una persona desconfiada por naturaleza y dado que anteriormente Sirius ha tenido a chicas que solo le quieren quitar su dinero pues… yo creí erróneamente que tú eres uno más – termino de decir apenado Severus.
- Te entiendo, solo estabas cuidando de tu hermano, Sirius tiene suerte de tener a alguien que se preocupe de esa forma por él – dijo Harry.
Severus se sonrojo por el cumplido tan sincero del chico.
- Entonces… empezamos de nuevo? – pregunto un dudoso ojinegro, mientras le extendía la mano a Harry.
El ojiverde observo la mano del hombre, después de un momento la estrecho con la suya, a la vez que decía con tono divertido:
- Mucho gusto, soy Harry Potter.
Severus sonrió y respondió igualmente divertido:
- Severus Snape-Black, el gusto es mío Harry.
Los dos se miraron por unos instantes antes de romper a carcajadas.
- Bueno creo que deberíamos regresar – dijo el ojinegro – a menos que quieras irte a tu casa.
El ojiverde sopeso las ideas y la verdad ya que había arreglado las diferencias con Severus, no había razón alguna para negarse.
- Regresemos – le dijo sonriendo, el ojinegro se quedo embobado viendo la genuina sonrisa del chico.
Los dos comenzaron a caminar camino a la mansión Black, Severus le contó a Harry que Albus lo había interrogado y regañado gravemente por haberlo echo llorar y que remediara las cosas con él inmediatamente, al parecer el ojinegro era un buen atleta pues corrió buscando por todas partes al chico hasta que lo halló en el parque.
Severus por primera vez se sintió cómodo hablando con alguien ajeno a su familia y en el transcurso del camino le contó a Harry como fue que él y su mamá acabaron siendo parte de los Black, el ojiverde se sorprendió un poco al saber que Severus era hijo de un tal Tobías Snape, un hombre borracho que lo golpeaba a él y a su madre, hasta el día en que el señor murió de congestión alcohólica y por fin pudieron ser libres, su mamá siendo una enfermera había atendido el parto prematuro de la primera señora Black, más la señora no resistió el parto y murió junto con su hijo nonato, fue ahí donde conoció a Orión Black, que aunque no quería mucho a su esposa, pues el matrimonio había sido arreglado, estaba destrozado por la muerte de su segundo hijo, a penas se conocieron fue amor a primera vista, Orión invitaba a salir cada que podía a Eileen y a Severus, que tenia apenas unos 8 años de edad, fue ahí donde conoció al primer hijo del señor Black: Sirius, el ojinegro siempre tan reservado no conversaba mucho con el pequeño Black, pero con los años los dos se fueron haciendo inseparables, Severus intimidaba a todos aquellos que por envidia y celos querían lastimar a Sirius y el ojigris defendía al ojinegro cuando la gente lo insultaba por ser tan anti-social. Así que cuando Severus cumplió los 12 años su mamá y el señor Black anunciaron su compromiso y futura boda, desde ese momento los anteriormente Snape pasaron a formar parte de la prestigiosa familia Black.
- Que hermosa historia!!!! – dijo Harry – me da gusto por ti y tu mamá que después de tanto sufrimiento puedan hoy en día ser felices.
- Bueno yo ya te conté de mi – dijo un poco avergonzado Severus – ahora háblame de ti.
- Pues yo… - comenzó a decir vacilando el ojiverde, más respiro hondo y se armo de valor – yo soy huérfano, mis padres murieron en un accidente de autobús cuando yo apenas tenia un año de nacido, nunca los conocí, los de trabajo social decidieron enviarme a vivir con mi tía Materna, la única familiar que yo tenia, pero ella y su familia nunca me quisieron, siempre me hacían a un lado y me ignoraban, viví con ellos hasta la edad de 6 años, que fue cuando Remus que era el mejor amigo de mis padres logro ganar mi custodia, él se convirtió como en un padre para mi, me crió y me dio el amor y cariño que todo niño necesita, pero no todo fue felicidad, Remus de la nada cayo enfermo de gravedad, yo tuve que salirme de la escuela para poder trabajar y ayudarlo en los gastos médicos, claro que Remus no quería que dejara la escuela pero yo insistí, a pesar de todos los esfuerzos y sacrificios que hicimos nada funciono... hace dos años que Remus murió y desde entonces he estado solo.
Cuando Severus termino de escuchar la vida de Harry, se sintió familiarizado con él, los dos habían tenido infancias dolorosas, más él había tenido una segunda oportunidad cuando conoció a los Black, en cambio Harry solo había tenido a una sola persona en quien confiar, persona que ahora estaba muerta.
- Lo siento – fue lo único que pudo decir el ojinegro.
Harry lo miro desconcertado, entonces entendió que Severus se había sentido mal por preguntarle de su vida y hacerle recordar aquellos dolorosos momentos.
- No es tu culpa – dijo el ojiverde – Tú no provocaste la muerte de Remus, ni tuviste nada que ver con la muerte de mis padres.
Severus iba a decir algo cuando un grito se escucho a lo lejos.
- Ya llegaron!!!!
Sin saber que pasaba los dos se vieron rodeados.
- Que rayos le hiciste?! – fue la primera pregunta que una muy enfadada Bellatrix le hizo al ojinegro.
- Por favor perdona a mi hijo – le dijo una preocupada Eileen a Harry.
Los gritos disgustados y disculpas sin cesar les llegaban a los dos que no sabían que decir ni hacer, pero Harry decidió intervenir cuando Rodolphus comenzó a zarandear disgustado a Severus.
- Esperen! – grito el chico, logrando que todos le pusieran atención – no paso nada, todo fue un malentendido… Severus y yo ya hemos hecho las paces, no hay nada porque preocuparse.
Todos se mostraron algo recelosos al principio, pero confiaron en las palabras del futuro esposo de Sirius.
- Bueno… ya que todo esta arreglado entremos a casa, afuera esta helando – dijo Orión – Además nos falta abrir los regalos.
Ya todos más contentos entraron a la sala donde al lado de la chimenea estaba un hermoso árbol con los respectivos regalos.
- Yo los reparto!!! – grito emocionada Tonks.
Harry se sorprendió mucho al ver que también él había recibido un regalo, abrazo la caja con emoción contenida, Severus observaba todas las reacciones del ojiverde y no pudo evitar sonreír ante la pureza del chico, más al recordar que ese hermoso y fascinante joven seria muy pronto su cuñado, hizo que la sonrisa se le borrara tan rápido como apareció.
- Harry cariño – dijo un abochornado Orión – perdona la anterior actitud de mi hijo, por su culpa no has dormido nada y en unas horas tienes que ir a trabajar…
- No se preocupe, le avisare a mi jefe que llegare un poco tarde, él entenderá – dijo el chico quitándole la preocupación a la señora Black.
- Hora de dormir entonces – dijo más alegre el señor Black – aunque sean unas pocas horas son mejor que nada.
Todos comenzaron a ir hacia las escaleras para subir a sus respectivas habitaciones, más Harry no sabia donde iba a dormir y por lo tanto fue el único que se quedo parado en medio de la sala sin saber que hacer.
- Que pasa? – le pregunto Severus deteniéndose.
- Es que no se donde voy a pasar la noche – dijo ruborizado el ojiverde.
- Es cierto! No te dijimos donde estaría tu habitación, pero que mente la mía! – dijo Eileen.
- Si quieres yo te enseño tu habitación – le dijo Severus con un tono de voz anhelante que erizo toda la piel del ojiverde.
- Cla… claro – respondió muy nervioso el chico, al ver como el ojinegro se acercaba a él y lo tomaba de la mano.
Más apenas los dos iban a dar un paso cuando un chillido agudo los detuvo.
- Están bajo el muérdago!!!!!! – grito emocionado Draco, que casi daba saltos del gusto.
Severus y Harry se quedaron paralizados para después mirarse con terror, cuando sus miradas se cruzaron los dos se soltaron las manos como si el simple contacto les quemara la piel.
- Tienen que besarse! – dijo Andrómeda feliz de poner en apuros a los dos hombres – es la tradición.
Harry sentía su rostro enrojecer a limites insospechados, estaba totalmente seguro de que su rostro estaría del color del cabello de su amigo Ron, más no se atrevía a hacer nada pues sabia que si besaba al hombre que estaba a su lado, nacerían sentimientos que no estaría muy seguro de comprender.
Severus pasaba por algo similar, nada más que él en vez de enrojecer se puso tan pálido como del color del papel, no quería cruzar la delgada línea que separaban sus deseos de sus sentimientos, porque aunque lo quisiera negar él en solo una noche había logrado enamorarse del prometido de su hermano, desde que lo vio entrar en el salón con sus hermosos ojos verde esmeralda brillando de felicidad y alegría le había robado el corazón, pero la sospecha y desconfianza lo hizo tratarlo de una manera tan cruel que termino con el chico golpeándolo y huyendo de él.
- Vamos no tenemos toda la noche! – dijo Tonks, sacando de su trance a los dos.
El ojinegro se dio cuenta del estado de aturdimiento del chico, por lo que decidió actuar primero, concluyendo que tal vez esta sería la primera y única que vez que podría besar al chico…
Harry se sintió desmayar cuando Severus lo tomo por los hombros, decidiendo que no besarlo seria inevitable lo miro directo a los ojos y pudo ver que en los pozos oscuros deseo y una tristeza profunda.
El ojinegro beso suavemente al chico, un simple roce de labios, que emitió la cantidad de emociones que sentía.
Todos aplaudieron sin saber que desde ese momento dos corazones habían sido flechados para toda la vida.
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Pasaron los días y ni Severus ni Harry se atrevían a estar los dos juntos y solos en un mismo lugar, no sabían de lo que sus propios sentimientos serian capaces de “obligarlos” a hacer.
Todo siguió así hasta que a la semana del accidente de Sirius este despertó, cabe decir que el ojigris no reconocía a Harry, más todos dijeron que podía ser una amnesia temporal, Sirius seguía sin creer del todo que él siendo un mujeriego y Don Juan empedernido fuera a comprometerse en matrimonio, más al conocer a Harry vio a un muchacho amable y de corazón noble que le había salvado la vida, por lo que decidió casarse cuanto antes con él.
Severus se sintió morir cuando Sirius le dijo que se casaría al otro día en la pequeña capilla del hospital y decidió ir a ver a Harry.
- Que haces aquí? – dijo sorprendido el ojiverde.
- Yo… vengo a darte mis muy sinceras felicitaciones y decirte que Sirius es el hombre más afortunado del mundo – dijo el ojinegro sintiendo como su corazón se rompía al saber que el amor de su vida se casaría al día siguiente y con su hermano, decidido a no sufrir más dio media vuelta, pero el chico lo detuvo.
- Severus – dijo Harry suplicando mientras agarraba del brazo al hombre – dame una sola razón para no casarme con tu hermano.
A lo que Severus solo atino a responder antes de irse:
- No tengo ninguna razón.
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Al otro día toda la familia Black se encontraba en la capilla esperando impacientes a que él joven novio llegara.
Harry entro al lugar sintiendo que en vez de boda lo que presenciaría seria un velorio, dejo que el padre hablara más cuando pidió a todos los presentes que hablara o callaran para siempre no pudo soportarlo más y habló.
Les contó a todos la verdadera realidad y que al final de todos se había enamorado perdidamente de Severus, todos se abalanzaron sobre el ojinegro en busca de respuestas, por lo que Harry aprovecho para retirarse del lugar.
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Habían transcurrido tres días desde el desdichado evento y Harry se sentía morir, más había decidido cumplir su sueño y el de Remus: que era el viajar por todo el Mar Mediterráneo(7).
Por lo que ese seria el ultimo día de trabajo que tendría ahí, estaba atendiendo a los clientes como siempre, recibía las 5 libras correspondientes y él los dejaba pasar, más a eso del medio día un carro Aston Martin AMV10 Concept( se detuvo en su caseta.
Harry miro al conductor al ver que este no le daba el dinero y cual fue su sorpresa al ver que era Severus quien con una hermosa sonrisa y con un anillo en la mano, el ojinegro bajo de su auto y cuando estuvo frente al chico lo tomo de la mano, mientras le decia mirándolo fijamente a los ojos:
- Harry Potter quieres casarte conmigo?
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Desde ese entonces han pasado ya cuatro años, en los que Severus y yo hemos viajado por el mundo, cuando todos nos reunimos aun hay veces en las que Sirius me pregunta cuando fue que yo me enamore de Severus, a lo que yo solo puedo responder "Fue cuando estabas dormido".
FIN
Última edición por VeroSev el Lun Nov 21, 2011 6:36 pm, editado 1 vez
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Aryam_Tsepesh
Cantidad de envíos : 45 Fecha de nacimiento : 08/08/1990 Edad : 34 Galeones Snarry : 15040 Fecha de inscripción : 30/09/2011
Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Lun Nov 21, 2011 2:42 am
Muy lindo el fick...que Sev tan lindo protector, temeroso y romántico.... mira que te lleguen con anillo a tu trabajo frente a los que te conocen y desconocidos que a de ser hermoso!!!
VeroSev Explota calderos
Cantidad de envíos : 82 Fecha de nacimiento : 02/04/1990 Edad : 34 Galeones Snarry : 17399 Fecha de inscripción : 15/02/2009
Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Lun Nov 21, 2011 7:36 pm
Me alegra mucho ke te gustara XD!!!!!! Este fic lo escribi en dos días así ke no sabía ke tan bien iba a kedar jejeje, gracias por leer y comentar XD!!!!!!!!
Arainvamp Prince
Cantidad de envíos : 31 Fecha de nacimiento : 10/08/1995 Edad : 29 Galeones Snarry : 11000 Fecha de inscripción : 17/12/2014
Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Lun Ene 12, 2015 10:49 am
Creo que tus fics tienden a ir por el romance. HAHAHAAHA, me pareció gracioso todo ese lío de la boda con Sirius pero Severus fue tan romántico que todo se le perdona.
yatta Duelista
Cantidad de envíos : 646 Fecha de nacimiento : 29/03/1984 Edad : 40 Localización : mexico Galeones Snarry : 119250 Fecha de inscripción : 12/07/2010
Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Jue Ene 15, 2015 6:59 pm
siento como que pusiste mas de lo que Harry sentia por Sirius y no dejo mucho para sev y harry T-T un capitulo mas hubiese estado genial! o mas largo jajaja XD!! aun asi esta estupendo!
Yuki Fer As de oclumancia
Cantidad de envíos : 1504 Fecha de nacimiento : 07/04/1992 Edad : 32 Galeones Snarry : 108296 Fecha de inscripción : 30/07/2011
Tema: Re: Cuando estabas dormido. (one shot) Jue Mar 24, 2016 8:51 pm
Ya me había leído la historia en slash pero no importa volver a leer la... Me encantó