Seth Snape
Aprendiz de vuelo
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 | Tema: Un vistazo al espejo. Capitulo 1. Un encuentro muy casual y cosas desagradables  Miér Jun 23, 2010 5:55 pm | |
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Titulo. Un vistazo al espejo. Respuesta al reto "La belleza de ser Slytherin" por Seth Snape
Autor: Seth Snape-Malfoy
Beteado: Dulce_Snape
Disclaimer: Los personajes son de Rowling y la idea de la historia mía, una disculpa si se llegara a parecer con la de alguien mas; que por mi bien espero que eso no pase.
Bueno ya se sabe que es yaoi, a si que creo es todo; las advertencias se publicaran al principio de cada capitulo.
Resumen:
Por que al mirarte aun espejo te vez a ti mismo y al mismo tiempo es un ser desconocido; esa persona eres realmente tu? o solo algo parecido a ti. Que te define y te hace pensar que eres como eres o que eres dueño de tu existencia. Eres Real? O eres parte del sueño de alguien mas.
Harry descubre lo que es ser una serpiente.
Capitulo 1. Un encuentro muy casual y cosas desagradables
Una mañana, Harry Potter decide mirarse al espejo; ha recibido una carta muy importante… hoy descubre que él es un mago y no uno cualquiera, sino uno especialmente bueno: él será el salvador del mundo.
— ¡Maldición!…otra vez esa mancha en mi espejo. —Con la manga de su playera trata de borrar un pequeño manchón que siempre aparece en el mismo lugar, a la misma hora, todos los días; ya estaba harto de esa cosa.
Un resplandor; Harry no abre los ojos.
Una mañana, Harry Potter decide mirarse al espejo; ha recibido una carta muy importante: hoy descubre que él es un mago y no uno cualquiera, sino uno especialmente bueno: él será el salvador del mundo.
Se mira al espejo; se acomoda el cabello para que quede perfectamente arreglado; trae el uniforme puesto.
—Me interesa un comino si me ven raro; igual hay muggles que visten extraño. —Toma sus cosas y se dirige al tren que lo llevará a una nueva vida.
No se despide de nadie; no se lo merecen; si no se preocuparon por él cuando era como ellos, ¿por qué habrían de hacerlo ahora que era diferente?
[Plataforma 9 y ¾]
— ¡Maldición, maldición y más maldición! ¿Cómo demonios llego a ese lugar?
Harry mira entre la gente buscando alguna persona diferente, como él; pero no logra ver más que a las mismas personas apresuradas que tratan de subir a sus trenes.
— ¿Estás perdido? —Un susurro tan profundo le hace estremecer y un cálido aroma nubla sus sentidos. Se gira.
Si con escuchar su voz pudo jurar que se desmayaría, ver a ese hombre que estaba frente a él, era de muerte: era todo un bombón de pulcra apariencia, pelo negro y largo, ojos del mismo color, blanco de piel y de ropas oscuras, playera de manga larga y cuello alto, pantalón ajustado de la cadera y un poco más amplio de abajo, botas tipo militar y una gabardina negra que rozaba el suelo.
—Perfecto. —Susurró para sí mismo con lujuria en su voz.
— ¿Cómo? —Que curiosa forma de levantar la ceja, pensó Harry.
—Sí…es que… estoy perdido… yo estoy buscando una plataforma, pero… le preguntaré a un encargado, muchas gracias. —Para terminar, le dedica una bella sonrisa pensando que seguramente con eso lo dejaría en paz.
El hombre lo mira y se ríe.
— ¿Por qué se ríe? No debería reaccionar así; además, ¿por qué no me quita el ojo de encima? —Creo que será más difícil de lo que pensé… aunque, si lo analizo bien, no me desagrada del todo… podría divertirme un rato…
—Si buscas la plataforma 9 y ¾ yo puedo ayudarte; es raro ver a un estudiante con su uniforme en plena estación, pero supongo tendrás tu razones. Estudiante de primer año en Hogwarts, ¿cierto? —Lo mira de arriba abajo.
—Sí.
—Entonces, vamos. ¿Ves esa columna? Sólo tienes que correr hacia ella, un poquito más cargado a la derecha y ya. —El hombre de negro le sonríe muy gentilmente.
— ¿Por quién me toma? Seguro quiere que me estrelle con la pared para luego burlarse de mí.
—Veo que eres muy nuevo y desconfías; nunca has estado en el mundo mágico, ¿cierto?
—No.
—Entonces iré yo primero. —Se inclina un poco y de un movimiento rápido se ve ondular su gabardina.
— ¡Vaya, era cierto! —Susurra a una columna solitaria.
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—Hasta ahora, todo ha sido fácil, nadie me ha molestado y tengo un espacio para mí solo.
[Toc, toc] (Efecto barato de radionovela XD)
—Pensé demasiado rápido —suspiró con pesadez.
—Hola, ¿me puedo sentar? Todos los demás lugares están ocupados.
—Adelante. —El hombre toma asiento en el lugar frente a Harry.
—Nunca te pregunte tu nombre… ¿eres…? —Le extiende la mano.
—Potter, Harry Potter… y tú eres….?.
Entonces, el rumor era correcto; el famoso Harry Potter estudiará en Hogwarts.
Le sonríe.
—Soy el Profesor Severus Snape, y, si tengo suerte, seré tu profesor de pociones. También soy el Jefe en casa de. . . —El tren se detiene abruptamente y unos cuantos alumnos empiezan a bajar de los vagones. —Bueno, ya hablaremos después; hasta pronto Harry.
—Profesor.
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—Todos los alumnos de primer año por aquí, ¡rápido! Soy el profesor Snape; los iré nombrando e irán pasando a sentarse en el banco; les colocaremos el sobrero seleccionador que elegirá su casa por los próximos 7años; ¿alguna duda? Entonces adelante.
—Malfoy. —Le ponen el sombrero… ¡Slytherin!
—Weasley.
—Ese pelirrojo me parece bastante lindo, sería muy divertido estar en la misma casa. —Pensó Harry, emitiendo una sonrisita malvada…—¡Gryffindor!
—Chang…¡Ravenclaw!
—Potter. —Se hace el silencio. Le ponen el sombrero.
—Vaya, otro Potter…mmm ¿dónde te pondremos? — En Slytherin no, en Slytherin no, imploraba Harry.
—Slytherin no, eh?... Harías grandes cosas. —Slytherin no, Slyt. . . –
— ¡Slytherin!
¡Estúpido sombrero de mierda! —El muchacho de los ojos verdes baja refunfuñando; se sienta junto a un muchacho rubio con cabellos alborotados que lo abraza efusivamente.
—Bien, Potter, bien; —Le sonríen.
— ¡Joder! ¿Por qué todo el mundo me sonríe? Pareciera que fuera lo único que saben hacer… ufff si tengo algo de suerte, ese sexy profesor será mi jefe de casa.
Un joven que se encuentra sentado en medio de la mesa principal, que, me imagino, será la mesa de profesores, se levanta.
—¡Bienvenidos alumnos a un nuevo año en Hogwarts! Soy el director, Tom Riddle. Para los de primer año, felicidades por ingresar a sus respectivas casas; estas los representarán los 7 años que cursen en esta escuela y posiblemente el resto de sus vidas; así que hagan valer los honores de las mismas…se les recuerda que el 3er piso y el bosque prohibido están restringidos para los alumnos de nuevo ingreso.
—Los Jefes de casa son:
~ Hufflepuff, casa de los tejones: Rolanda Hooch
~ Ravenclaw, casa de los cuervos: Rubeus Hagrid
~ Slytherin, casa de las serpientes: Profesora McGonagall
~ Gryffindor, casa de los leones: Profesor Severus Snape
—Disfruten el banquete.
—Otra vez no he tenido suerte. —Suspiró justo cuando pensaba en picar su comida.
—Hola, me llamo Draco Malfoy; heredero de la familia Malfoy, un placer. —Le extiende la mano un joven de bellísimos ojos plateados y muy desaliñados cabellos dorados.
—Harry Potter, de los Potter (media sonrisa) y por lo visto futuro mago salvador del mundo o algo así. —Esta vez sí me río de mi tontería, antes de quedar maravillado con esos bellos ojos grises; que hermosos eran… tan sólo si fueran un poco más oscuros, serian…
—Jajaja, vaya Potter, tienes ingenio. —Sonrió aún más el rubio— Anda vamos a nuestros cuartos.
Nos levantamos para dirigirnos a las mazmorras; ese joven parecía conocer muy bien el castillo y claro que no desaproveché la oportunidad para preguntar.
—Te mueves muy bien.
—Claro. —Gemidito sensual antes de responder, sonrisa sexy, calor para Harry
Me sorprendió su respuesta pero no me disgustó.
—Potter, no me imaginaba tus gustos, pero aunque me siento muy honrado, te advierto que tengo gustos exigentes. —Echó la cabeza hacia atrás y soltó una risa cantarina mientras metía las manos a su uniforme todo desaliñado: corbata floja, camisa semiabierta y pantalones estrechos pero cómodos; su túnica estaba levemente bajada y su bufanda apenas se sostenía en su cuello.
—Ya me quisieras, Malfoy. – Realmente ese muchacho le agradaba bastante.
—Jajaja, ¿ves? Eres muy divertido; disfrutaré tu compañía en los próximos años.
—Pero no me contestaste, ¿cómo es que conoces tan bien el castillo?
—Porque vivo aquí desde pequeño, con mi padrino; digamos que la relación con mis padres nunca fue muy buena. —Se veía bastante despreocupado.
— ¿Tu padrino?
—Sí, es el profesor de Pociones, Severus Snape. —Sonríe. —Desde pequeño me trajo a vivir con él aquí en el castillo; pero ahora tendré mi propio cuarto en la torre de Slytherin.
—Ha de estar triste porque no te tocó en su casa.
—Al contrario, debe de estar feliz; verás, él también es un Slytherin, pero tiene varios años al frente de los revoltosos Gryffindor ya que ningún maestro ha querido estar a cargo de ellos y la única Gryffindor no aceptó el puesto.
—No tenía más ganas de indagar en los conflictos de los profesores así que fui al grano, tratando de no verme tan obvio…
—Ya no vas a dormir con tu padrino….
—Harry, si lo dices así, suena hasta romántico —Risa. —Tengo mi propio cuarto, y todas mis cosas están ahí; Severus me dijo que podía estar ahí cuanto quisiera, que seguía siendo mi casa.
Siguen caminando.
—Definitivamente, este rubio me agrada bastante y me será muy útil . . .
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