La Mazmorra del Snarry
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La Mazmorra del Snarry... El escondite favorito de la pareja más excitante de Hogwarts

 

  Amarguras - Cap. 2: El tiempo pasa volando…

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barbaratp
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MensajeTema: Amarguras - Cap. 2: El tiempo pasa volando…    Amarguras - Cap. 2: El tiempo pasa volando… I_icon_minitimeJue Dic 01, 2016 7:40 pm

CAPITULO 2 — El tiempo pasa volando…

La primera semana pasó volando, y mi nueva rutina comenzó. Me levantaba temprano, sobre las 8:00, me duchaba, hacía mi desayuno y me iba por vía flu hasta la chimenea del cuarto donde Snape fue alojado. Dumbledore dijo que sería mas práctico hacer eso que ir a la chimenea desde su despacho y encontrarme con algún cuadro cotilla o con Filch. No podíamos levantar ninguna sospecha acerca del lugar. Así que llegaba al cuarto elegido por Madame Pomfrey, nos saludamos. En seguida todo fue automático. Me sentaba al lado de la cama, respiraba profundo y recitaba los hechizos para la transferencia de magia. Al otro lado del cuarto, Madame Pomfrey vigilaba que todo estaba siendo estable. Despues de algunas horas, yo paraba a descansar, algunas veces charlábamos, y en otras quedaba sólo. En esas horas yo leía algún libro para pasar el tiempo.

Como el cuerpo de Snape no soportaría mucha magia sin sufrir alguna reacción, debía hacer las transferencias lo mas lentamente posible, entonces un proceso común de algunos minutos se alargaba por horas. Había horas en las cuales ni leer me distraía y fue con el tiempo que comencé a observar y hablar con Snape.

Yo narraba desde lo que hacíamos con él para que regresase a la vida hasta lo que sucedía en la Madriguera, en las pocas veces que fui allí. Mi relación con Ginny no funcionó. Yo me volví alguien bastante solitario y ella no aceptó este hecho, por eso decidimos continuar sólo como buenos amigos. Y hasta eso le conté a él.

Un día por curiosidad le pregunté a madame Pomfrey si el podría escucharme. Y ella me respondió de una manera brillante.

— Señor Potter, sino recuerdo mal algunos muggles creen que en coma pueden escuchar a los familiares, médicos y enfermeros que los rodean. Que le contará al profesor Snape entonces? Él podría muy bien despertar sabiendo hasta quien le salvó antes o mismo lo que estamos hablando. Y es bueno que usted esté hablando con él, eso ayuda en la recuperación y está dando una respuesta positiva. Si continuamos así podremos avanzar hasta un mes en el tratamiento.

Los días se transformaron en semanas y ellas se transformaron en meses. Cuando me di cuenta ya era agosto. Faltaba un mes para la reapertura de la escuela. Era impresionante como con magia una reconstrucción que tardaría en el mundo muggle una media de mas de un año llevó sólo unos cuatro meses. En breves sería el primero de septiembre y Hogwarts sería abierto y un nuevo año escolar daría comienzo.

Mientras tanto, Severus continuaba progresando a pasos lentos, pero sin retroceder nunca. Si, comencé a utilizar su nombre como parte del tratamiento. No habría mas clases para mi, Hermione seguramente volvería para completar sus estudios. Pero la vida para mí siguió otros rumbos. Snape ahora era Severus pero recibiendo todo el respeto de mi parte.

Ayudé a que lo absolvieran en su juicio por su antigua participación en los movimientos con Voldemort, y así evitar que lo mandaran a Azcaban. Mostré sus recuerdos, pero no informé que él se encontraba con nosotros. Ni siquiera Kingsley Shacklebolt sabía eso. Para todos, él aun era un fugitivo - ahora libre de cualquier cargo - o un desaparecido más en la guerra.

Pero por mas que yo me alegrase por todo lo que estábamos haciendo, había algo que me molestaba. Luego de los primeros meses necesité ayudar a Pomfrey a cuidar a Severus, lo que no era tan normal era que yo terminara excitado al tocar su cuerpo - ahora ya caliente por causa de las semanas de transferencia mágica y no tan helado como antes - y aun mas cuando Pomfrey le quitó la parte superior para poder comprobar las heridas producidas por la mordedura.

Por lo que supe al principio eran una cicatrices horribles, pero los elfos, Pomfrey y mi magia ya en Severus hicieron que ellas cicatrizaran de manera regular formando finas líneas de tono mas claro que su piel. Me pasé pensando en lo genial que sería probar aquel pedazo de piel.

Dejé aquel episodio de lado, hasta que con los días comencé a pensar aun mas en Severus. Ya fuese al tomar una copa de whiskey de fuego e imaginarle a él disfrutándola conmigo, o al dormir y despertar sudado despues de ciertos sueños. No sé realmente que decir, pero con el tiempo mi afecto por él se transformó en deseo, pasión, amor. La única explicación era que me estaba volviendo loco.

Pensé en hablar de esto con alguien. Pero ahí venía la cuestión. Con quién? con Ron no sería buena idea, él primero me llamaría loco por salvar a Severus, despues me obligaría a tomar Veritaserum para ver si yo estaba bajo algun hechizo oscuro. La profesora Minerva y Hermione eran una buena elección, pero yo no sabía si sería la mejor solución. Me sentiría incómodo hablando de ello. Más con ellas.

Podría hablar con Severus, pero no lograría nada. Él estaba en coma. Y aunque me escuchara, si él pudiera, lo que me respondería sería algo como "a ver señor Potter, acaso un gato le comió la lengua o sólo permanecerá callado en mi presencia mirándome?".

— Pero en que mierda estoy pensando? Severus jamás aceptaría de buen grado lo que yo siento por él. Ni siquiera sé si es gay. Dioses yo mismo estoy teniendo dudas sobre mi sexualidad?

Decidi que estaba divagando por encima de las nubes y que debería acostarme mas temprano. Me acosté en la cama y me quedé dormido de inmediato debido al cansancio del día. Pero no contaba con lo que me esperaba en el reino de los sueños...

Estaba al lado de la cama de Severus, su rostro estaba mas rojo de lo normal, sus mejillas tenían un tono sonrojado. A cada transferencia de magia él iba mejorando, pero aun así no salía del coma. Dumbledore me había dicho que yo tendría que hacer de nuevo el viaje para buscarlo. Cansado de observarlo de lejos decidí tocarle. Pasé suavemente los dedos sobre sus dedos. Subí por sus muñecas siguiendo el contorno de sus brazos doblados, hasta su rostro. Su barbilla, su piel. Aquellos labios. Deseaba más de todo aquello, tocarle profundamente. Deslicé los dedos por entre sus cabellos sedosos que cayeron sobre sus ojos cerrados, que anhelo por ver aquellos ojos observándome como si pudieran ver mi alma.

Sus labios aun me tentaban, entreabiertos, secos. Necesitaban hidratación, y que sería mejor que mis labios humedecidos para esa tarea?. Sin pensarlo mucho me impulsé y lo besé. Fue un simple roce, un pequeño toque. Pero no necesitaba mucho mas.

Utilicé mi lengua, como su rostro no se movió, abrí sus labios a la fuerza tirando de su barbilla. Que maravillosa sensación poder besarle. Mismo su boca inmóbil era una ambrosía para mí. Por Merlín, podría hacer eso eternamente.

Dioses! que estaba haciendo? La realidad me golpeó. Besaba a Severus Snape mientras él estaba en coma, eso era un atentado, un abuso. Me bajé de su cuerpo, aun abrumado por su sabor. Recosté la cabeza sobre una de sus manos que estaba entrelazada con las mías. Me quedé dormido y fui despertado por un suave toque en mis cabellos. Levanté mi mirada y pude ver aquellos irises negros. Onix contra esmeraldas. Nuestras miradas se cruzaron. Severus había despertado. Pero como?

— Usted despertó.

— Buena deducción Potter, acaso necesitó la ayuda de Granger para descubrir o fue todo mérito suyo? -habló con una sonrisa sarcástica en su rostro.

— Pero usted estaba en coma - hablaba aturdido de forma atropellada por la tanta euforia.

— De nuevo excelente, pero como ya no soy su profesor no puedo quitarle puntos por su tonta deducción. Es claro que yo estaba en coma Potter, escuché todo lo que hablaban a mi alrededor, hasta que de la nada sentí a mi mas odiado alumno «intentar» besarme. Que mierda fue eso Potter? - su voz demostraba furia, un odio que nunca había visto.

— Y-yo, yo...

— Tan incoherente como siempre señor Potter. Ahora mismo quiero que me explique por que demonios estaba besándome hace un rato, es una orden!

No podía vacilar, su rostro demostraba que me mataría si no se lo contaba. Pero no podía solamente decirle «Te amo profesor», sería una mala idea. Yo no sabía si a él le iba a gustar.

— Estoy esperando Potter, apresúrese, no tengo todo el día. Quiero una explicación, y la quiero ya!

— Yo lo estaba besando...

— Eso ya lo sé, continue Potter.

— Yo lo estaba besando, porque yo quería saber cual era el sabor de sus labios. Y-yo, yo... yo creo que estoy enamorado de usted - disparé como si fuera la mayor bomba del siglo.

Antes incluso de que yo pudiera tener una respuesta de él sentí mi rostro empujado hacia arriba, unas manos hundidas en mis cabellos rebeldes. Sentí una presión en mis labios. Merlín! Él me estaba correspondiendo.

— Si usted no abre la boca, no podré realmente corresponderle - habló entre dientes, obecedí a lo que me pidió y abrí mis labios - aquello que usted hizo no se comparaba con un beso, esto sí.

Pude sentir su lengua caliente y áspera como la de un gato adentrarse en mi boca, el recorrió mis dientes, siguió con mi lengua. Cielos, yo estaba en el paraiso. Descendí con mis manos lentamente por el lateral hasta su espalda. Él me empujó para estar mas cerca apretando mi nuca con fuerza. El aire se hizo necesario. Aun separando los labios de su rostro no se alejó de mi.

— Eso señor Potter si es un beso de verdad, y no aquello que me diste. Ahora si te pudieras apartar y dejarme descansar sería genial.

Le observé incrédulo. Quien pensaría que él me besaría y despues me echaría puerta afuera. Siendo que yo salvé su trasero.

— Quita esa cara Potter, queda peor que la de tu padre. Si te estás preguntando por que te besé yo te responderé. El sentimiento que tienes por mi no es recíproco, yo no siento nada por tí, aparte de desprecio y odio.

— Entonces por que me besaste? - de mis ojos ya comenzaban a salir lágrimas.

— Por que fue bueno, no podemos desperdiciar las oportunidades además de que necesitas aprender a besar. Eres pésimo hasta en eso, decidí enseñarte y mira es increíble, aprendiste con rapidez. Ahora si me lo permites quiero dormir un poco mas cofortablemente antes de aguantar a todos a mi alrededor.

El golpe me desoló. Él me usó. Fui un juguete en sus manos por unos minutos. Me sentía horrible. Quería enterrarme en un agujero cualquiera y no salir nunca de allí.

— Usted me utilizó, sólo me utilizó! desgraciado, bastardo! yo salvé su vida y así me lo pagó, destruyendo mis sentimientos y dándome falsas esperanzas!?

— Pobre Potter. Creiste que perdería mi tiempo contigo? Para tu información, eres tan prepotente e inconsciente como tu padre. La única cosa que posees de valor son los ojos parecidos a los de tu madre. Sólo eso. Ahora suma, yo te odio, tu me odias. Esa reciproquidad es mas que obvia. Y si, yo te usé, fue bueno besar a alguien aunque ese alguien fueras tu.


Desperté sudando y asustado. Mi cuerpo hervía. Había soñado con él. Él despierto, vivo y bien. Pero también que me utilizó. Por Merlín aquello sólo fue un sueño, aun así yo estaba llorando. Lloré por una mierda de sueño?

Me levanté con rapidez, fui al baño y me duché, necesitaba relajarme. Tenía que descansar. Pero como descansar si mi mente sólo pensaba en Severus, decidiendo por ahora traerme imágenes dolorosas de él. Me recosté dentro de la bañera sintiendo el agua caliente relajarme. Respiré profundo, intentando con todas mis fuerzas alejar aquellas imágenes de mi mente. Deseaba con todas mis fuerzas que Severus despertara, pero jamás querría que aquella mirada de odio se dirigiera hacia mí.

Respiré aun mas profundo. Tenía que calmarme, dentro de unas horas estaría junto a él transfiriéndole magia, necesitaba estar tranquilo para que su recuperación fuera buena.
Salí de la bañera enroyado sólo con una toalla a la cintura. Como ya eran mas de las 5:00 opté por vestirme y tomar un café. Quien sabe si llegando mas temprano podría terminar mas rápido mi parte e irme mas temprano. Cuanto menor tiempo junto a la tentación, mejor.

Aparecí en Hogsmeade y seguí a pie hasta Hogwarts. Si alguien me encontrase podría decir que estaba yendo a alguna reunión en la escuela. Pero por mas increíble que pareciera no vi ningun alma en las calles. Continué con tranquilidad, pasando por el portón. Con cada día la reforma de la escuela estaba dejando el lugar tal como yo lo recordaba antes de la batalla.

Subí las escaleras y noté un movimiento diferente en el despacho. Voces eran escuchadas como si estuvieran gritando, pero como si intentaran evitarlo. Algo muy malo estaba sucediendo. Antes de que pudiera girar el pomo y abrir la puerta, esta fue abierta por Madame Pomfrey.

— Potter ahora mismo necesitaba hablar contigo - ella parecía abatida.

— Que sucedió?

— Severus querido, eso sucedió. Él empeoró hoy a la mañana. Aun haciendo las transferencias su cuerpo está entrando en rechado de la energía de un núcleo diferente. Yo sabía que eso podía suceder, pero no con tanta rapidez.

— Él que?

— Señor Potter él está rechazando el nuevo núcleo. Dumbledore cree que podemos esperar, pero yo no pienso perder a ningún paciente mío. Entonces trata de sentarte al lado de Severus, primero vamos a estabilizarlo y mas tarde daremos inicio al ritual. Necesitamos hoy hacerlo hoy, antes de que algo peor suceda. No sé si él resistirá mas tiempo.

Mi cerebro se nubló y lo único que yo hacía era seguir las instrucciones de Madame Pomfrey. Ella me guió del despacho al cuarto, en la sala pude ver a la profesora Minerva, al profesor Dumbledore y a los cuadros de lso antiguos directores discutiendo, ellos me saludaron brevemente antes de que yo desapareciese por el umbral de la puerta, me sienté con fuerza al lado de la cama. Severus parecía muerto, igual que la primera vez que estuve allí. Parecía que habíamos retrocedido años.

Entré en desesperación. Merlín que él no muera. No puedo dejar que eso suceda. Yo te salvaré Severus.
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Amarguras - Cap. 2: El tiempo pasa volando…
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