La Mazmorra del Snarry
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

La Mazmorra del Snarry


 
ÍndicePortalÚltimas imágenesRegistrarseConectarseFacebook
La Mazmorra del Snarry... El escondite favorito de la pareja más excitante de Hogwarts

 

 Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*

Ir abajo 
3 participantes
AutorMensaje
Araleh Snape

Araleh Snape


One shots-Vacaciones 2015 Juego del verano 1 Reto Feliz cumpleaños Harry 2014 Maraton Junio 2014 Juego palabras hechizadas DIS 2015 Juego lechuza chismosa-D.I.S 2015 Chistes Snarry DIS 2015 Juego Yo entré-D.I.S 2015
Femenino Cantidad de envíos : 4358
Galeones Snarry : 220431
Fecha de inscripción : 16/01/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeSáb Mar 14, 2009 10:12 pm

************************************
sun sun sun sun sun sun sun sun sun
************************************



Humillación Pública







Ron y Hermione decidieron no hacer mucho caso de la nueva obsesión de su amigo, convencidos de que pasaría en poco tiempo, así que durante el domingo disfrutaron de pasar tiempo juntos ¡y a solas al fin! mientras supuestamente estudiaban y dejaron que Harry se matara con fuertes sesiones de abdominales en otro lado de la sala, bajo la mirada curiosa de los demás Gryffindors.


Al otro día, Harry apenas sí se podía ni levantar de la cama, no dejaba de quejarse con cada movimiento que hacía y tuvo que soportar las burlas de Ron, a las que se unieron las de sus demás compañeros. Finalmente se encogió de hombros y se metió a bañar para poder bajar a desayunar, tenía mucha hambre luego de pasar casi todo el fin de semana sin comer. Sin embargo, en cuanto llegó al comedor y vio que Snape y Ángelo iban saliendo volvió a olvidarse de la comida y aprovechando que sus amigos no le prestaban atención, fue escabulléndose tras de los profesores con toda intención de saber el motivo por el cual no parecían muy amigables esa mañana.


- Ya te dije que estoy bien, Abbatelli. –repitió Snape con fastidio-. Creí que había quedado claro que no hay nada que te interese saber.

- Pero sí me preocupo, Severus, sé que algo anda mal y…

- ¡Basta, Abbatelli! –ordenó Snape impaciente-. Pase o no pase nada, no te interesa, tú y yo no somos ni amigos, así que mejor apresúrate a llegar a tu clase y mantente fuera de mis asuntos.


Harry vio como Snape continuaba su camino sin esperar al otro profesor. Abbatelli se quedó en su lugar, con una expresión tan triste en su cara que estuvo a punto de conmover a Harry, sin embargo, cuando lo vio apresurarse para alcanzar a Snape, se olvidó de eso y sintió que volvía a parecerle sumamente desagradable. Estuvo a punto de ir tras de ellos pero Hermione y Ron le dieron alcance y lo condujeron hacia su salón, aquel día les tocaba Transformaciones y no podían llegar tarde.


*************************************************


- No me has contado lo que sucedió en la reunión, Severus. –le dijo Dulmbledore luego de ofrecerle un poco de café al profesor-. ¿Hay novedades?

- Aún no… pero sé que pronto las habrá.

- ¿Podrías ser más específico? Ahora más que nunca me interesan los detalles de tu entrevista con Tom, Severus.

- No, los detalles no te interesan, Albus. Sólo sabrás de resultados, nada más. Ahora tengo que irme, debo impartir clases.

- ¿Has hablado con Ángelo? –preguntó antes de que el profesor se marchara.

- ¿Hay algo en especial que tenga que hablar con él?

- Noté cierto acercamiento entre ustedes este fin de semana y…

- No hay nada entre el profesor Abbatelli y yo, y no lo habrá ni aunque me lo ordenes, Albus, así que olvídalo… no es él quien me interesa.

- Espero que quien te interese no sea quien estoy pensando.

- Descuida, Albus… no tienes idea.


Severus sonrió amargamente antes de salir, decidido a no perder más tiempo con las extravagancias de Dumbledore, ¡sólo a él se le ocurría intentar encontrarle pareja!. Por su parte, Albus se rascaba la barbilla pensativo, por un lado le intrigaban las últimas palabras de Severus… así que sí había alguien que le interesaba y se suponía que él no tenía idea, ¿de quién podría tratarse?... ¿Remus?. Ante esa perspectiva pensó en pedirle ayuda a su amigo, pero no, lo desechó de inmediato, realmente no creía que Severus pudiera haber puesto sus ojos en alguien a quien vivía molestando, eso sería cosa de niños y Severus no era un niño. Probablemente sólo había dicho eso para desconcertarlo y no le daría el gusto, continuaría con su plan con Ángelo Abbatelli.


*************************************************


Era cerca de mediodía, Harry no podía dejar de fruncir el ceño, ahora tenía hambre y mucho coraje. Se encontraba en clase de Defensa con el inepto de Ángelo explicando los pasos de un duelo. En su imaginación, Harry soñaba con vencerlo, con hacerle tragar polvo por haberse atrevido a poner sus ojos en el cretino grasiento… era tan aborrecible la idea que de sólo pensarla parecía sentir que los intestinos se le volteaban al revés. Cuando finalmente se dio la clase por terminada respiró aliviado, la atmósfera cuando tenía a Ángelo cerca se le volvía pesada y asfixiante… todavía no comprendía cómo es que había llegado a creer que le gustara, ahora no sentía ningún tipo de efecto Veela en él, pero eso no lo hacía sentir mucho mejor.


- Pienso que son celos, Harry. –le comentó Ron cuando le dijo sobre la creciente aversión que sentía por el profesor de Defensa-. Como anda siempre tras de Snape piensas que es un tonto por no haberse fijado en ti cuando te gusta tanto.

- ¡Que no me gusta! –casi gritó Harry enfurecido por la socarronería de su amigo-. ¡Te estoy diciendo que ya ni siquiera lo tolero, Ron!

- Es que puede ser que eso sea lo que quieres creer… como un método de defensa para protegerte por haber sido despreciado y cambiado por algo tan horroroso como Snape.

- Bueno… en eso tienes razón. –aceptó no muy convencido-. Snape es malo, es horrible, es el tipo más odioso que he conocido jamás… lo odio, siempre me hace la vida imposible, siempre quiere humillarme frente a medio mundo, ¿y todo porque? Porque odiaba a mi padre… ¿es que no puede crecer? Parece un niño viendo a mi padre en mí… ya debería haber madurado, digo, es un hombre en toda la extensión de la palabra y…

- ¿Quieres dejar de hablar de Snape? –pidió Ron con hastío-. Me aburre, mejor continuemos hablando de tu amor no correspondido.

- Oye, que mi vida no es para que te entretengas. –respondió ofendido-. Deberías ayudarme a entender lo que siento, estoy confiando más en ti que en Hermione… ¡Cielo Santo, debo estarme volviendo loco por hacer esto, o realmente estar muy desesperado!... creo que Hermi tendría más sentido común para dar consejos.

- Si quieres la llamo. –ofreció sinceramente-. A lo mejor es cierto y te ayuda más que yo.

- No, olvídalo, ya la puedo escuchar… “Oh, Harry, es maravilloso que te guste alguien pero no puedes poner los ojos en un profesor, va contra las reglas de Hogwarts”

- Entonces… sí te gusta.

- ¡No! –negó con firmeza-. Eso es lo que diría Hermione, a mí no me gusta Abbatelli.


Ron se rascó la cabeza, confundido por la actitud de su amigo, alguien que no estaba celoso no actuaría como lo estaba haciendo Harry, y en cuestión de celos, creía que podía decir muchas cosas al respecto. Esa noche, Harry miraba el portatraje a un lado de su cama, creía que ya debía devolverlo pero la idea casi le dolía, estaba convencido de que eso era porque significaba tener que buscar a Snape y no por otra cosa. Volvió a tomarlo y colocarlo sobre su cama aprovechando que todos sus compañeros se habían dormido desde hacía más de dos horas, estuvo un rato así, recostado a su lado, cerrando los ojos y aspirando el aroma que emanaba.


Finalmente se decidió, era hora de alejarse de esa prenda de una vez por todas, y de un salto salió de la cama, se colocó la capa invisible y salió de la habitación con el portatraje.


Al llegar a las mazmorras, dudó unos segundos antes de tocar a la puerta de las habitaciones de Snape. Por un instante estuvo dispuesto a marcharse, sobretodo cuando se le ocurrió la terrible idea de que probablemente estuviera interrumpiendo algo… ¿y si Abbatelli estaba ahí? ¿Qué haría si los viera juntos finalmente como pareja?. Pero ni bien había dado un paso para correr lejos de ahí cuando Snape le abrió la puerta, mirándole tan fijamente que su estómago le revoloteó.


- Potter… ¿qué hace aquí a esta hora?

- Yo… sólo vine a devolverle su túnica, profesor. –respondió sintiendo un fuerte calor en las orejas.

- Ya era hora… no creí que para lavar una simple prenda se tardara tanto.

- Lo siento, yo… ya me voy.

- Nada de eso. Pase. –le ordenó haciéndose a un lado para dejarlo entrar ante la sorpresa de Harry-. ¿No creerá que le iba a dejar ir sin asegurarme de que esto no contiene alguna de sus tontas bromas, verdad?


Harry negó sin atreverse a hablar, pero no hizo ningún intento para entrar. Snape tuvo que jalarlo del brazo para obligarlo a obedecer y al hacerlo y pasar tan cerca, Harry percibió de nuevo el aroma, cerró los ojos e instintivamente permaneció cerca del profesor, quien sin darse cuenta de eso, se concentraba en revisar el contenido del portatraje y comprobar que la túnica viniese sin ningún hechizo encima.


- Parece que todo está bien. –gruñó aún incrédulo cuanto terminó de revisar su prenda-. ¿Qué le pasa? –agregó cuando tropezó con Harry al darse la vuelta de manera intempestiva-. ¿Qué planeaba, Potter? ¿Porqué está tan cerca?

- Yo… no planeaba nada, es sólo que no me dí cuenta.

- Bien, puede retirarse.


Harry asintió, pero en su turbación al girar se enredó con sus propios pies y tropezó, estuvo a punto de caer pero un brazo lo rodeó por la cintura para detenerlo. No supo qué pasó después, pero se sentía bien, se negaba a moverse de su lugar, era una sensación única sentirse rodeado de esa manera tan suave, y al mismo tiempo estar disfrutando de ese aroma que tanto le había gustado, cerró los ojos y apoyó una mano en el pecho del profesor, podía sentir los latidos apresurados de su corazón… ¿porqué latía tan rápido?... ¿porqué el suyo estaba latiendo tanto también?


- ¿Potter? –le llamó una voz que le pareció muy sedosa, que acariciaba sus sentidos. Abrió los ojos y se topó con una mirada oscura que le veía confundido-. ¿Se siente bien?... ¿Tuvo alguna visión acaso?

- No. –respondió débilmente, sin poder apartar su mirada de los ojos negros.

- ¿Entonces sólo es torpe por naturaleza?


Eso fue suficiente para despertar a Harry de su ensoñación, indignado empujó a Snape para liberarse de él y salió del despacho hecho una furia consigo mismo. “¿Y bien, Harry Potter, qué demonios pasa contigo? Descubres que te agradan los hombres y ahora hasta las hormonas se te alborotan por el cretino grasiento… ¡que asco, no! ¡Snape no!”. Y decidido a no dejar que su ansiedad por conocerse un poco más le llevara por caminos destructivos, Harry se prometió olvidarse de haberse sentido tan bien en los brazos de Severus Snape.




************************************
sun sun sun sun sun sun sun sun sun
************************************


Última edición por Araleh Snape el Dom Mar 15, 2009 3:27 pm, editado 1 vez
Volver arriba Ir abajo
Araleh Snape

Araleh Snape


One shots-Vacaciones 2015 Juego del verano 1 Reto Feliz cumpleaños Harry 2014 Maraton Junio 2014 Juego palabras hechizadas DIS 2015 Juego lechuza chismosa-D.I.S 2015 Chistes Snarry DIS 2015 Juego Yo entré-D.I.S 2015
Femenino Cantidad de envíos : 4358
Galeones Snarry : 220431
Fecha de inscripción : 16/01/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeSáb Mar 14, 2009 10:14 pm

************************************
sun sun sun sun sun sun sun sun sun
************************************





Harry no quería que llegara el viernes, Abbatelli había organizado una sesión de duelo en el comedor, y odiaba el hecho de que el profesor se mostrara tan arrogante como para verse emocionado por el evento. A él le parecía aburrido, nunca tendrían un duelo en la vida real como les enseñaban en Hogwarts, afuera se defendía la vida, no era para divertirse y le indignaba ver que para los demás parecía un juego, incluso para el mismo profesor que no dejaba de sonreír cautivando a todo aquel que le mirara.


Sin embargo, todo cambió intempestivamente cuando llegó Snape. Comprendió que le ayudaría a impartir la clase y se moría de ganas por ver un resultado semejante al de segundo año con Lockhart.


- Bienvenido, Profesor Snape. –le saludó Ángelo con una sonrisa tan radiante que evidenciaba sus sentimientos por su colega-. Será un honor impartir esta clase con usted y…

- Lo lamento, profesor Abbatelli. –se disculpó Snape no muy sinceramente-. Pero sólo vine a excusarme, no podré acompañarlo, ha surgido un imprevisto que requiere de mi presencia fuera del colegio… Suerte, de cualquier forma.


Snape se giró sobre sí mismo haciendo volar el bajo de su túnica, Harry no le despegó la vista de encima y miró como Ángelo se apresuraba a alcanzarlo antes de que saliera. No podía escuchar lo que hablaban, pero era obvio que el Profesor de Defensa intentaba persuadirlo con sus mejores armas de Veela… y aún así, finalmente Snape salió del comedor dejando al otro profesor suspirando resignado.


- Bien, creo que no cuento con pareja para darles una demostración, así que… ah, esperen un momento. –agregó recuperando su entusiasmo-. Tal vez uno de ustedes se anime a combatir conmigo, sólo serán ejemplos, les prometo que no seré duro… ¿alguien quiere intentarlo?


Todos se miraron entre sí, por supuesto que sería tonto enfrentarse a duelo con el mismísimo profesor, el ridículo era cosa segura. Sin embargo, hubo alguien que pensó diferente. Harry levantó la mano enseguida y caminó con paso decidido hacia el estrado mientras los demás lo observaban asombrados.


- Harry, que bueno que te decidiste. –comentó Ángelo recibiéndolo emocionado-. Creo que será un gran duelo, y como dije, no te preocupes… no es algo real, así que no te lastimaré.


Harry sonrió a medias, ocultando su coraje ante las palabras del profesor. “¿Qué se cree este inútil?” se preguntó enojado. “Ahora mismo lo haré tragarse sus palabras, ¡vaya arrogancia!... ¿pensará acaso que no sé nada de Defensa? ¿O cómo se imagina que sigo vivo?... Voy a gozar mucho derrotándolo, hasta ahora ha demostrado que no sabe nada de duelos, ni de nada de nada, es otro Lockhart solamente, y lo demostraré ante todos”.


Harry y Ángelo se colocaron frente a frente, inclinándose un poco para saludarse antes de empezar. Harry fue el primero que atacó, mandó su mejor Expelliarmus que estaba seguro haría que el profesor terminara estrellado contra la pared contraria, pero ni cuenta se dio cuando su hechizo fue interceptado en el aire y fue él quien sintió el dolor de la pared en su espalda antes de caer al suelo con todos los músculos agarrotados. En seguida, sin haber tenido tiempo ni para sobreponerse, se vio dando piruetas en el aire de manera incontrolable mientras escuchaba algunas risillas de sus compañeros.


La ira y la indignación hicieron presa y de él y consiguió zafarse del hechizo, cayó al suelo de rodillas y ocultó el dolor que sintió al escuchar sus huesos crujir. Sus ojos refulgieron de rabia, y sin pensar en las consecuencias, levantó su varita apuntando al Profesor, decidido a enviar una verdadera maldición que lo haría retorcerse de dolor y gritar clemencia… estaba seguro de ya tener el odio que necesitaba en su corazón para poder conseguirla. Pero al intentar realizarla, notó que su brazo estaba paralizado, todo él lo estaba, no podía hablar y de pronto se vio empujado nuevamente contra la pared y quedar colgando de ella por un gancho invisible. Vio como Hermione y Ron palidecían y la chica gritaba para que el duelo se detuviera, comprendió el motivo de su angustia al sentir sangre resbalando por su rostro. Pero eso solamente incrementó su furia, hizo acopio de todas sus fuerzas y volvió a apuntar al Profesor, éste le miraba de una manera extraña, como preocupado y excitado al mismo tiempo.


Harry sintió como era descendido lentamente al suelo, y de pronto la ira se marchó, le entró una sensación de bienestar y tranquilidad que hacía mucho no sentía, casi podía decirse que era feliz… y una voz le pedía que se rindiera, que dejara su varita en el suelo y entonces todo terminaría. Él no quería, algo le decía que no podía obedecer, pero finalmente lo hizo. Se arrodilló y dejó su varita en el suelo a los pies de su contrincante y pronunció unas palabras que jamás, jamás en su vida creyó que diría… “Me rindo”.


- Eso no puede estar bien. –escuchó que decía la voz temblorosa de Hermione al acercársele-. Usted ha usado un Imperius, Profesor, y esa es una maldición imperdonable… dudo que al Director le agrade saber lo que hizo.

- Señorita Granger… -respondió Ángelo sin impresionarse-… le sorprendería el tipo de maldición que hubiera lanzado Harry contra mí si no lo hubiera impedido. Me parece que algún día me lo agradecerá. Ahora llévenlo a la enfermería, necesita que lo atiendan.


Nadie más dijo nada, cuando Ángelo se volvió a mirarlos con su sonrisa suave y fascinadora, se olvidaron del Imperius y solamente se concentraron en permanecer admirados de haber presenciado un verdadero duelo, sin tomar en cuenta que su esperanza en el futuro había sido derrotado tan fácilmente.


*************************************************


En la enfermería, Harry mantenía los ojos fijos en el techo, aún sin creer lo que había sucedido… un Imperius, se suponía que él podía controlarlo, que era una maldición que lograba vencer… ¿porqué no pudo hacerlo con Ángelo?. A su lado, Hermione y Ron le miraban en silencio, afortunadamente la enfermera dijo que sólo necesitaba descanso, la herida de su cabeza ya estaba curada y no habría consecuencias.


*************************************************


- Lo que hiciste es muy delicado, Ángelo. –dijo Dumbledore cuando tuvo al profesor frente a él, luego de haber sido informado de los resultados del duelo entre Harry y su profesor-. No puedo permitir que suceda de nuevo, y espero que comprendas que le debes una disculpa a Harry, es inconcebible que usaras un Imperius en su contra.

- De acuerdo, Profesor, como usted diga. –respondió dócilmente-. Iré ahora mismo a la enfermería a disculparme con Harry, de verdad lo siento mucho, creo que no pude controlarme, después de todo no estaba enfrentándome a cualquier alumno… era Harry Potter.

- Fuera quien fuera, dentro del colegio no usarás ese tipo de maldiciones, Ángelo.

- Así será… nuevamente, mil disculpas, Señor Director.

- Bien, y cambiando un poco de tema. –agregó respirando hondo para relajarse-. ¿Cómo vas con Severus?

- ¿Ir? –preguntó confundido-. ¿A qué se refiere?

- Él te gusta ¿no?

- Sí, mucho. –respondió enrojeciendo sus mejillas-. Pero…

- Espero que no te des por vencido, Ángelo, aunque veas que mi querido amigo no parezca dispuesto a dar el siguiente paso, sé que tú podrás conseguir que…

- Espere un momento, señor. ¿Está tratando de decirme que quiere que seduzca a Severus?

- Sólo digo que me gustaría ver feliz a mi muchacho y confío en que tú eres justo lo que él necesita… aunque a veces te comportes como un cabeza hueca.


Ángelo se sonrojó pero no pudo evitar sonreír, si el mismo Director le apoyaba, entonces era muy probable que sus esperanzas con Severus rindieran fruto algún día, y ahora tenía muchos más ánimos de llegar a conquistar su corazón. Cumpliendo con su palabra, al salir del despacho fue directamente a la enfermería, a pesar de todo sí se sentía apenado con Harry por haber llegado a lastimarlo.


- Hola, Harry. –le saludó sentándose a su lado, ya no estaban los amigos del muchacho y podían conversar a solas-. ¿Cómo te sientes?

- Bien. –respondió de manera extremadamente cortante-. Le felicito, me venció.

- No es para felicitarme. –respondió sin agraviarse por la pasiva agresión de Harry-. Lo que hice estuvo mal, el Director me ha pedido que me disculpe contigo y por eso he venido.

- No tiene porqué hacerlo, puede decirle al Director que lo hizo y ya.

- Harry, aunque él no me lo hubiera pedido lo haría. Quiero disculparme por lastimarte durante el duelo, debí controlarme, pero a veces mi temperamento no me ayuda y cuando supe que ibas a torturarme sabía que tenía que defenderme.

- ¿Torturarlo? –repitió titubeante.

- No tienes que fingir conmigo, Harry. No se lo dije al Director para no causarte problemas, pero sé que ibas a usar un cruciatus y al final de cuentas, Harry, no deberías olvidar que eres muy poderoso y si no me defiendo las consecuencias pudieron salirse aún más de tu control… no sé si estés conciente de que es probable de que en estos momentos yo ya no estuviera en este mundo y te aseguro que ahora estarías arrepentido de haberlo hecho si te hubiese dado la oportunidad.

- Pues muchas gracias. –respondió mordaz-. Ahora le debo mucho más, ¿no es cierto?

- Creo que entiendo porqué estás tan molesto conmigo y presiento que no es sólo por el duelo, Harry… lamentablemente, no puedo hacerme a un lado. Te veré en otro momento, y que te mejores.


Harry frunció el ceño sin comprender del todo las últimas palabras del profesor, pero no quería tomarse ni un segundo más de su tiempo pensando en él, así que se obligó a no hacerlo, aunque una idea surgía en su mente e iba creciendo como la espuma. Al día siguiente, se levantó mucho más temprano que nadie más, en realidad, apenas había podido dormir, ansiando el amanecer para poder llevar a cabo su plan… ese estúpido de Abbatelli le pagaría muy caro la humillación que le había hecho pasar y se dirigió a paso firme hacia las mazmorras.








************************************
sun sun sun sun sun sun sun sun sun
************************************


Volver al capítulo anterior

Ir al siguiente capítulo
Volver arriba Ir abajo
Susy Snape
Duelista
Duelista
Susy Snape


No tienes logos aún.
Femenino Cantidad de envíos : 634
Localización : Valparaíso, Chile
Galeones Snarry : 17132
Fecha de inscripción : 14/02/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeSáb Mar 28, 2009 8:44 pm

Ese viejo come caramelos, no se cansa de manipular las situaciones.... en vez de dejar que Severus solito se encuentre pareja el le anda imponiendo una...
No recordaba esta escena de la enfermería entre Angelo y Harry.... y sobre todo que Abatelli ya se hubiese dado cuenta de los sentimientos de Harry.

Besos Very Happy
Volver arriba Ir abajo
Araleh Snape

Araleh Snape


One shots-Vacaciones 2015 Juego del verano 1 Reto Feliz cumpleaños Harry 2014 Maraton Junio 2014 Juego palabras hechizadas DIS 2015 Juego lechuza chismosa-D.I.S 2015 Chistes Snarry DIS 2015 Juego Yo entré-D.I.S 2015
Femenino Cantidad de envíos : 4358
Galeones Snarry : 220431
Fecha de inscripción : 16/01/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeSáb Mar 28, 2009 9:09 pm

Dumbledore nunca se imaginó que su querido Angelo no fuera exactamente como le recordaba, jeje, pero ya lo sabrá XD

Angelo siempre supo de los sentimientos de Harry, y no le importó, aunque tampoco es que debiera hacerlo, despues de todo eran extraños, pero de todos modos se le vieron sus negras intenciones jajaja

gracias por seguir comentando star

Besitos!
cheers
Volver arriba Ir abajo
kakarotta
Explota calderos
Explota calderos
kakarotta


No tienes logos aún.
Femenino Cantidad de envíos : 74
Fecha de nacimiento : 09/03/1986
Edad : 38
Localización : México
Galeones Snarry : 16340
Fecha de inscripción : 26/06/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeVie Jun 26, 2009 7:38 pm

ah malvado angelo si ya sabe lo que harry siente por severus, entonces esta actuando de forma injusta aunque como dicen en la guerra y en el amor todo se vale espero que harry pronto abra los ojos
Volver arriba Ir abajo
Araleh Snape

Araleh Snape


One shots-Vacaciones 2015 Juego del verano 1 Reto Feliz cumpleaños Harry 2014 Maraton Junio 2014 Juego palabras hechizadas DIS 2015 Juego lechuza chismosa-D.I.S 2015 Chistes Snarry DIS 2015 Juego Yo entré-D.I.S 2015
Femenino Cantidad de envíos : 4358
Galeones Snarry : 220431
Fecha de inscripción : 16/01/2009

Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitimeSáb Jun 27, 2009 12:55 pm

Angelo actúa algo egoísta, pero por el momento podría considerarse normal porque no lastimó a Harry con mala intención, fue su instinto de defensa, aunque claro, no siempre podría justificarle sus acciones, jeje, ya lo verás más adelante
Razz
Volver arriba Ir abajo
Contenido patrocinado





Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* Empty
MensajeTema: Re: Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*   Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública* I_icon_minitime

Volver arriba Ir abajo
 
Enfermo de amor. Capítulo 5 *Humillación Pública*
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» Enfermo de amor. Capítulo 14 *Amor hasta el final*
» Enfermo de amor. Capítulo 21 *Día de la Amistad... y del amor*
» Enfermo de amor. Capítulo 28 *Amor Filial*
» Enfermo de amor. Capítulo 1 *Aceptándose*
» Enfermo de amor. Capítulo 17 *Indulto*

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
La Mazmorra del Snarry :: Biblioteca de la Mazmorra :: Fanfics Snarry :: Fanfics de Araleh Snape-
Cambiar a: