Mi montruo adorable (fan fic)

Resumen: Un pequeño niño  de ojos verdes cae siempre encima de Severus, no sabe quien es, lo que si sabe es que lo encontrara y lo sacara de esa horrible muggle vida en la que se encuentra atrapado. Para el reto de las mazmorras del Snarry ¨Feliz cumpleaños Severus 2015¨

Advertencias: N-13, pareja Sev-Harry

Disclaimer: personajes perteneces a J.K. Rowlin. Yo no gano más que puntos Snarry con esta historia y diversión, escrito de una fan para mas fans.    



Un pequeño niño de cuatro años, aunque por su aspecto parecía de menor edad, cabello oscuro alborotado y unos hermosos ojos verdes corría lo más rápido que sus piernas le permitían.
Harry Potter no entendía muy bien el motivo por el cual su tío quería golpearlo, pero si algo había aprendido muy bien, era a no interponerse con el enorme puño de Vernon Dursley. Solo que en esa ocasión era diferente, su tío tenía en la mano un objeto, el cual parecía no dudaría en usar como garrote y golpearle.

Harry se escondió detrás de unos contenedores de basura, por lo general después de dos cuadras Vernon desistía de seguirlo, su gordura no le permitía dar más pasos y su falta de condición hacia que lo dejara por la paz. Su tío debía estar muy molesto, iba en la cuarta cuadra y no parecía querer desistir en su búsqueda.

Potter se asomó y de inmediato regreso a esconderse, estaba demasiado cerca, si salía para correr seguro lo cogía, lo mejor era permanecer callado y rezar por que no lo encontrara.

Su suerte no era buena ese día –Aquí estas, maldito monstruo, te voy a dar unos golpes para que se te quite lo anormal ¡Fenómeno! –Levanto lo que parecía ser una pata de la mesa de la cocina, dispuesto a romperlo en la espalda del menor.

Harry solo podía pensar en desaparecer, sus lágrimas comenzaron a fluir, él no había hecho nada ¿Por qué su tío no lo quería? ¿Por qué no podía estar con alguien que si lo quisiera?

Y de pronto el sonido se fue, todo estaba en calma, nadie le golpeaba, asomo la mirada nublada por las lágrimas, enseguida las limpio y se puso de pie ¿Estaba muerto? Todo a su alrededor era blanco, dio unos pasos, no pudo haber ido al cielo, sus tíos le decían que era un chico malo y lo castigaban constantemente.  

Miro en todas direcciones, no había gente, ni puertas, ni caminos, nada, simplemente todo era blanco, comenzó a caminar hasta que noto una mancha oscura, corrió para ver que era, se detuvo a escasos centímetros. Parecía un agujero se arrodillo para acercarse, intento tocarlo y su mano se perdió en la negrura, de inmediato la retiro, asomo la cabeza para ver si podía ver que había dentro, fue entonces que el agujero creció y comenzó a caer, ahora todo era oscuridad, cerró los ojos con fuerza esperando su fin, cuando cayó sobre algo suave.    
 
Harry volteo en todas direcciones, podía ver casas, arboles,  no reconocía el lugar, eso no importaba mucho ahora, al menos estaba de vuelta, aunque no estaba seguro de querer regresar a su casa y mucho menos tenía ganas de ver a su tío.

De pronto el suelo se estaba moviendo ¿Un terremoto?

Un gruñido se escuchó –Lamento perturbar su comodidad pero ¡Podría quitarse de encima de mí!

Harry fue empujado a un lado, este parpadeo y miro al chico que estaba frente a él, no tenía idea de quien era, tampoco como si conociera a mucha gente, lo que si sabía era que había encontrado a alguien, se abrazó fuertemente al otro niño.

Severus Snape estaba con apenas doce años, sentado a la sombra de un árbol, sus vacaciones no tardarían en terminar, una semana más y volvería al colegio, su verdadero hogar, Hogwarts, ya no soportaba más estar entre muggles, sobre todo su padre.

Estaba despotricando mental mente contra su padre, contra los Gryffindors y todo aquel que le había molestado en su primer periodo escolar, cuando algo o más bien alguien le caía encima.

Intento mirar de reojo y noto que un pequeño estaba encima, al parecer el menor no tenía intenciones de retirarse ¡Maldito muggle! Como se atrevía a lanzársele encima, probablemente se subió al árbol y entonces decidió perpetuar su villanía.

Gruño molesto –Lamento perturbar su comodidad pero ¡Podría quitarse de encima de mí! –Empujo al pequeño, como deseaba hacer uso de su varita para darle una lección a ese chiquillo insolente, por lo menos lo reñiría miro al otro y se encontró con una mirada perpleja de un color verde hermoso, justamente como los de su amiga Lily, no pudo pensar más, un abrazo fuerte lo envolvió, pero este abrazo era diferente, se sentía tranquilo, más bien reconfortado, ni siquiera su madre lograba lo que este niño, podía sentir la magia vibrando alrededor, no era un muggle, sin duda alguna era un mago.

Severus recobro la cordura –¿Quién eres? y ¿Por qué te subiste en mí? –Alejo al chico un tanto molesto por permitirle a ese mocoso tantas libertades. Lejos de lo que espero esos hermosos ojos verdes comenzaron a inundarse, las lágrimas bajando por las mejillas del extraño.

–Estaba muy asustado, mi tío, después todo era blanco y encontré un agujero y entonces –El pequeño sorbió un poco los mocos que se le estaban filtrando de la nariz, mientras intentaba limpiar las lágrimas con sus manos –Te encontré –Una sincera sonrisa apareció.

Snape estaba impactado, solo podía pensar en lo hermoso del chico, por alguna extraña razón tenía deseos de abrazarlo y mimarlo, pero eso no iba con su personalidad –No entiendo muy bien que sucedió, lo que si se es que tus padres deben estar preocupados por ti –Severus se puso de pie y le extendió la mano –Y -yo te acompañare a tu casa –Volteo el rostro sentía su cara arder –Apresúrate que no tengo todo el día –El niño lo tomo de la mano, se sentía húmeda, probablemente por las lágrimas que había quitado de su rostro, aun así era cálida –No quiero regresar a mi casa, mi tío estaba muy molesto ¿Puedo quedarme contigo un poco más?

Snape bufo y apretó la pequeña mano –Debo regresar pronto a casa, si esperamos no podre acompañarte.

Harry bajo la cabeza triste –La verdad no se donde está mi casa –El niño parecía que quería volver a llorar.

Severus no podría soportarlo, comenzó a andar jalando al pequeño de la mano –Le pediremos ayuda a mi madre, ella es muy inteligente sabrá que hacer.

Severus no tardó en llegar con su madre y Harry aun de la mano –Madre –Llamo la atención de la mujer.

Eileen Snape miro a verlo -¿Qué ocurre Severus? ¿Ya tienes hambre? Es mejor que entres y comas antes de que llegue tu padre –La mujer estaba por dirigirse a la casa cuando Severus le llamo la atención de nuevo

–Madre este niño se perdió y creo que es como nosotros, tu sabes –Dijo en voz bajita

La mujer lo miro interrogante –Cariño ya estas grande para inventar amigos imaginarios –Sonrió la mujer.

Severus elevo una ceja –¿No lo vez? Lo tengo sujeto a mi mano, es un niño como de cuatro años cabello oscuro y ojos verdes –Snape acerco mas al pequeño –Su nombre es –Se quedo en blanco, no sabía el nombre del mocoso, lo miro –¿Cómo te llamas? –El más pequeño sonrío –Mi tío me llama monstro o fenómeno,  mi tía malcriado o mocoso inútil, mi primo me dice saco de patatas y luego me da un golpe, puedes usar el nombre que quieras, pero si no me das el golpe seria genial.

Snape abrió los ojos como platos –¡Esos no son nombres! ¡Tu familia si que son bestias! Como se atreven a usar esos nombres si eres un niño muy lindo –Detuvo sus palabras al recordar que su madre estaba presente y se sonrojo levemente –¿En verdad no lo vez madre?

Eileen estaba impresionada, después de que volviese del colegio su hijo había cambiado mucho, se había vuelto más reservado y ya no sonreía, ni siquiera había ido a ver a su amiga Lily, ya no sentía la calidez de su hijo, pero quien sea que estuviese con él, le había regresado a su Severus, una lagrima se le escapó de su ojo derecho, la señora Snape abrazó a su hijo. Severus no sabía que estaba pasando, cuando su madre se separó el niño ya no estaba.


Más de un año había pasado desde que vio a ese pequeño, estaba en su tercer curso en el colegio, ni siquiera sabía el nombre de ese niño, lo primero era volverse un mago muy poderoso y así le sería más fácil encontrarlo, por que era un mago, de eso estaba seguro y probablemente no coincidirían si este fuese a Hogwarts, debía apresurarse su familia muggle le debía estar dando muy malos momentos.

Esa tarde en particular regresaba empapado, Potter y su sequito de tarados lo habían lanzado al lago con el calamar gigante, le habían dado un buen susto, malditos Gryffindors ¡Todos ellos!

Llego a su habitación de inmediato se mudo de ropa, se recostó con la cama cuando un bulto le saco el aire del estómago. Severus intento tomar el aire perdido y estaba por gritarle unas cuantas cosas al gracioso que le había aventado quien sabe que cosa, cuando noto que no era una cosa, era el niño ¡Ese niño! ¡Por Salazar! Se abrazó al pequeño feliz –Tonto, no desaparezcas sin avisar –estaba tan feliz de encontrar al mocoso.

El pequeño intento separarse –Lo siento –bajo la mirada –¿Me conoces? –Su cara cambio de inmediato por una de asombro.

–¿No me recuerdas? Fue hace más de un año –Severus miro al pequeño, el cambio era mínimo, parecía que el tiempo no pasaba por el pequeño.

Parecía que el pequeño diría algo cuando un gruñido le hizo detenerse, se sujetó su estómago –Mi tío me castigo y me dejo sin comer, estomago malo cállate –Reprendió a su estómago dándose unos golpecitos.

Snape lo detuvo –No se callara de esa forma –Jalo de la mano al pequeño, la misma sensación de aquel tiempo, cálida, reconfortante, estaba feliz de volver a ver a ese niño.

No tardó mucho en llegar a un lugar secreto cerca de las cocinas, un elfo maravillado esperaba la orden.

–¿Qué quieres comer? –Pregunto Severus.

El pequeño bajo la cabeza –Lo que sea está bien, siempre recibo las sobras de mis tíos así que lo que sea que haya quedado.

Eso molesto demasiado a Snape –¿Qué es lo que más te gusta? O ¿Qué te gustaría comer? ¿Pollo, pescado, carne? Solo di lo primero que te venga a la mente.

El estómago del niño rugió de nuevo –Bueno, una vez había una fiesta y tía Petunia me hizo ayudarla con un estofado de carne, olía delicioso, pero no me dejo probarlo –Hizo una pausa –Si no hay de eso lo siento por pedirlo, lo que sea estará bien –Se apresuró a decir avergonzado por el atrevimiento.

Snape frunció el ceño, por eso ese niño no crecía, su familia lo mataba de hambre, miro al elfo que estaba expectante –Trae estofado de carne con puré de patatas, ensalada y un jugo de calabaza –En cuanto el Slytherin dio la orden el elfo se inclinó y desapareció.

Los ojos verdes miraron asombrado como desaparecía la criatura, de por si era rara, pero quien era el para decir lo que era raro, había caído en un lugar que no conocía y no sabía cómo, pero el chico que estaba con él parecía conocerle, Harry lo miro detenidamente, si se le hacía un poco familiar –¿Estoy soñando? –Pregunto sin darse cuenta.

Snape elevo una ceja –Dudo que esto sea un sueño, pellízcate si quieres comprobarlo –Dijo burlón el Slytherin.

El pequeño sin dudarlo se pellizco una mejilla, gimió adolorido para después tallarse la zona mallugada.

Severus no podía creerlo ¿Qué tan inocente podía ser ese chiquillo?  Iba a comenzar a hablar de nuevo cuando el elfo apareció con la comida. Al verla los hermosos ojos verdes se iluminaron, el niño se pasó la lengua por los labios, comenzaba a salivar, sus manos temblaban se acercaba a la comida y luego desistía, Severus sintió la mirada del menor ¿Le estaba pidiendo permiso? Snape bufo –Come todo lo que quieras, yo ya he comido –Dijo simplemente.

El pequeño no tardo en tomar un tenedor y comenzar con la carne. Severus solo lo observaba, para ser un mocoso hambriento no tenía tan malos modales, el niño se limpió la boca con la manga de su ropa. Snape hizo una mueca de desagrado, retiraba lo dicho.

Escucho unos paso y volteo, el profesor Dumbledore lo miraba con su habitual sonrisa bonachona –Señor Snape creo recordar que en el comedor comió apropiadamente, no está permitido salir tan tarde de su sala común y mucho menos está permitido robar comida de las cocinas –Dijo mirando a través de sus gafas de media luna.

Snape frunció el ceño –No fui yo quien comió, es para este niño que encontré, tenía hambre y –Snape volteo para mostrar al pequeño, ya no estaba…

Albus miro curioso, el Slytherin parecía asombrado –¡El elfo! –Severus miro al profesor –Pregúntele al elfo –Dijo con resolución.

Dumbledore sonrió y llamo al elfo, este de inmediato hizo una reverencia –Tonki ¿El señor Snape te pidió comida para un niño? –Pregunto simplemente, el elfo miro al estudiante.

–El amito señor Snape pidió comida a Tonki, pero el amito estaba solo a pesar de que parecía estar hablando con alguien más –Contesto el elfo.

Dumbledore se acarició su larga barba –Gracias Tonki puedes retirarte –Albus volteo a donde estaba Severus, este estaba llorando, algo que el futuro director no se esperaba

–Mamá dijo no verlo la primera vez que lo vi –Severus miro al Dumbledore –Tiene que ayudarle, estoy seguro de que es un mago, su familia lo trata mal y lo golpea y lo mata de hambre, no entiendo por que solo yo puedo verlo, pero lo veo, ¿Profesor usted me cree verdad? –Dumbledore lo abrazo y dejo que se desahogara –La magia es impredecible mi niño, puede ser producto de tu imaginación o puede ser real –Separo al niño para verlo a la cara –Si no es la primera vez que acude a ti, entonces volverá y entonces preséntamelo debidamente ¿De acuerdo?

Snape dejo de llorar y asintió.

Cinco años habían pasado, a veces se preguntaba si su horrenda familia le había matado o encerrado, no quería perder las esperanzas, ni siquiera sabía su nombre ¡Por Salazar!
Su brazo comenzó a arder el señor tenebroso no estaba de muy buen humor esos días. Severus comenzaba a pensar que no había sido muy buena idea unírsele aunque la causa le pareció bastante atractiva, acabar con los malditos muggles, eso había bastado para aceptar sin condiciones, odiaba a su padre y odiaba a la familia de ese pequeño.

Se apresuró a llegar a donde se encontraba el Lord oscuro, no quería volver a sentir un crucio jamás en la vida.

Todo había terminado mal, un tonto mortífago que se creía superior solo por tener un poco más de antigüedad en las filas del señor oscuro los hizo fallar en su misión, Severus le había advertido que su idea los haría fracasar, pero entonces el orgulloso mortífago creyendo que un novato le quería ganar el favor de su señor continuo con el ridículo plan.

Los aurores pudieron detenerlos fácilmente hubo dos bajas afortunadamente uno de ellos fue ese tonto y varios heridos, Severus pudo rescatar a los heridos y llevarlos con su señor, para su desgracia no pudo evitar el crucio Voldemort le había dicho que era su castigo por ser débil, por no tomar el mando de la situación si sabía que solo habría fracaso.

Severus entro en su habitación, sintió que sus piernas no lo soportaron más y se dejó caer, suspiro resignado, miro en busca de su maleta de pociones, necesitaba tomar algunas si quería mejorar, intento arrastrarse, el cansancio y el dolor eran demasiado, necesitaba descansar un poco, gruño, no primero tomaría las pociones y después podría descansar todo lo que quisiera, intento de nuevo arrastrarse, entonces sintió que algo caía en su espalda, soltó el aire que no sabía que tenía contenido –¡Bájate! –Grito enfurecido.

De inmediato sintió que el peso se quitaba de encima –Lo siento –Dijo una voz temblorosa –¿Estoy en el infierno?

Severus volteo, era el niño, el mismo niño, la misma estatura, el mismo cuerpo que recordaba, la misma edad, sonrió –¿Por qué crees que estas en el infierno?

El niño parpadeo –Este lugar me da miedo y mi tío dijo que los fenómenos y los monstros se van al infierno –Aseguro convencido.

Snape comenzó a reír –No estás en el infierno, estas en mi habitación –El mayor chasqueo los dedos y las luces se encendieron.

El pequeño pensó que el lugar ya no era tan aterrador, sonrió feliz –Yo te recuerdo –Los ojos verdes lo miraron un instante –O quizás seas su familiar, era alguien mas joven –El niño ladeo la cabeza –Cuando lo veas dile gracias por la comida, estuvo deliciosa –De nuevo esa hermosa sonrisa.

Snape no lo pudo evitar abrazo al pequeño –Te voy a encontrar y te sacare de la casa de tus tíos y nunca más permitiré que te golpeen o te falte el alimento, mi monstruito es una promesa –El pequeño cuerpecito no se movía, se sentía cálido, se sentía tan bien, entonces la inconsciencia se lo llevo.

Al despertar pensó que ya no encontraría al pequeño, pero no fue así su cuarto era un desastre y el niño estaba sacando cosas de un cajón –¿Qué haces?

El niño volteo –Buscaba algo para curarte –Apunto con su dedo. Snape miro su brazo tenía un pedazo de tela amarrado, el chiquillo había roto su camiseta, toco con su mano el área, quería sentir la tela y ver que en verdad no era una ilusión, sonrió –El cajón junto a la cama, hay tres frascos tráelos –Ordeno.

El niño de inmediato se puso de pie y fue en busca de los frascos, de inmediato se los llevo a Severus, el mayor los abrió y los tomo uno por uno, sentía el horrible sabor de cada una de sus pociones, hizo una mueca y suspiro, poco a poco hacían efecto.

Unos ojos verde lo miraban expectantes –¿Eso era medicina? ¿Ya se alivio? –Dijo mirándolo de lado.

Snape sonrió –Si, es medicina y ya me cure, gracias por cuidarme este tiempo –El pocionista se arrodillo y lo abrazo, a Snape no le iban los niños, pero este pequeño…  

–¿Es cierto lo que prometió? –Los pensamientos del mayor fueron interrumpidos, se separó del menor y lo miro a los ojos –Soy un hombre de palabra –Contesto.

El niño se alejó y tajo un pedazo de papel y un frasco de tinta –Mi tío dice que mientras no esté en papel no cuenta.

Severus se puso de pie y tomo una pluma –Yo Severus prometo encontrar a mi monstruo adorable y cuidarlo y mimarlo –Decía divertido en voz alta mientras escribía, le entrego el papel al mocoso y este feliz comenzó a dar saltitos –¡Si no cumples te crecerá la nariz! –Aseguro el menor.

Se escuchó que alguien tocaba la puerta, Severus se tensiono al notar que esta persona no se detendría, el chillido de las bisagras anunciaba que alguien estaba entrando a su habitación –Severus me dijeron que el señor oscuro…

Un rubio platinado se quedó perplejo al ver el estado de la habitación –¿Debería prestarte a mi elfo?

Lucius Malfoy había entrado y visto el desorden que había dejado su pequeño, Snape negó con la cabeza –Quiero hacerlo yo –Dijo, ese desorden era lo único que quedaba de su mocoso.


Snape había terminado como profesor de Hogwarts, eso aumentaba las posibilidades de encontrar al menor, tendría que entrar al colegio ¿cierto?
La gran guerra en contra del señor tenebroso no le había permitido buscar debidamente al menor, no sabía su nombre ni su edad actual, so sin contar que ahora era muy viejo –Ahora me crecerá la nariz, como si no fuera lo bastante grande ya –Dijo en voz alta.

–¿Cómo pinocho? –Dijo una voz.

Potter tenía que hacer su gran aparición, el héroe del mundo mágico pudo haber tomado cualquier puesto de gran renombre en el ministerio, pero no, el chico había decidido ser profesor, su colega en el mismo colegio.  

Snape bufo –No tendría por que decirle nada –Snape se quedó mirando al joven –Es una promesa que no he cumplido –No sabía por que, pero lo había dicho.

Harry sonrió –Usted es uno de los magos más fabulosos que he conocido, sobrevivió a Voldemort y a la mordida de Nagini, creo que aún puede cumplir lo que prometió, si necesita ayuda o algo, sabe donde encontrarme –Potter le entrego un libro al profesor y desapareció.

Snape suspiro, el ciclo escolar ya no tardaba en iniciar, mas valía terminar los preparativos para sus clases y también mejor hacia algunas pócimas para la enfermería, nunca se sabía cuándo aparecería otro Longbottom y un Potter listo para usarlas.

Al dar unos pasos se tropezó haciendo caer el libro que el Gryffindor le había entregado, lo miro interrogante ¿Por qué Potter le había entregado ese libro? Que el recordara no le había prestado ninguno, tomo el libro para ver de que trataba, era un cuento muggle llamado Pinocho, lo recordaba bien, su madre se lo había leído alguna vez, ese niño de madera que quería ser humano y que al mentir le crecía la nariz, un pedazo de papel se escapaba por un costado, abrió el libro con temor a que fuese una hoja rota del libro, pero el tipo de papel era diferente, lo miro intrigado, de inmediato reconoció la letra, su letra, no podía ser cierto.

Snape corrió todo lo que podía, se detuvo un instante solo lo necesario para abrirla sin preguntar, miro en todas direcciones hasta encontrar a la persona dentro, lo abrazo por la espalda, era la misma sensación, la calidez y la magia que sentía con ese pequeño –Estoy aquí para cumplir con mi promesa de cuidarte y mimarte –Dijo casi temblando, con aquel papel que había escrito hace muchos años para su adorable monstruo.

¿Sería rechazado? Como no se había dado cuenta, ojos como los de Lily, chico mago viviendo con tíos muggles ¡Petunia! ¡Por Morgana! Todas las pistas estaban allí.

Harry se separó –Pensaba que todo era un sueño, ese papel era la única cosa que me mantenía con la esperanza, cuando entre al colegio y vi que me odiabas no sabía que hacer, después pude conocerte mejor, supe que estabas cumpliendo en parte tu promesa, no me mimabas, pero me cuidabas, así que si esto lo hacer por obligación no tienes que hacerlo, en lo que a mí respecta cumpliste tu promesa –Los ojos de Harry se llenaron de lágrimas, se quitó las gafas para limpiarlas.

–Potter, mira mi nariz ¿Acaso crees que quiero que crezca más? Te lo dije, soy un hombre de palabra, ahora vas a dejar que cumpla con mis promesas y te mime y te cuide hasta que muera –Snape se acercó lentamente al más joven, aun un poco inseguro por lo que el Gryffindor pensaría al respecto.

Harry sonrió, lo hizo como recordaba en aquel niño, se abrazó y sin pensarlo lo beso, lentamente acariciando esos labios, podía sentir la magia alrededor de los dos, se sentía tan bien.

Se separaron por unos instantes mirándose a los ojos –¿Quién soy yo para evitar que un hombre cumpla con sus promesas? Hasta la muerte has dicho señor de palabra –Dijo Harry enrojeciendo en el momento.

Snape sonrió –Hasta la muerte –Susurro para después tomar esos deliciosos labios de nuevo.


Se lo que estan pensando... Este fic era para un long, yo tambien lo pense, pero bueno ya saben vida muggle atareada y esas cosas, si no hubiese terminado el fan art si lo habria hecho long, pero bueno, espero y se paseen porel fan art que prepare para este fic y tambien les guste, gracias por leer!!

Me he quedado con tantas dudas, deberías tratar de continuarlo, la historia da para mucho mas, no seas malita y anímate

Este fic esta precioso ¡Me ha encantado!. En un principio me recordó a una historia en un manga que me gusta mucho, pero luego el plot me atrapó por si mismo y la verdad me da pena que no sea más largo, porque el material daba para mucho más. Bueno, tal vez algún día te animes, porque la verdad tu oneshot está de lujo.

Muchas gracias por escribirlo!

NANNDYTA.- pues como que si me estoy animando pero creo que sera a largo plazo hay un fic que quiero terminar antes jejer... a ver que pasa

lady_chibineko.- manga? cual seria? que bueno que te gusto! yo tambien me quede insatisfecha habia pensado otras cosas para el fic y puede que si me anime, pero no por el momento.

Gracias por leer!!

¡Ha sido tan adorable! Su pequeño mounstrito de ojos verdes.

Ha estado precioso, me encantó. Ahora mismo me pongo a leer los otros one-shot.

que bueno ke te gusto!! no e tenido tiempo de leer los otros, el de gabrielle por que hice el fan art pero nomas jajaj XD!! gracias por leer!

Si es que severus tiene un corazon enorme...
me encanta la personalidad que le das siempre en tus fics.
gracias por escribirlo
(coincido en que seria mejor un longfic)

Hola!
El fic me parecio genial :3

Aunque hubo muchas cosas en solo un one-shot no me quejo, comprendo que sacar el tiempo para un long es complicado...

Yo ame, ame, ame, ame y megaadore la promesa que le hizo Severus y las posibles consecencias XD fue tan malditamente adorable

Te quedo muy bien nos vemos!

Lia Libros.- Trato de dejar lo mas posible la personalidad y que se ajuste a la trama jeje.. que bueno que te guste! gracias por leer!!

xxxIloveKISSHUxxx.- Si la promesa era una de las cosas que tenia muy claras, mas le valia al Slytherin cumplirla!! jeje.. que bueno que te animaste a leer gracias!!

ahh que linda historia...y si concuerdo con las chicas debio ser long...pero no importa porque haci de cortito tambien gustooo y un montooon..>.< excelente sensei..>.<

ya se que se me dan los one que debieron ser long jeje... Algun dia tendre tiempo de poner unasegunda parte jeje.... algun dia U.U
que bueno que te gusto, gracias por leer!!

de este si se me antoja hacer un long fic, pero la vida muggle ya sabes, espero algun dia poder hacerlo, jeje... que bueno que te gusto!!